Temp III / Cap VII

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[NARRADOR]

No habían cruzado ni siquiera al otro lado de la carretera cuando Stiles comenzó a sentir un escalofrío que le recorrió de pies a cabeza. El ojimiel intentó dejar esa sensación a un lado y centrarse en que todos sus sentidos estuvieran alertas. A su lado, Nikolai se veía realmente tranquilo, como si no solo una, sino un grupo de criaturas desconocidas que acababan de llegar fuera algo de todos los días.

El joven alfa intentaba emular esa actitud, aunque más que él era su lobo el que quería hacerlo. Ya que la presencia del alfa mayor le daba la sensación de que el ruso fuera una especie de mentor para su parte lobuna, un mentor el cual le podía ayudar con su parte de alfa.

La tranquilidad que ambos estaban intentando mantener se vio quebrantada cuando un aullido se apoderó de los oídos de ambos. Quienes se pusieron tensos mientras comenzaban a mirar hacia todos lados, intentando ver de donde había venido aquél ruido.

- El eco es una mierda -Se quejó el alfa menor. 

- Vete acostumbrando, chico -Le aconsejó el ruso.- En este bosque hay mucho eco.

Aquella pequeña conversación se vio interrumpida por un segundo aullido, el cual se notó que fue ejecutado por dos lobos a la vez y, gracias a eso, ambos alfas pudieron localizar exactamente de dónde venía. Por lo que comenzaron a correr en esa dirección.

Ambos llegaron a un pequeño claro, en el cual la niebla parecía concentrarse como si fuera atraída hacia allí. Al llegar, el alfa menor recorrió todo el lugar con la mirada, no había nada ni nadie allí. Tampoco sentía ningún aroma extraño, lo cual le hizo sentirse incómodo, le molestaba de sobre manera haber escuchado el aullido pero no poder rastrear a los dos lobos que habían compuesto aquél ruido.

- ¿Hueles algo? -Le preguntó a Nikolai.

El mayor no respondió, sino que se quedó mirando hacia un punto en específico, entre los arbustos. Stiles observó hacia el mismo punto, viendo como de repente un par de ojos azules brillaban allí. No los reconoció hasta que la persona dueña de ese par de ojos salió de su escondite, con sus garras fuera.

- Peter -Jadeó Stiles en sorpresa, no pudiendo creer que el lobo estuviera frente a él.

- ¿Lo conoces? -Le preguntó el alfa ruso.

- Si.

Peter observó a Stiles y luego clavó su vista en el otro alfa, cambiando su expresión de una seria a una de furia. De repente, Peter se lanzó encima del alfa menor.

El ojimiel pudo haber esquivado el ataque, pero le ganó el shock de acabar de ver a alguien que llevaba casi un año sin ver. Cuando cayó al suelo a causa del tacleo de Peter, su nuca chocó contra el suelo y le desorientó aún más, si es que eso era posible.

- ¿¡Qué hiciste!? -Le gritaba el ex-alfa mientras le golpeaba el pecho, dejándole sin aire.

Los golpes cesaron cuando Nikolai le quitó al hombre mayor de encima y lo arrojó hasta el otro lado del claro mientras soltaba un fuerte rugido. Haciendo que Peter se encogiera un poco, pero no consiguió que se sometiera.

Cuando los dos lobos mayores iban a lanzarse el uno contra el otro, Stiles se levantó a gran velocidad y se colocó entre ellos. Llegando en el momento justo en el que ambos corrían hacia el otro, por lo que cada una de sus manos quedó en el pecho de uno de los lobos.

- No necesitamos una pelea justo ahora -Dijo mirando a ambos con una expresión seria pero nerviosa.- Peter, no sé qué crees que hice, pero sea lo que sea no es verdad.

- ¿Dónde está Ana? -Preguntó el mayor con la mirada perdida.

- ¿Ana? -Stiles estaba confundido, no entendía qué tenía que ver su beta con todo eso.- Ella está bien, está en mi casa con los demás.

Peter hizo además de querer decir algo más, pero dos pares de pasos que iban corriendo directo hacia donde ellos se encontraban le hicieron callar.

- ¿Ahora qué? -Preguntó Nikolai en voz alta.

Por el mismo camino por el que habían llegado los dos alfas, aparecieron las dos personas a las que Stiles menos pensó que iba a ver. Aunque debió sospecharlo apenas y vio a Peter allí, él nunca vendría solo.

Antes de que el ojimiel pudiera hacer cualquier cosa, Scott ya le estaba abrazando como si se le fuera la vida en ello. Por poco y le quiebra alguna que otra costilla, aunque al alfa más novato no le molestó, había extrañado a su amigo.

- Es bueno verte, Scotty -Le dijo palmeándole la espalda varias veces.

Stiles miró por encima del hombro del alfa verdadero y clavó su vista en la segunda persona a la que no creía que fuese a ver tan pronto, a la cual también le hubiera gustado encontrarse en otras circunstancias. Derek le miraba de igual forma, con los brazos descansando a los lados de su cuerpo y los músculos algo tensos, se notaba a la vista que la incomodidad del reencuentro también le afectaba.

Intentando quitarle intensidad a la mirada del otro, Stiles le sonrió. Aunque esto no fue muy buena idea, ya que solo provocó que el pelinegro frunciera el ceño.

- "No soy más idiota porque solo me falta olvidarme de cómo respirar" -Se insultó a sí mismo mentalmente.

Cuando Scott finalmente le liberó de aquél abrazo de oso, o mejor dicho de lobo, los tres lobos recién llegados clavaron la vista en Nikolai. El cual hasta el momento solo había estado observando lo que ocurría frente a él sin intervenir.

Al tener las miradas de los recién llegados clavadas en él, el ruso alzó una ceja y miró a Stiles. Como si estuviera pidiéndole que hiciera algo, era obvio que a Nikolai no le gustaba ser el centro de atención, se notaba a la legua.

- ¿Quién es él? -Preguntó de repente Derek, sonando molesto.

- Chicos, él es Nikolai. Nikolai, ellos son Scott...

- Hola -Saludó el alfa verdadero.

- Peter.

- Lamento haber intentado atacarte -Se disculpó el mencionado.

- Lamento haberte lanzado contra el suelo.

- Y Derek -El mencionado miró al otro alfa con el ceño fruncido.- El cual, como puedo notar, no ha cambiado en once meses. 

- Me reiría si no fuera porque estoy furioso con el mocoso -Dijo Peter.- Tienes mucho que explicar, Stilinski.

El mencionado se rascó la nuca algo nervioso, tragando saliva al mismo tiempo que intentaba pensar en qué decir.

- Este no es lugar para dar explicaciones -Soltó sin más Nikolai.- Pueden reunirse en otro momento, ahora necesito que Stiles me acompañe para vigilar que nuestras respectivas manadas estén bien.

El ojimiel se hubiera lanzado a abrazar al alfa mayor si no fuera porque había otros tres lobos en frente. Además, Nikolai tenía cara de que no le gustaban mucho las demostraciones físicas de afecto, menos le iba a gustar un abrazo de una persona a la que acaba de conocer. De todas formas, Stiles le sonrió ampliamente en forma de agradecimiento. El ir a ver que las manadas estuvieran bien le daría tiempo para pensar en lo que debía decir antes de tener que explicarse a su antigua manada.

NOTA DE LA AUTORA:

Nikolai es demasiado buena persona, ayudando a Stiles siempre que lo necesita. Nikolai for president, perras.

#NikolaiFirmameUnaTeta.

#TeHagoTodoMenosLaTarea.

#VotenPorNikolai.

#NikolaiMandaElRestoOBDC.

En fin, sin más que decirles me despido deseándoles un buen resto del día y mandándoles muchos besos y abrazos para todos. Adiós mi linda manada.

La Manada StilisnkiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora