Capítulo 6

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Marco miró sonriendo a su amigo aunque este último no estuviera muy contento.

Habían pasado tres días desde que había aceptado el estúpido plan de su amigo y ya se estaba arrepintiendo, Marco lo traía de un lado a otro, probándose cosas de chicas.

-¿Se supone que eso me sacará mis hermosos bellos castaños de las piernas? -preguntó Isco a su amigo al ver la cera caliente que Marco sostenía en sus manos con mucho cuidado.

-Sí, será algo doloroso pero te sacará todo, bueno eso me dijo la chica de la tienda -se encogió de hombros- Ven aquí -lo llamó, Isco se acercó temeroso hacia él.

-¿Duele mucho, mucho? -preguntó, pero como respuesta solo sintió un gran ardor en su pierna- ¡AAH! ¡Marco!

La tarde se hacía lenta y dolorosa para estos dos chicos de 18 años, aunque fueran mayores de edad, se comportaban como niños pequeños, aunque cada persona tiene a su niño interior por más que sea mayor, todos tenemos esa alma joven, esa alma de niño que nos hace cometer locuras, cosas locas, cosas buenas y cosas malas que nos enseñan a crecer y a vivir lo que realmente es la vida. Nos enseñan a equivocarnos, y lo más importante nos enseñan a levantarnos después de una caída.

-Recúerdame el plan por favor -dijo Isco mientras estaban sentados en la cama de Marco, ambos con las piernas estiradas. Se habían depilado completamente las piernas y ahora descansaban.

-Bien, el lunes debemos llegar temprano al instituto, llevaremos nuestras maletas y nos instalarán en unas habitaciones con dos chicas más -su amigo lo interrumpió.

-Chicas, mm esto me gusta -sonrió- Bien, y tendremos que ir a clases, como siempre y hacernos pasar por mujeres, y lo más esencial vigilaremos a Marina -sonrió al recordar a su novia, a pesar de que estaba molesto.

-Entendido, ¿será por un tiempo cierto? -miró a Marco- Tengo que volver, mi padre me mata si no me consigo un trabajo de medio día antes de empezar la universidad.

-Sí, un tiempo -murmuró no muy seguro- Bueno mañana vamos de compras y arreglamos los últimos detalles -dijo con voz graciosa.

-Pareces chica -lo miró raro.

-Eso somos ¿no? -movió su cabello graciosamente.

-Obvio querida -rieron juntos.

Dos días después tenían todo listo, con el dinero que el padre de Marco le había enviado para sus vacaciones, algo le quedaba por lo menos, habían comprado ropa de chica, de sus tallas, algo grandes. Obviamente eran hombres, algo de maquillaje y dos pelucas de pelo natural, una rubia de pelo liso y otra castaña con algunas ondulaciones, esta última la ocuparía Marco.

Habían hecho pruebas con la ropa de chica y se habían divertido bastante a pesar de lo incómodos que se sentían, con brasier y alguna que otra braga que habían comprado.

-¡Espera! -Isco lo detuvo- ¿Cómo nos llamaremos?

-Eso está todo resuelto -dijo Marco- Tú serás Marie Johnson y yo seré Kate Benson -leyó en un papel que sostenía su mano.

-¿Marie Johnson? ¿es en serio? -lo miró incrédulo- ¿No hallaste otro nombre mejor que el de mi ex novia? -Marco lo miró como recordando algo y ¡claro!, Marie era la ex novia de Isco, pero lo había hecho sin querer, con razón al pensar en un nombre de chica para su amigo había pensado primeramente en Marie, la rubia loca, como solía decirle en aquellos tiempos.

-Me declaro inocente -rió ante la divertida situación- Pero antes que me preguntes no puedo cambiarlo.

-¿Pero por qué? -reclamó.

-Porque envié tus notas y tu ficha con ese nombre -lo miró desinteredado- No reclames, a pesar de que esa chica estaba loca, era linda y con tu peluca rubia te parecerás mucho a ella -se burló.

-Eso burlate, después Kate se queda sin Marie y yo no se que suceda ahí, eh -salió por la puerta.

Enamórate || Marco Asensio ~ AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora