T R E C E

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Dos segundos después todos tenían una cara de "¿Qué esta pasando aquí?".

El alfa que tenía sujetado el omega abrió los ojos como platos, está vez escuchaba un musical en su oreja.

Los dos alfas compañeros del moreno parecían muy preocupados, Maggie miraba a todos los lados mientras que Oxy se había alejado un poco para buscar si alguien estaba persiguiendo a su amigo.

El olor de miedo y tristeza estaba en el aire, haciendo que el pelirosado lo abrazara un poco más e intentara calmarlo.

Los gemelos productores ya se habían ido intentando salirse de ese momento incómodo.

—¿Por qué se supone que le pides eso justo ahora? —preguntó Onnie ladeando la cabeza hacia un lado mientras miraba con curiosidad a su jefe.

El moreno no respondió, sólo jaló fuertemente al más alto para que pudiera morderle, Félix se estaba conteniendo.

No podía hacer algo así en un lugar público.

El recuerdo de Abby regañándole por querer morderlo la primera vez fue demasiado para su mente, necesitaba un lugar más tranquilo y además, El chico ni siquiera lo estaba pensando, era más un impulso de miedo e intento de protección.

—Deuz bonito... Relájate... No estás pensando bien lo que dices, podrías arrepentirte luego... —habló en un susurro para no asustarlo más, lo que funcionó bastante más rápido de lo que esperaba.

Le sujetó de las mejillas con cuidado y con una sonrisa le dió un beso en la frente suavemente mientras soltaba feromonas de tranquilidad.

Las manos del omega estaban temblando, podía oler algo parecido a... ¿Tomates... Posiblemente? Era obviamente de un alfa casi igual a él, tal vez no debería separarse de Deuz por un tiempo hasta que todo esté más calmado.

-o-O-o-

Fueron enviados a un hotel, muy bonito, por cierto. Había sido más por obra de Félix, que no quería que durmieran en un lugar tan pequeño como siempre... Y si tenía suerte... Podría surgir algo más...

En las habitaciones Maggie decidió dormir sola, aceptaron a la primera, sabían que ella prefería una noche de tranquilidad sin ningún chico, así que, le dieron el gusto.

Onnie término con Oxy más por obligación, ya que apenas dijeron la palabra separarse, el grandulón le había cargado en el hombro como un saco de patatas y llevado a la fuerza para que no pasara tiempo con Félix.

Así que. Aquí estaban esos dos.

Deuz estaba tocándose un poco el cuello, estaba nervioso. Al final el miedo le había ganado y le hacía estar furioso.

El alfa estaba tomando un baño, por lo que tenía tiempo para pensar sus cosas, hasta que sus ojos se encontraron con la mochila de este, tenía ropa allí, ropa grande.

Se la había robado ahora.

Estaba enrollado como un burrito en las sabanas, Félix había salido al fin, buscando su ropa, no encontraba su camisa. Levantó la vista burlonamente al omega que estaba con cara de pocos amigos mirándole.

—Cariño, deberías de preguntar antes de tomar mi ropa. —solo recibió un bufido de respuestas—Ya sabes, me encanta que uses mi ropa y eso, pero yo también necesito usar algo.

No hubo respuestas, más que un dedo medio con todo el odio del mundo.

—Eso es grosero—intentó parecer ofendido y falló horriblemente. Le parecía incluso más adorable que no quisiera quitarse su ropa, el olor de omega estaría allí por muchos días.

⛓Great Escape⛓ [Félix×Deuz]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora