Capítulo 62

502 28 9
                                    


Diamantes Oscuros.

Capítulo 62.

Mi vestido parece encajar, pero algo no se siente correcto y dudo sobre asistir a la fiesta de Kristen. Justo ahora no me siento, uhm, ¿digna de las chicas? Coloco mi delineador, un poco de labial rojo y máscara de pestañas (en la que confiaba para que no se quedara en mi ojo por más tiempo del requerido).

-Te ves sexy, chica neoyorquina- Colbie está luciendo un vestido púrpura con tacones infernales y un buen alaciado de cabello.

-Quisiera sentirlo así- murmuro, viéndola desde el espejo; era tan delgada.

-¿De qué hablas?- entrecierra los ojos y su teléfono suena- Es Sean, ya están abajo- asiento y tomo mi bolso.

Corremos hacia abajo y subimos al auto. Al parecer, Sean y Colbie estaban saliendo de forma casual y Vanessa estaba encantada de tenerlo como chofer a tiempo completo y sin tener que hacer más que mantener a Colbie encantada con él.

-Hay un montón de champagne esperándonos- me sonríe muy contenta.

-Escuché que la comida es realmente buena, italiana, dijeron- Colbie nos guiña un ojo.

-Podría ahogar mis penas en ella y en una buena botella de champagne- admito-, ¿vamos a regresar temprano?

-Seguro- se ríen.

** **

La casa de Kristen es mucho más bonita de lo que pensaba y me recuerda el por qué hay que hacer cierta clase de sacrificios. Ella era una modelo británica y últimamente estaba arrasando con las pasarelas, estaba también con L'Oreal y me parecía un excelente ejemplo a seguir en esta industria

-¡Chicas!- corre a saludarnos y su vestido es corto y azul brillante- Luna, ese vestido es todo brillante y sensual, debes pasarme el dato- me guiña el ojo y yo asiento.

-¿Dónde puedo tomar una copa?- gruñe Vanessa.

-Déjame pedirle al mesero que traiga una botella para ustedes.

-No queremos mesa- murmura Colbie-, es mejor andar caminando y perdiendo el tiempo on todo el mundo aquí- todas concordamos.

-Vale, diviértanse mucho, chicas- se despide y corre detrás de un grupo de modelos alemanas.

Tomamos un par de copas y las luces se vuelven más coloridas de lo normal, mis ojos se sienten más pesados y veo a las chicas bailando sobre algunos taburetes y mesas. Un montón de vestidos se mueven alrededor de piernas torneadas y delgadas, Colbie está besando a Sean en una esquina y el jarrón que está en el mueble más cercano a ellos, cae, rompiéndose en mil pedazos, pero nadie parece molestarse por ello.

-¿Desea un bocadillo?- el mesero pregunta, sacándome de mis pensamientos.

Tomo dos canapés y dudo, dejo uno sobre la charola y el mesero parece contrariado con mis acciones, yo sólo le sonrío y sigo mi camino.

-Luna, ¡esto es genia-a-a-al!- bien, ahora tenía a una Vanessa completamente borracha.

-Bien, creo que vamos a tener que parar con las copas, ¿no es así?- levanto una ceja y ella me abraza.

-Toda esta experiencia es genial con ustedes dos, ¡las adoro!

-Gracias, Vanessa, nosotras a ti- sonrío por el hecho de que ellas son realmente buenas amigas y me hacen sentir un poco mejor al respecto.

-Muero de hambre, voy por algo para comer- guiña el ojo y sale corriendo.

-Así que no es difícil encontrarte- escucho detrás de mí y el reconocimiento de la voz masculina me hizo girar rápidamente.

Diamantes oscurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora