–Sobre lo del proyecto. ¿Que vamos a hacer? —Me preguntó.Se me había olvidado por completo lo del proyecto debido a todas las cosas que he tenido en la cabeza estos días. El proyecto se entrega esta semana y no tengo ni idea de que hacer, aunque conociéndome no será dificultad para mi hacerlo y entregarlo, pero no estoy sola, Kim TaeHyung está en mi equipo.
–Ah... sobre eso.
–¿Se le había olvidado a la grandiosa _____?
–Si, no había tenido tiempo de eso.
–A mi también, no te preocupes.Era mentira, a TaeHyung no se le había olvidado lo del proyecto ya que eso es una excusa para estar cerca de ti. El sábado que lo encontraste en el centro comercial el antes había estado esperándote por una hora en el kiosco donde se quedaron de ver y en vista que no llegabas decidió ir a vaciar sus pensamientos en algún otro lugar.
–¿Que haremos? Estaba planeando hacer una presentación sobre los Tres Reinos de Corea ¿Te parece?
–TaeHyung. —Me sorprendió el hecho de que ha tomado la iniciativa.
–¿Está mal? Entonces de la guerra contra el Imperio Mongol.
–Los dos están bien, solo que pensé que no le pondrías empeño.
–Oh no, no dejaré verme menos por la numero uno de la clase.
–Eres el número 24/30.
–No me digas eso... Mi fuerte no es la escuela. —Me río entre dientes.— Noé a gracioso, si estoy en esta escuela es porque... No, olvidado.
–Dime ¿Le has pagado al directo?
–No tienes idea. —Reímos juntos y me mira con los ojos llenos de brillo— Gracias.
–¿Porque?
—Nunca te había hecho reír.
–Arruinas el momento. Mejor termina de comer.Pasamos comiendo y hablando, aún nos quedó algo de tiempo y me ha pedido que toque el piano para el, yo acepto como si nada, es algo que yo nunca hubiese hecho. Sin duda estoy cambiando y no se si es para bien o para mal.
La primera campana suena y el sale primero que yo, limpio y ordenó un poco antes de irme al salón de clases. Pasó por la oficina de maestros y sale alguien que no recordaba que iba a ver ese día ahí. Es HoSeok con el uniforme de la escuela, se le mira muy bien ya que es delgado y alto, pareciera un modelo de uniformes.–Oh, un fantasma.
–Muy gracioso.
–¿Me extrañaste?
–No, ni lo más mínimo.
–Ahhh, que mala. Has roto mi corazón, ya no quiero que nos casemos.
–HoSeok, no digas esas cosas.
–¿Porqué?
–Hay una bola de chicas a nuestra derecha mirándote y susurrando cosas, por si no te has dado cuenta —Le dije susurrando. El voltea a ver a las chicas y les hola un ojo.
–Ya lo sabía, solo que no me importa mucho —Me susurra de la misma manera— Tu eres más linda que ellas.
–Tonto. —Chisto los dientes— Mejor vete a tu clase.
–Háblame con más respeto, soy tu superior después de todo.
–¿Que, no tenemos la misma edad? —Entonces recordé que el me llevaba unos meses de más y que cuando yo cumplí los 7 unos meses después el cumplió los 8.
–Pensé que tenías mejor memoria.
–Lo siento, traigo en otro lado la cabeza.
–Ya me di cuenta, no es común en ti. —Camina un poso hacia mi y toca mi frente con su mano.— No tienes temperatura.
–Quita la mano. —El la mueve asustado.
–No me mates solo estaba revisando.
–Te lo deje pasar en el centro comercial cuando me pásate el brazo por el cuello por qué estaba pensando en otras cosas, pero creo que recuerdas lo mucho que odio que me toquen.
–Si, si. Lo tengo bien claro.Durante nuestra infancia había golpeado a HoSeok muy fuerte por haberme dado un beso en la mejilla que el solía decir que yo sería su novia cuando estuviésemos en universidad. Me enoje bastante y le golpeé, le dije que yo nunca me enamoraría y menos casaría con alguien. Vaya mentira.
–Entonces me iré a clase.
–Si.Jin está dando vueltas en su silla de escritorio mientras espera con ansias que su celular de señal de vida, es una persona famosa y cotizada, pero es rara a la persona que le da su número de celular para mantenerse en contacto después de un evento o un encuentro con alguien a menos de que sea un caso especial.
–En ocasiones creo que mi vida es más aburrida de lo que parece.Se hecha para atrás desilusionado, mira al techo y piensa lo del fin de semana, su mente comienza a dar vueltas sobre lo que le había dicho NamJoon. Niega y se reintegra en la silla al escuchar que la puerta de la enfermería se iba abriendo, no voltea y se levanta directo a la camilla, le da dos golpecitos.
–Venga, súbete y dime que tienes.
–¿Que tengo? —Jin reconoce la voz y voltea pasmado a la dirección de donde proviene— Creo que te extrañaba así que he venido a buscarte ¿Ocupo medicina para ello, enfermero?
–Kim NamJoon...
–O tal vez tú seas el que ocupe medicina. —Chista los dientes— que lastima que solo he traído esto.
–¿Que..? —Frente a el le extiende un ramo de flores de nube.El tiempo en el que fueron amantes el nunca había hecho algo así por Jin porque solía decir que era dinero tirado a la basura y cursilerías innecesarias si lo único que iban a hacer era dormir juntos. Los ojos de Jin se vuelven a los de un pequeño gatito; grandes, brillantes y cristalinos. Pero no eran por las flores, era por el acto que estaba haciendo su amor, en verdad comenzaba a creer que si quería cambie para bien.
–Ni creas que con eso te daré las nalgas otra vez.
–¡SeokJin! No todo en mis pensamientos es sexo, he cambiado...
–Entonces ¿Ya no quieres hacerlo conmigo? —Aprieta los labios— Sería una lastima, tendré que cancelar la reservación de la habitación...
–Bueno, de que quiero, quiero. Así que no deberíamos desperdiciarlo
–¡Lo sabía!
–¡No uses psicología inversa conmigo! —Jin le quita las flores.
–Haré lo que quiera de ahora en adelante.
–Me lo merezco.
–Si y más. Pero ¿Como entraste aquí?
–Ah ¿Eso?
–¿Entraste a escondidas?
–No, no. Resulta que el director Kim es familiar mío.
–¿Familiar?
–Es mi tío.
—¿Que? Ay no... Tengo un amorío con el sobrino de mi jefe. –Se le nota la preocupación en el rostro.
–No te preocupes el ha sabe por qué estoy aquí, me dijo que podría venir a visitarte cuando sea.
–Kim-Nam-Joon. —Por cada palabra que dice da un paso a adelante atemorizando a Nam— Nadie aquí sabe que soy gay. —Se detiene— No quiero romperle el corazón a todas las niñas de la escuela.
–¿Closet?
–Claro que no, afuera joteo todo lo que quiero pero está es mi zona de trabajo y es más que nada por respeto. Aparte, los chicos ya no van a venir si se enteran.
–Lo siento, tienes razón.
–Es por respeto más que nada.
–Si... Entonces me iré con las flores —Trata de quitárselas pero no lo logra.
–Hey hey hey. Son mías, ya me las diste. Vete.Chista los dientes, finge que se va a ir pero antes de dar la vuelta completa regresa para robarle un pequeño beso a Jin y sale como relámpago de la enfermería. El está sonrojado y feliz al acto, pero tampoco puede demostrárselo tanto. «Se lo tiene que ir ganar» es lo que ha pensado estos días sobre cómo se comportará con NamJoon.
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A & B. [TaeHyung Y Tu]
Fanfictiondurante la escuela media solía siempre estar sola, y eso era lo perfecto para mi, sin que nadie me molestase, sin tener largas platicas con alguien que no llevan a nada, sin tener que soportar a alguien que no me cae bien. Por eso, me es mejor ignor...