Lazos de Sangre(+16)

II: Miedo

La música lo cura casi todo.

Llego a casa de Amanda. Está fuera ya, fumando. Lucy ya ha llegado también y está bebiéndose una copa. Me acerco y se alegran de verme. Hablo brevemente con Amanda sobre Sam, pero no le cuento nada sobre el plan de hoy. Me ofrece una copa, no suelo beber mucho, pero hoy el cuerpo me lo está pidiendo. Quiere ser consumido en alcohol. Vamos a la parte de atrás de su casa y nos sentamos en unas sillas de jardín. Hablamos de la vida y de cotilleos. Lucy nos comenta que el chico con el que estuvo el otro día le sujetó las manos mientras lo hacían. A Amanda eso no le hace gracia, no le gusta el control.

-Menos mal que lo conocemos y es un buen chico, sino diría que te quería agarrar por algo-dice Amanda con el ceño fruncido.

La hermana mayor de Amanda hace una breve interrupción para decirnos que sus padres nos dan permiso para coger el alcohol que queramos. No son irresponsables, es solo que prefieren cien veces que bebamos el alcohol que ellos han comprado y no el malo que nos venden en los bares.

-Y recordad-dice Ana, la hermana mayor de Amanda-Nunca se deja la copa sola. Los chicos son malos, os pueden echar de todo.

Asentimos y Lucy sigue hablándonos del chico. Se llama William, ellas lo conocen pero yo no. Al parecer juega al tenis y se le da muy bien. Amanda nunca se ha acostado con nadie, ella se centra en otras cosas. Le gusta besarse con chicos, pero nada más. La envidio, no siente esa necesidad de contacto físico. Lucy es una buena persona y siempre ha sido muy dulce, pero los chicos suelen aprovecharse de ella. Piensa que todos serán su siguiente gran amor y nunca lo son.

-¿Y tú Jane?-pregunta Amanda. La verdad es que llevaba unos segundos desconectada de la conversación. La ginebra aún no me ha subido y sigo pensando en el hombre misterioso-¿Esta noche te vas a acostar con Samuel o ya has cerrado esa etapa de tu vida?

Me mira con una sonrisilla de lado. Sabe que es algo superior a mi, que siempre digo que no volveré a él. Tampoco es que nos acostemos a menudo, pero desde aquella primera vez suele pasar algo cada x tiempo. Me es difícil resistirme.

-Da igual quien sea esta noche, pero que no sea Samuel. Está enamorado de ti y a ti él solo te gusta, por mucho que lo aprecies-dice Lucy llevando la voz de la razón.

Les digo que intentaré no hacer nada. Esta situación es complicada, no estoy enamorada de Samuel, pero me siento cómoda. Me gusta esa sensación que me produce acostarme con él, me siento bien. Me he acostado con otros chicos y es todo tan sumamente aburrido, asquerosamente aburrido. A esos individuos no les importo y el placer sólo reconforta durante un rato.

Después de unas copas nos levantamos, es momento de abandonar este jardín. Llevamos las botellas y las copas adentro y las dejamos en la cocina. Ellas cogen sus bolsos y nos vamos. Gente de nuestra edad está abandonando sus casas. Los miro, siento que nunca seré como ellos. He tenido una vida normal, pero aún así me siento diferente. Me gusta cometer los mismos errores que todo el mundo, como beber de vez en cuando. Nunca me afecta la bebida como a ellos, necesito beber más que mis amigas. Ellas hacen estupideces cuando van borrachas como mandar audios de los que se arrepienten. Y yo, tengo hambre. Una sensación de necesitar sentir contacto humano. Aún así nunca me voy con desconocidos y la única persona con la que llegué hasta el final es Sam. Siempre siento un miedo irracional a hacer daño, da igual si el chico es más grande que yo. Nunca he estado con una chica, Lucy sí. Estuvo saliendo con una el año pasado, se llamaba Nicolette. Era guapa e inteligente, pero era dos años mayor y se fue a estudiar fuera. Ellas van hablando de sus cosas, pero yo no puedo unirme a su conversación. El alcohol empieza a hacer efecto, pero no lo suficiente como para que me olvide de la situación en la que me encuentro. Cuando llegamos a Loleeta ya no hay tanta cola, la gente suele llegar pronto. Entregamos casi al momento. Nos tomamos otras dos copas mientras espero a que Sam aparezca. Según llega me coge del brazo y me aparta de mis amigas.