14. Esos terrenos son míos

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Andrea entró en el despacho y empezó a rebuscar en la caja fuerte las escrituras de las tierras de su padre, Samuel la observaba como revisaba papel por papel hasta que dio con el que le hacía falta.

Andrea: ¡Papa! ¿Puedes venir un momento?-su padre acudió al despacho donde su hija estaba mirando unos papeles.

Ignacio: dime hija, hola Samuel

Andrea: creo que aquí hay un pequeño error-le enseño el papel que marcaba una propiedad-este terreno pegado a los terrenos de los Montalvo pone que es nuestro-Ignacio observo entre los papeles de sus propiedades.

Ignacio: es que es nuestro, cielo-miró sin entender la situación, Andrea y Samuel se observaron-Sí, hija estoy seguro, todavía recuerdo hasta cuanto me costaron pero... ¿Qué pasa con ellos?

Samuel: vimos al capataz de los Montalvo con el ganado alegando que los terrenos pertenecían a los Montalvo.

Ignacio: Pues no...-los miro-esos terrenos son míos y no es la primera vez que yo mismo los veo allí-empezó a ponerse furiosa por la situación.

Andrea: iré a hablar con ellos-ordeno los papeles.

Samuel: es mejor que vaya...-intervino Samuel pero Andrea había dejado el despacho.

Iba saliendo de la casa cuando se encontró de frente con su hermana entrando a la casa, ésta noto el enfado de su hermana.

Patricia: pobre del que te haya puesto así-soltó una carcajada.

Andrea: pues tienen apellido-se acercó a ella y bajo la voz-Montalvo-Patricia abrió los ojos.

Patricia: ¿Pero qué pasó?

Andrea: esta tarde vi al ganado de los Montalvo dándose un banquete en nuestros terrenos, el capataz dice que son de los Montalvo, pero, revisando estos papeles descubrí que la propiedad es nuestra y que ellos están disfrutándola y mira, como que no me apetece que la disfruten más-se encaminó hacia el coche.

Patricia: ¡¡¡¡ESPERA!!!! Voy contigo-subiendo rápidamente al coche-A ver, hermana, relájate-reía.

Andrea: ¿Te hace gracia que dispongan de nuestros terrenos así porque sí?

Patricia: tu enfado me hace gracia-respiro-tiene que haber una explicación, tranquila, tu déjame hablar a mí anda, que tu capaz y les metes un bocado-la miro y soltó una risa irónica.

Andrea: vale, mediadora, hablas tú, pero como algo no me cuadre, les cae el pelo-ambas llegaron a la hacienda, algo que sorprendió a Gabriela.

Gabriela: niñas, bienvenidas, ¡que sorpresa!

Patricia: buenas tardes Gabriela-dijo con una sonrisa.

Andrea: pelota-murmuró su hermana, le dio un pellizco y se acercaron a Gabriela.

Gabriela: pasad por favor-entraron a la sala del rancho Montalvo y Gabriela les ofreció algo de tomar-¿Necesitan algo?-les sonrió.

Patricia: verá, sentimos molestarla por esta tontería-Andrea miro a su hermana y levantó una ceja-seguro que hay alguna explicación-Patricia cogió los papeles-resulta que los terrenos del sur que limitan ambas haciendas son nuestros y bueno mi hermana ha visto al ganado de su hacienda en ellos y queríamos saber si había algún tipo de malentendido o algo-Gabriela miró los papeles.

Gabriela: ¡Oh! Vaya si lo hay niñas-Andrea sonrió y miró a su hermana-esos terrenos son nuestros, ¿Cómo es posible que exista este documento?-la sonrisa de Andrea se desvaneció al instante y la cara de su hermana cambió completamente.

VUELVEME A QUERERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora