capítulo 12

705 108 23
                                    

———Teoría———

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

———
Teoría
———

Las miradas de molestia estaban sobre Mike, quien se avergonzaba de todo el show que hizo frente a Tealec, ¿A qué tonto se le ocurriría lanzarle a Tealec todo el agua del jarrón que estaba en la fogata? Sólo a Mike. 

     — ¡¿Qué?! —Soltó molesto ante las miradas de acusación de ellas—. Dejen de mirarme como si hubiera hecho algo malo. —Se cubrió el rostro, avergonzándose de sus acciones.

     — ¡Pero por supuesto que hiciste algo malo! —Se levantó del suelo Diana, recriminándole sus acciones—. ¡Quemaste al líder de estas personas! Agradece que sólo nos hayan encerrado.

Se sintió regañado, esta vez sí había metido la pata. En ese instante no pensó las cosas, simplemente actuó ante lo primero que se le pasó por la mente. Las dos mujeres que técnicamente él creía aun lo adoraban, ahora lo miraban molestas, Elizabeth deseaba lanzársele encima y golpearlo por sus tonterías.

     —Fue en defensa propia, ¡Quería golpearme, ustedes lo vieron! —Técnicamente quería hacerlo, o eso suponía él. Pretendiendo evadir sus regaños, quiso cambiar de conversación—. Deben admitir que fue gracioso verlo correr de un lado a otro, gritando como un loco desquiciado.

Mike quiso en ese instante tener su celular y grabar como Tealec corría alrededor de las chozas, quejándose de dolor, en ese entonces Tectlian corrió tras su hermano mayor, obligándolo a sentarse en el suelo para atender la quemadura.

     —Mike, esto es serio —Elizabeth le lanzó su última pantufla al rostro—. Por todo el amor que le tienes a tu querida madre, ¡Compórtate como un adulto sólo por hoy! No quiero morir siendo tan joven y soltera.

     —Ja, pues joven ya no lo estas, Elizabeth. —Rio, Diana.

     —Habló quién tiene la misma edad. —se mofó.

¿Un adulto? ¿Realmente quería que se convirtiera en un ser humano aburrido que huye ante cualquier alerta de diversión y risas? Permaneció en silencio meditando eso. Sus padres le han repetido hasta el cansancio que tome en serio su vida, siente cabeza de una vez por todas y se haga cargo del puesto que le corresponde por derecho. Debe practicar ser un adulto, concluyó.

     —Lo haré —fue lo que dijo al regresarle la pantufla que le arrojó, sin golpearla—. ¡Tialoc! —llamó a quien vigilaba la choza donde fueron encerrados.

Al escuchar su nombre el semidesnudo se tensó, miró hacia la choza con desconfianza y vio a Mike haciendo señas para que se acercase. Todo el grupo trabajaba con sus tareas, ajenos a las intenciones de Mike, Tialoc indeciso se acercó a ellos sin dejar de mirar a sus lados; por órdenes de su hermano tenían prohibido acercarse, y no deseaba correr el riesgo de que su hermano o cualquiera del grupo lo percibieran socializando con ellos.

Querida, no soy infantil 1 Y 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora