No!!
Por la mañana mis ojos seguían igual a las de una lechuza, no había podido pegar ojo en toda la noche y cuando creía que el sueño me vencía su cara era lo primero que veía, siendo de nuevo un mar de lágrimas.
Mi teléfono estaba estampado a uno de los lados de la habitación, mi furia y descontrol al ver 5 llamadas de él, más unos cuantos mensajes de texto, fue inevitablemente pagado por mi iPhone último modelo, ni siquiera sabiendo donde lo tiraba sólo me tranquilizó el echo de que sonó como si se hubiera vuelto mil pedazos.
No quería saber nada de él, lo único que quería era desaparecer del mapa, que la tierra me tragase o que le calleran mil elefantes peñados ensima.
Pero para mi desgracia ninguna de esas cosas iva a pasar asta que mi casa estuviera totalmente remodelada.
Y para eso aún faltaba algún tiempo más se lo que me gustaría.
Lo bueno de todo esto? Mis amigos los cuales estaban desparramados por mi habitación.
Nada más llegar los llame para que me contuvieran, no me gustaba llorar delante de nadie pero los necesitaba necesitaba que me contuvieran. Necesitava desahogarme y contarles todo lo ocurrido todo este tiempo en el que pasamos juntos .
Ellos como los mejor amigos que se pueden tener, me entendieron. Y me apoyaron en todo.
Incluso quisieron ir a darles un par de patadas en sus partes intimas. Y creerme que estaba muy segura de que se la darían sin comtemplamientos.
- te lo juro si me lo cruzo lo Castro - me dijo Cande acariciándome el pelo mientras yo descansaba mi cabeza en su regazo.
- no si lo mato yo primero - dijo Angy que estaba sentada al lado de nosotras en la cama.
Raúl entró por la puerta cargado dos bandejas de comida mientras hacía malabares para que nada de estas se cayeran y terminaran en el suelo armando un estropicio.
- aquí traigo el desalluno para mis niñas y para mi chica llorona si es buena le doy un regalito- dijo poniendo las bandejas ensima de las mesas de noche.
- gracias cielo- dijo Cande dandole un pico en los labios lo que me hizo llorar más.
Por que yo no me podía enamorar de un chico como Raúl, nooo yo me tenía que enamorar de un hombre echo y derecho que estaba comprometido y ensima le gustaba jugar con migo.
- pero sois imbéciles no veis que con vuestros afectos de amor la poneis peor?- dijo Angy volviendo a acariciar mi cabeza.
- perdón - contestaron los dos a la vez.
- no pasa nada chicos Raúl que me traes de regalo?- pregunté incorporándome en la cama.
Raúl se dirigió a una de las bandejas y me entregó un gran bol de helado de chocolate.
- se que tienes una dieta muy estricta y que es muy temprano para esto pero creí que te vendría bien por eso de que es bueno para la depre y eso- dijo un poco cabizbajo como si no estuviera seguro de darmelo.
- muchas gracias eres el mejor- dije levantándome y dandole un gran abrazo, a los cuales mis amigas se me unieron.
Todo hubiera estado genial las puertas correderas que daban a la terraza no estuvieran llamando con insistencia.
Mi cuerpo se tensó al instante, mi respiración se cortó de inmediato y mis piernas se doblaron al saber quién era el que tocaba la puerta por que él era el único que tenía acceso a esa puerta.
Mis amigos notaron el cambio que sufrí y sus miradas se oscurecieron al punto de echar fuego por los ojos.
- Emili por favor abreme. Por favor Em tenemos que hablar- mi nudo en la garganta se me atraganto algún más.
mis amigos inmediatamente fueron a decirle un par de cosas pero los interrumpí.
- estas segura Em- me dijo Angy al agarrarla de la mano para impedir que ella abriera.
- si estoy segura acabaré rápido con esto, lo necesito- ellos me entendieron y asintieron con la cabeza.
- vale pero si nos necesitas estamos justo detrás de ti recuerdalo- yo les agradecí con la cabeza, suspire y abrí la puerta.
- Em - dijo intentado cojer mi mano la cual yo aparte antrs de que el la alcanzara.
Lo esquive y salí a la terraza serrando la puerta para poder tener un poco de intimidad, por que sabía perfectamente que mis amigos estaban detrás mío escuchándolo todo.
- Por favor tenemos que hablar te lo tengo que explicar no es lo que parese - su pelo estaba desordenado su camisa echa un trapo y remangada asta el codo , paresia cansado, agotado y sus ojos estaban rojos e inchados como si hubiera llorado.
- abla - fue lo único que pudo salir de su boca
- es un poco difícil de explicar pero por favor escuchame,- yo solo me limite a asentir con la cabeza.
- sólo responderme una cosa es sierto que te vas a casar ?- el bajo miro hacia otro lado y bajo la cabeza con actitud cansada, eso me dio la respuesta.
Y era exactamente lo que no quería escuchar, por que aun guardaba un poco de esperanza que lo nuestro aún que allá sucedido poco le hubiera echo aunque sea decirme que lo dejaría todo por mí, su novia, su compromiso, todo pero obviamente yo era sólo un juego para él.De mis ojos rodó una lágrima que él se atrevió a querer quitar, y lo hubiera logrado a no ser que mi mano no lo hubiera atrapado la sulla antes de que me tocará.
Se que no me quieres ver, se que no me quieres escuchar y se perfectamente que no me quieres serca de ti, pero necesito decirte que por favor me des una oportunidad para explicártelo todo- dijo intentado volver a tocarme pero di un paso hacia atrás alejándome de él, el que me pareció que lo hubiera herido en lo más profundo.
- no hay más nada que explicar y tienes razón NO!! A todo - dije lo mejor posible recalcando la palabra no. Me saqué todas las lágrimas que son darme cuenta estaban rodando por mis mejillas y me dirigí hacia mi habitación cuando estaba por entrar me giré encontrándole mirándome con tristeza.
Pero no quería ni podía seguir escuchándolo no resistiría.
Aquí está el siguiente capítulo, espero que os guste, es un poco llorón pero a mi me a gustado como me a quedado,
Que decís de Ricardo y de los amigos de Emili??
Otra vez perdonar mi tardanza aunque esta vez e tardado menos en actualizar, pero esque no tengo mucho tiempo libre además esque quiero que los nuevos capítulos sean muchísimo mejores que los anteriores y eso requiere un poco de dedicación y con el poco tiempo libre que tengo se me hace complicado. Pero no me olvido de la historia asin que a disfrutar de Emili, Ricardo y compañía
Un beso enorme😘💋😍
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Mi Doctor De Hotel
RomansaEmili 17 años y Ricardo 29 Dos vidas completamente diferentes que se cruzarán. Situaciones que los llevarán al límite de sus fuerzas y cordura, en una trama de enrredos los cuales te harán retorcerte de risa, llanto e incluso dolor. Amor, edad , se...