Dioses

ERLANG SHEN: EL SABIO ILUSTRE

Muchos son los cuentos y leyendas sobre Erlang Shen.

Se dice que al oír que las tierras de los ríos que rodeaban su hogar fueron consumidas por las inundaciones, fue a diseñar represas y canales. Sin embargo, la verdadera fuente de la catástrofe resultó ser un malvado dragón. Con siete compañeros, Erlang Shen embosco a la bestia.

Cobarde y rápido el dragón se deslizó en las aguas de los caudalosos ríos, pero Erlang Shen lo capturo con una gran cadena y lo envolvió debajo de un templo. Por ello  las inundaciones se calmaron.

Cuando las payasadas del problemático Sun Wukong provocaron la ira del Emperador de Jade, Erlang Shen se enfrentó al Rey Mono en el campo de batalla. Para todas las formas que Sun Wukong tomó, Erlang Shen tenia una para contrarrestarla. Al otro lado del mar, en el cielo y en la tierra se enfrentaron. Y fue vencido Sun Wukong, quien fue atrapado y encerrado.

Cuando las personas se vieron afectadas por los demonios y monstruos, Erlang Shen se sacrificó para mantener a salvo a sus compatriotas. Tomo una lanza de tres puntas  en la mano y un perro de caza a su lado, así ningún mal podría poner en peligro a los inocentes del Imperio. Por lo tanto, Erlang Shen llegó a ser amado y adorado.

Hijo de un  mortal y una diosa, él es de dos mundos. Él es a la vez general y el soldado, sin embargo es un humilde hombre, con las venas llenas de la sangre de los hombres y la sangre divina de su tío, el Emperador de Jade.

Después de haber subido por encima de sus orígenes prohibidos, Erlang Shen ha demostrado a sí mismo entre los más grandes héroes en el Imperio de Jade. Quizás es por eso que ahora toma el campo.

Ningún demonio, ni dragón, ni siquiera el propio Rey Mono se ha destacado en su contra y ganado.  Erlang Shen ira a luchar, y será llevado a otra leyenda.