Oportunidad de brillar.

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Se llegó el lunes, el día perfecto para comenzar a sacar y mover mis cosas hacia el departamento. Empacar ropa, accesorios, máquinas, computador, espejo y demás cosas en cajas de cartón jamás se habría mirado difícil hasta que tú misma lo haces.

-¿Vendrás de vez en cuando?- preguntó mí hermana menor de nombre Th____.

Th____ es una niña de 16 años, cabello oscuro, flacucha y tez aperlada, mientras que yo soy de altura media, cabello largo y rubio, tez clara, ojos color avellana con toques oliva y mejillas rosadas la mayor parte del tiempo, mí madre me llama "Almendra" a diferencia de cuando se enoja conmigo.

-Sí.- contesté.- Te quiero mucho y obviamente voy a venir a darles vueltas porque debo cuidar de ustedes.
-Bueno.- contestó la niña encogiéndose de hombros.

Llevé y transporté mis cosas hasta el departamento hasta dejar mí antigua recámara totalmente vacía. Me asomé por la ventana para admirar el resto del centro de Domino, era un nuevo comienzo y una nueva etapa de mí vida.
Decidí bajar para salir y comprar un café. Entré a un lugar contra esquina bastante lindo y rústico, quería un "Gold Frapp" el cual llevaba leche de soya, cacao y chispas de chocolate, enseguida me percaté de una vocecita conocida y miré al frente mío para llevarme una sorpresa.

-¡Un Gold Frapp, por favor!
-¡Vaya, vaya! ¿Qué tenemos aquí, ah?
-¿Uh?- el niño volteo a mirarme con sus enormes ojos grises.- ¡Yo sé quien eres!
-Claro que sí, hace unos días perdimos cada quien un ojo y algunos dientes.- bromee.- ¡Oh! Pediste lo mismo que yo pediré.- sonreí.
-Es mí favorito, ¡te va a gustar!
El niño iba acompañado de un gran hombre con traje, lentes oscuros y un pequeño auricular en el oído derecho. Estuve a punto de pagar hasta que me di cuenta que había olvidado el monedero.
-Demonios...- murmuré.
-¡No te preocupes! ¡Va por mí cuenta!- dijo sonriendo mientras sacaba su billetera y saldaba mí frappe.
-N-no era necesario...- moría de vergüenza.
-Luego me lo pagas con un helado.- sonrió mientras salíamos del establecimiento.- A propósito, casi lo olvidaba: jamás me dijiste tu nombre.
-Me llamo Tn____, aunque puedes decirme 'Almendra'.- sonreí.- Tu nombre era Mokuba, ¿cierto?- asintió.- Gracias por el detalle, Mokuba, te debo un helado.
-Sin cuidado.- volvió a sonreír esos pequeños labios que tenía.- ¿Vives por aquí?
-Apenas hoy me mudé a un edificio del centro de Domino, de hecho, es aquel que está en contra esquina.- señalé al edificio con mí dedo indice.
-¡Genial! ¡Yo siempre ando por aquí! Acompaño a mí hermano al trabajo un rato y al cabo de unas horas regreso a casa. Ten,- me extendió su mano dándome una tarjetita con su nombre y número celular.- si llegas a ocupar algo o si te encuentras aburrida, aquí está mí número.- sonrió.- Tengo que irme, mí hermano debe de estar por salir, ¡nos vemos!
-Hasta luego, Mokuba.

Miré la tarjeta, "Mokuba Kaiba", su nombre completo, junto con su número celular y además el logotipo de Corporación Kaiba.- ¡Oh sorpresa!- dije para mi misma.- Mokuba resultó ser el hermano del gran Seto Kaiba. Quien diría que vendría conociendo al hermano de una de las personas más poderosas de Domino...- pensé que tal vez era una mera casualidad.
Me retiré a mí nuevo departamento, quería disfrutarlo ya que había pedido el día libre en el trabajo para poder hacer la mudanza.

Al cabo de una 4 horas alguien tocó a mí puerta, me asomé por el pequeño orificio que tienen todas las puertas para poder mirar quien está al otro lado y era un hombre con uniforme.

-Hola, buenas tardes.- saludé al momento de abrir la puerta.
-Buenas tardes, señorita. Le traigo su correspondencia.- me entregó varios sobres.
-Gracias.- comencé a mirarlos uno por uno.- Basura,- anuncios.- basura,- promociones para celulares.- basura,- oferta en algún crédito bancario.- basura,- publicidad.- y basura.- concluí.
-Tengo esta otra para usted.- habló inesperadamente sacando un gran sobre de su mochila.
-¿Qué es esto?- fruncí el ceño.

Vi que era una invitación en color lilac metálico, de esos papeles elegantes y brillosos con los que hacen las invitaciones de boda y eventos especiales. En el centro de la invitación venía el nombre de "Maximillion Pegasus".

-¿Y luego esto qué? Te equivocaste de apartamento, amigo.
-No, señorita, me pidieron claramente que se la entregara a la persona que vive aquí, a usted.
-¿De quien es y cómo dio con mí nombre y dirección?
-Desconozco, solo me dieron la indicación en oficinas de correo.
-Está bien, gracias.
-Hasta pronto, señorita.

Dentro de mí recámara sostenía con cuidado aquella pieza tan elegante. La abrí con cuidado y leí lo siguiente:

"Señorita Tn____, me complace tener el honor de escribirle este comunicado para poder hacerle la grata invitación a uno de los eventos más prestigiados en el mundo del duelo de monstruos. De manera sumamente atenta requiero de sus servicios de entretenimiento para la noche del evento, muy probablemente se estará cuestionando el cómo llegué a dar con usted, no se preocupe, bella señorita, ese tema lo trataremos en el evento. Por otra parte, regresando al asunto de esta invitación, el evento se llevará a cabo en mí castillo situado en mí isla la noche del 20 de Abril del 2017 a las 9:00pm, una hora antes mandaré una avioneta por usted, por supuesto habrá pago por sus servicios. Sin más que decir me despido, ¡hasta esa noche!
Maximillion Pegasus.

-¿Qué mierda acabo de leer?- me dije a mi misma.
Estaba claro que habría pago de por medio, Pegassus es un hombre de muchísimo dinero, casi como los Kaiba y eso quería decir que sería una buena suma pero me sacaba de mis casillas el hecho de cómo llegó a dar conmigo, mí existencia e incluso de mí trabajo musical. Obviamente no me negaría, sería una noche sumamente interesante, probablemente conocería demasiada gente y lo mejor aún es que si va la prensa me daría a conocer mucho más fácil y probablemente a nivel mundial. Una oportunidad más de brillar.

Polos Opuestos. (Kaiba y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora