Así que eso eran (Bars and Melody)

CAPITULO 79

*Las amigas de Cati vuelven a la historia, así que si no se acuerdan son Angie, Jose y Ori*

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S: -Pero... qué?! – exclamó.

Yo: -Si, eso dijiste.

S: -No, nunca diría algo así.

Yo: -Y por qué lo hiciste, entonces?!

S: -Me acuerdo que no me dejaste terminar. Me interrumpiste y dijiste que me fuera – hizo cara de perro triste mojado(? a lo que reí – amo ver tu sonrisa. Te amo a vos – se inclinó a darme un beso pero me corrí hacia atrás – Hey! – dijo riendo.

Yo: -Terminá de hablar, lo que decías anoche.

S: -Oh, si emm...

Yo: - Lo que pensaba. Me voy – me di la vuelta y empecé a caminar. Santiago corrió hacia donde yo estaba y comenzó a hablar.

S: -No te vallas, estaba pensando en qué me había quedado. Y me acordé – dijo orgulloso – bueno, que ellos decían todas esas cosas pero yo les decía que no. Que te merecías a alguien que no sea un mujeriego que anda apostando a ver a cuántas se chapan en una noche. Yo ya te veía hermosa y cuanto Tuca me dijo que vos eras la chica del avión, no dudé en ir a hablarte.

Yo: -Y por qué me diste un beso?

S: -No sé, impulso, creo. Pero... - siguió hablando – cuando empecé a conocerte mas me enamoré mucho más de vos. Sos preciosa por dentro y por fuera. Estoy enamorado de vos, Celi.

Yo: -Perdón – lo abracé y me lo respondió.

S: -Me había preocupado mucho anoche – decía mientras me acariciaba el pelo y depositaba un beso en mi cabeza – No sabía qué te había pasado.

Yo: -Te prometo nunca más no dejarte terminar lo que tenés que decir. Perdón.

S: -No pasó nada, Celi. Ya está – nos separamos del abrazo – ahora... - dijo para cambiar de tema – estoy celoso.

Yo: -Por qué?

S: -Porque te vestiste así para venir a almorzar con los hijos de los jefes de tu mamá y no sabías quiénes eran.

Yo: -Estoy mal vestida – dije mirando mi ropa.

S: -No, estás preciosa. Pero si eran otros los chicos que venían? Iba a tener que pelear.

Yo: -Ay, Santi! – reí.

S: -Ya te dije que te amo?

Yo: -Hoy no...

S: -Mentira, si te dije – rió – pero te lo diría una y otra vez. Te amo. Te amo. Te amo. Te amo.

Yo: -Entramos?

S: -Te amo. Te amo. Te amo.

Yo: -Tengo hambre.

S: -Te amo. Te amo. Te amo. Te amo. Te amo. Te amo – le di un beso.

Yo: -Yo te amo más – sonreímos.

S: -Entramos? Tengo hambre – lo miré mal – qué?

Yo: -Nada... - reí.

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