(+21) (Libro 1 & Libro 2) Alysha N. Doménech Losada, una brillante y aplicada estudiante de medicina que está a punto de comenzar su internado en medicina general. Su vida era tranquila, entre libros y anotaciones, con el novio que siempre había sid...
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Capítulo 18.
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Salí de mi hogar con la mochila y mis libros hacia la parada del bus escolar. Tenía mucha prisa por llegar a mi destino.
—¡Oye, espera! —escuché una desesperada y dulce voz—. ¡Alysha! Eh... ¡Señorita!
El chico tímido bajó las escaleras del balcón de la casa de los padres de Jesse. Se dirigió hacia mi dirección con pasos agitados.
—¿Cómo estás? Ve... Veo que te diriges hacia la escuela —comentó casi sin aire por la prisa que estaba cargando.
—Cálmate, ¿sí? —le sonreí con despreocupación—. ¡Oye, qué hermoso te ves! ¿A dónde vas? ¿Una chica? —le pregunté con curiosidad.
—"¿Una chica?" —reflexionó por unos segundos—. Bueno, yo...
—Ah, ya sé... ¡Tendrás una cita! —posé mis manos sobre sus hombros con calidez.
El chico tímido se tocó su sedoso cabello con algo de nerviosismo.
—Bueno, te había dicho que obtuve una beca con la que pude adelantar ciertas materias y...
—¿Sí? —lo interrumpí.
—Sí. La última vez que te vi. Hoy es mi graduación...
—¿¡Qué!? ¡Felicidades! ¿¡Sabes!? Apenas me falta un mundo para terminar la escuela, pero me gustaría poder ingresar en una universidad y graduarme de igual forma que tú. Quiero estudiar medicina.
—¿De verdad? —su expresión se iluminó.
—¡Sí! ¡Una de mis mayores metas es ser médico! ¿¡De qué te graduaste tú!?
—La verdad es que hace un tiempo que ya me gradué de la universidad —me sonrió—. Estaba en la etapa de estudios graduados...
—Un chico genio. ¡Muy bien!
Ambos sonreímos.
—¿A qué te dedicarás? —le pregunté con extrema curiosidad.
—Te sorprenderá saber que obtuve una beca para realizar un internado en medici...
—¡Amigo! —gritó Jesse desde la puerta de su casa—. ¿¡Qué haces!? ¡Ven! ¡Nuestros padres esperan por las jodidas fotos familiares!
—Sí, iré en un minuto.
—¡Date prisa o llegaremos tarde!
—Ho... Hola, Jesse... —lo saludé con un gesto de mano mientras los nervios me atacaban.
El chico tímido de ojos claros me observaba con una mirada profunda...
—Hola, vecina —Jesse me saludó cortante y volvió al interior de su casa.