Enamórate || Marco Asensio ~ Adaptación

Capítulo 53

'Marco está raro' 'Marco no es tan cariñoso' 'Está muy distante' 'Ni me llama' 'Creo que ya no me quiere'

Frases que había escuchado los últimos minutos. Marina llevaba más de media hora hablándole sobre el mismo.

Era miércoles, mitad de semana y estaba almorzando con las chicas mientras la castaña le hablaba sobre su relación.

-Quizás tiene a otra -habló Camille de repente y él casi se ahoga con la lata de bebida.

-¡No! -exclamó su novia- ¡Marco no puede tener a otra! -él simplemente se quedó callado, escuchando la conversación- Se supone que me quiere.

-Quizás ya no lo supone -habló Ashley.

-Él me quiere -dijo Marina- Soy su chica, no puede tener a otra.

Y entonces volvió a perderse en la conversación. ¿Por qué a Marina le afectaba tanto que él estuviera con otra? -que en cierta parte era verdad- se supone que no lo quiere, que no le interesa, que él le da igual, pero no, ella seguía confundiéndole aún más con sus muestras de amor repentinas.

-Hey Muntaner -miró a su lado y la morena estaba frente a ellos -¿Cómo estás?

-Muy bien querida -Marina ni si quiera la miró- ¿A qué se debe su infortunada visita?

-Necesito a Kate -se miraron mutuamente y la morena sonrió- Ven Kate.

-Ya vengo -susurró él y sin importarle las demás chicas, caminó tras Hanna.

-Apúrate -murmuró ella y le tomó la mano para empezar a correr por el campus.

-¿A dónde vamos? -preguntó, pero ella sólo le hizo un gesto de silencio.

Atravesaron el campus y llegaron a la piscina. Marco miró confundido a su alrededor.

-¿Qué sucede nena? -preguntó y ella le sonrió, le tomó la mano nuevamente y lo dirigió a una puerta. Sin saber como, se encontraba en los vestidores de las chicas, no había nadie a la hora del almuerzo.

-No se como lo soportas -habló ella.

-Soportar qué -ella le sonrió nuevamente y se abalanzó sobre él, atrapando sus labios en un beso profundo y romántico.

-¡Diablos quería besarte! -murmuró entre besos- Te necesito Marco, eres una maldita droga -abrazó su cuello e intensificó el beso.

Y la entendía perfectamente, porque él había querido besarla todo el día pero las clases, las chicas, y Marina eran un verdadero martirio.

-Igual te necesito -murmuró y la tomó por la cintura fuertemente- Te necesito tanto, que quiero cometer una locura nena.

-Sí -susurró ella- Haz todas las locuras que quieras- con su pie empujó la puerta del vestidor y con una mano libre apagó la luz.

Esa semana la disfrutó al máximo. Todas las noches había dormido con Hanna y había vuelto a sentir el calor de su cuerpo junto al de ella. Por otra parte, Marina seguía insistiendo que él estaba raro, y que averiguaría lo que le pasaba, pero eso a él no le interesaba, ya no.

Cada vez más, tenía ganas de encontrar aquella verdad que buscaba inquieto. Necesitaba esa verdad. ¡No quería estar con Marina!

La semana había transcurrido muy rápida, como si el destino quisiese que llegara sábado.... Como si quisiese que llegara su aniversario.

-¿Qué harás mañana Marco? -le preguntó la morena que estaba a su lado acostada.

-No sé -se encogió de hombros, aunque supuso que Marina lo llamaría por su aniversario- Aunque.. Mañana cumplo un año de noviazgo con Marina -bufó y un silencio se hizo presente en la habitación.