A la mañana siguiente despiertas un poco tarde, aprovechas que es domingo y que ya no hay aquel estrés en tu vida. Has apagado el celular durante toda la noche ya que realmente deseabas dormir bien, sin preocupaciones.
Saludas dando los buenos días a una de las mucamas con la que te cruzas en el pasillo de las habitaciones. Bajas a la cocina y tomas un jugo del refrigerador. –¿No gusta que les preparemos el desayuno? —Te dice la ama de casa al entrar a la cocina. Niegas con una sonrisa.
–Señora Lee. ¿Ha dicho "les preparemos?
–Si.
–¿Esta mi padre en casa? —A pesar de ser domingo el suele trabajar hasta medio día en la oficina.
–No, señorita. No me refería al presidente. Estoy hablando del mucho que ha estado esperándola desde hace una hora en la sala de estar. —Tus ojos se abren exaltados.
–¿Muchacho? —Miras la ropa que llevas puestas. Unos pantalones deportivos, camisa grande, calcetines de gatitos. Y tú cabello apenas es sujetado por una coleta desarreglada.
–Si. Ha venido anoche, pero usted ya hacía dormida.
–¿Como luce el? –Sabias exactamente de quien se trataba.
–Cabello platinado, 1.80 de algo. Bonita sonrisa y muy parecido.Te recargas en el refrigerador deslizándote hasta el piso, mientras revuelves más tu cabello de lo que ya está. «¿Porqué ha venido así sin decir nada?» enciendes tu celular que hacía en tu bolsillo. Preguntándote si tal vez si lo hizo, pero tú intento de escapar de el no ha funcionado mucho. Y si, tenías bastantes mensajes de un chico preocupado que te decía que iría a tu casa si no respondías los mensajes.
–Demonios... ¿que hago? —Susurras para ti
–¿Disculpe?
–Señora lee, dígale al mucho que estoy enferma y que no pueden visitarme. —Señalas a la puerta trasera de la cocina. —Saldré por ahí y me iré al kiosco del patio. Avísame cuando se haya ido. ¿Esta bien?Asiente y en cuanto se retira, corres a la puerta trasera. Tomas la perilla pero antes de salir comienzas a preguntarte porque es que te da tanto miedo verlo y comienzas a buscar la razón del porque es que estás huyendo de él. Suspiras y sueltas la perilla para dirigirte a la sala de estar. Pero al parecer el muchacho ya no estaba ahí. «al menos pudo insistir un poco más». Te ves decepcionada a ver qué ya no está ahí.
–Pensé que estabas enferma. —Una voz a tus espaldas te hace brincar del susto.
–Pensé que te habías marchado ya.
–Pedí usar el baño. Llevo casi dos horas esperando a que despertaras, bella durmiente.
–Yo... —Se acerca hacia ti y coloca su mano en tu frente.
–No tienes fiebre. —Se inclina para poner rostro frente a frente. —Tus ojos se miran normales. Aunque tus mejillas se están ruborizando.Volteas hacia otro lado del lugar tratando de que no note que es por el. En su pequeña malicia, una sonrisa apenas visible se dibuja en sus labios toma de tu mano y comienza a caminar hacia las escaleras, subiendo de estas. Se topan con la misma mucama que has saludado por la mañana. –¿Podría traer un par de bolsas calientes y una sopa para la señorita Kim, por favor? —La muchacha asiente. Posteriormente pregunta cuál es tu cuarto, pero en vista de que no responde se detiene.
–Oye, son bastantes como para abrir puerta por puerta.
–¿Acaso crees que te lo voy a decir? Eres un hombre, bien podrías violarme si entras a mi habitación.
–Si quisiera violarte, no esperaría a estar en tu habitación ¿no lo crees? Tal vez podría hacerlo aquí. O en la siguiente puerta. —Te ruborizas aún más. Apenas levantas la mano para señalar la puerta de tu habitación.TaeHyung asiente y continúa caminando sin soltarte de la mano. No sabes en que podría estar pensando hacer, o si en verdad sabe que no estás enferma y que lo hacía por huir de él.
~Jin Se encuentra desayunando con NamJoon en un restaurante cerca de tu casa. Planean pasar el día ahí después de terminar con su desayuno. Una chica más joven que ambos, se les acerca un poco tímida. Va directamente hacia Seok Jin a pesar de que saluda a los dos.
Como si tuviese un nudo en la garganta le pregunta a Jin por su número de celular. Este, un poco sorprendido mira a Nam Joon buscando una salida de esa situación.
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A & B. [TaeHyung Y Tu]
أدب الهواةdurante la escuela media solía siempre estar sola, y eso era lo perfecto para mi, sin que nadie me molestase, sin tener largas platicas con alguien que no llevan a nada, sin tener que soportar a alguien que no me cae bien. Por eso, me es mejor ignor...