Narra Rose:
Hoy el cielo estaba nublado y hacía frío, lo que era raro en Nunca Jamás. Desde que Garfio se había ido, sólo había días soleados y los únicos días grises era cuando Peter y yo discutíamos por alguna estupidez, aunque no soportamos pasar más de un día peleados; y siempre lo resolvemos besándonos.
Peter es el mejor novio del mundo, no había tenido tantos además de él, y me alegro muchísimo de haber venido aquí. Me pregunto qué hubiera pasado de no haber conocido a Pan, seguramente hubiera terminado con un idiota. Aunque Pan es un idiota, de los buenos. Lo amo demasiado, y aprovecho cada oportunidad para recordáselo; y él también.
Todo lo demás sigue exactamente igual: los niños perdidos siguen igual de traviesos, Félix sigue bromeándole a Pan sobre que me comparta, a lo que él responde con un zape detrás de su cabellera rubia, y yo sigo totalmente enamorada de Peter.
Volviéndo al clima, anoche hacía frío. Eso es raro. Pero no era un frío de todo el día, fue una correntada fría y me dió una sensación rara, como si la ventisca anunciara algo. No algo bueno, algo malo. Según yo. Y sabía que Peter también lo había percibido, no sabe mentir porque lo conozco tanto que ya sé cuándo está mintiéndo y cuándo no.
Hoy debía asistir a nuestra caminata diaria con los niños perdidos más pequeños, de la cual ni Peter ni Félix participarían porque tenían otra tareas de las cuales no podían hablarme que debían cumplir. Malditos guarda secretos.
Salí de la tienda luego de colocarme la capa azul, esperando encontrarme con el clima frío que había permanecido. Anoche no lo había sentido porque Peter no dejó que me soltara de él en toda la noche. Y había dejado que durmiera un tiempo más ésta mañana con la calidez de su capa sobre mi cuerpo. Esos eran los beneficios de ser la reina de Nunca Jamás.
Me encontré con Pan fuera de la tienda, dándole órdenes a los pequeños que estarían en la pre-adolescencia. Me vio y sonrió, envolviéndome en sus brazos. Su cuerpo estaba cálido, y eso era perfecto para mi cuerpo frío que acababa de despertar.
―Buenos días, cariño ―dijo provocando una sonrisa de mi parte, aún no lograba acostumbrarme a ése apodo que ya hace un año que usaba. Me seguía sonrojando cuando me decía eso, y eso era el objeto de burla de Pan.
―Buenos días, amor ―yo también tenía mi propio apodo para él, aunque él amaba que le dijera así, no le gustaba que los demás niños lo llamaran "amor" en broma, burlándose de nuestras cursilerías.
―¿Tienes frío? ―me pregunta separándose de mí y sus ojos se encuentran con los míos.
―Estoy bien, Peter. Tu capa es muy calentita, ¿sabes? ―le respondí sonriendo, a lo que él besó mi frente.
―¿Tienes frío, cariño? ―interrumpe Félix imitando la voz de Pan, aunque lo hace terriblemente mal―. Yo tengo una idea para que entres en calor ―dice provocando un sonrojo en las mejillas de ambos, lo miro con los ojos como platos. ¿Le contó a Félix de nuestra vida personal?
―¿Le contaste? ―pregunté enojada y me separé de él.
―Yo no fui ―dijo Pan con nervios que saltaban de sus ojos al verme enojada y al tener que discutir nuestra vida personal en frente de los niños perdidos.
―En realidad no, lo deduje ―dice Félix―. Pero me hubiese gustado oír los detalles... ―fue interrumpido por el zape que Peter le dio en la nuca, haciendo que Félix se sobara la parte que le dolía y maldijera por lo bajo.
―¿Puedes dejar de ser tan pervertido, Félix? ―le dije con las cejas arribas y luego señalé a Peter―. Tú y yo vamos a hablar.
―Ya te dije que yo no fui, por favor, Rose ―caminó hacia mí e hizo un puchero. Aunque intentaba ponerme seria pero su pequeño puchero me estaba derritiendo―. Por favor... ―rogó.
Rodé los ojos y sonreí, mientras el me envolvía en sus brazos y me elevaba un poco. Yo me reí y él me bajó. Supongo que ahora va a besarme para remediar todo, como siempre pasa.
Se acercó a mis labios y los rozó en primer lugar, luego los unió completamente moviéndolos con ferocidad. Nunca me había besado así en frente de todos los niños perdidos, pero parece que sólo quiere molestarlos. Es divertido.
―¡Consíganse una habitación! ―gritó un niño perdido.
Suspiré contra los labios de Peter, verificando si él quería que nos separáramos, pero parece que no. Su agarre se hizo más fuerte y sus labios se movieron más rápido, dando como resultado mi falta de oxígeno. Me estaba besando apasionadamente y no entendía muy bien por qué.
Nos separamos con los labios hinchados y rojos, y con nuestros pechos subiendo y bajando rápidamente. Siempre tenía el mismo cosquilleo en el estómago cada vez que me besaba.
―¿Por qué ha sido eso? ―logré formular mientras intentaba calmarme.
―Porque no voy a verte hasta que vuelvas del paseo. Es un recuerdo de ti ―dijo acariciando mi mejilla.
―Tienes toda la vida para recordarme ―lo abracé.
―Te amo.
―También yo, amor.
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𝐿𝑜𝑣𝑒 𝑛𝑒𝑣𝑒𝑟 𝑓𝑎𝑖𝑙𝑠 [𝑃𝑒𝑡𝑒𝑟 𝑃𝑎𝑛 𝑂𝑈𝐴𝑇]
FanficPrólogo: "Nadie escoge su amor, nadie el momento, ni el sitio, ni la edad, ni la persona..." #1 en OUAT fanfic el 8/06/2019 #1 en Neverland el 27/06/2019 #1 en Robbie Kay el 26/08/2019 #2 en Peter Pan el 24/09...