Capítulo 20

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Le costaba creer que su novia le había mentido y nuevamente le iba a mentir.

Al comenzar la relación se prometió tener la confianza suficiente con su novia, todo se basaba en la confianza y Marco hace dos años no conocía aquella palabra.

-¿Marco Asensio? -había escuchado oír- Es un mujeriego -escucho una risilla- No toma a nadie en serio, así que no se te ocurra acercarte si quieres una relación seria.

-¿Aquel castaño del salón 301? -muchas chicas solían hablar de él, y Marco hacía como si no las escuchara, pero sin embargo era lo que siempre hacía- Es guapo, dicen que perdió la virginidad a los quince años, tiene un cuerpazo, suele coquetear con todas, así que no te creas única.

-¿Asensio con novia? -se burló- Debes estar confundiéndolo, el Marco que conozco nunca tiene novia, sólo chicas.

Y todo eso había cambiado por Marina, ya no tenía chicas, si no una chica.

Ya no era mujeriego, ni coqueto, el antiguo Marco había desaparecido de un día para otro y todo por una chica... Que ya estaba dudando si valía la pena o no. Ella le mentía, ella le escondía algo y él lo descubriría.

-Isco -el castaño se sobresaltó al oír a su amigo- Escuché algo.

-Marco, yo escucho todos los días y no ando asustándote por la vida -Marco lo miró con la ceja levantada- Ya que va.. ¿qué has escuchado?

-Escuché una conversación de Marina y Camille, ellas.. -paró de hablar al ver que su amigo se acercaba mucho a él con las piernas cruzadas- ¿Qué haces?

-Bueno, las chicas cuando se acercan a sus amigas y dicen ¡tengo que contarles algo! o ¡escuché algo! -imitó una voz chillona de mujer- Las demás se acercan a ella como si quisieran comerla, taparla, tirarse encima. No tengo ni idea, pero es extraño -Marco sólo rió- ¿De qué te ríes?

-En serio, mucha chica te ha hecho mal -vio como su amigo solo rodaba los ojos- Bueno, ya, escuché que Camille le decía que tenían que ir a una fiesta en Málaga, que estaría buenísima el fin de semana, pero el problema era yo y sus padres. Bueno, eso dijo Marina, y Camille le aconsejaba que mintiera a sus padres, les diría que estaba conmigo y viceversa y pues.. -hizo una pausa para luego volver a exclamar- ¡Marina no se negó!

-Sabía que esa chica no era tan santa -murmuró Isco.

-Pues santa santa, claro que no -se acostó en su cama mientras su amigo lo miraba, como diciéndole 'continua'-Me miente y me va a mentir, eso está claro, pero también me invitó a almorzar con ellas mañana y pues acepté.

-¡Eso es genial! pero.. ¿Eso significa que el plan ADM ya estará en marcha?

-Claro que sí, ya he pensado en todo, almorzaré con ella, me haré su "amiga", le preguntaré cosas que como Marco ya le he preguntado, trataré de que me confíe algunos secretos y el fin de semana tendré que esperar a ver si me miente o no -suspiró fuertemente. Aún le costaba digerir que su novia no era tan simple, hermosa y simpática como la conoció, sino que era una chica que cada vez lo sorprendía más y más, con sus mentiras y actitudes.

-¿Y después? -preguntó.

-Pues si sucede todo lo que te he dicho, averiguaré que esconde, terminaré con ella y nos marcharemos de aquí de una buena vez.

-¡Dios me ha escuchado! -dramatizó su amigo- Esperemos que suceda entonces.

La maldita alarma sonó muy temprano, pero así tenía que ser. Debía levantarse más temprano que Débora y Hanna para hacer su no tan pequeña transformación.

-Hey Isco -susurró- Despierta.

-Cállate -un manotazo llegó a su cara- Quiero dormir -Marco reprimió el golpe de vuelta que le iba a dar y se dirigió al baño. Isco no lo había despertado la semana pasada, así que ahora tendría sus consecuencias. Ninguna de sus compañeras se despertaban aún, todas -y tenía que decir todas, porque Isco tenía su peluca- dormían plácidamente. Hanna estaba acostada como solía hacerlo los últimos días, con ropa muy pequeña y provocativa para un hombre. No pudo evitar reprimir los recuerdos que acecharon su mente al ver sus labios. La forma en que sus labios se habían acoplado perfectamente en aquel pasillo de la fiesta, el sabor del vodka mezclado con el sabor de sus labios, todo era único, pero no había sido en las mejores condiciones, porque ella estaba ebria y él estaba.... sobrio.

Enamórate || Marco Asensio ~ AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora