⛓Great Escape⛓ [Félix×Deuz]

T R E S

Todo fue silencio hasta que una mano apartó a Deuz, era el chico de cabello rosas, ahora que podía verlo mejor notaba que tenía una cara muy bonita, facciones suaves pero que al mismo tiempo lo hacian ver muy fuerte y guapo.

Oh, si supiera que mientras le miraba su olor se hacía más fuerte para todos...

Tenía un cuerpo bastante grande, era mucho más alto que él, su piel era pálida, debió haber sido muy bien cuidado.

El chico le empujó mientras Deuz sentía otras manos sacarle fuera del escenario, podía escuchar a sus amigos intentando mantener a unos alfas fuera de su alcance. Bastaba con la mirada de muerte que Maggie envió para hacer que algunos se alejaran sabiendo que no tenían oportunidad, al igual que el tamaño y la cara de muerte de Oxy que hacía que algunos pensaran “Ese debe ser su alfa”.

Los gritos de la gente y el olor de algunos alfas pidiendo que regresara y se dejara dominar por alguno de ellos le carcomía al omega moreno.

Pero él lo sabía muy bien, un omega era lo más bajo que podía existir, era un tesoro, un muñeco de colección para los pervertidos que querían algo imposible.

Nadie se dio cuenta, pero...
El chico de cabellos rosas logró escaparse de su grupo.

Deuz estaba corriendo junto a Onnie, todo se había arruinado, pero, él sabía que se puso sus supresores ¿Qué pasó entonces? Tal vez fue por el alfa ese, sabía que esas cosas no funcionaban si alguno de ese tipo estaba cerca.

Podía sentir su corazón casi saliendo de su pecho al igual que escuchaba a Onnie gritarle que entrara a un lugar.

El calor era horrible, el dolor le estaba matando lentamente, tantos supresores debieron tener un efecto de vuelta en su sistema.

Por alguna razón sus pies no fueron hacia donde Onnie gritaba, él quería escapar, y lo hizo...

Logró salir del lugar mientras escuchaba a Onnie gritarle que volviera...

Corría con todas sus fuerzas a través de la ciudad sin gente, todo era silencio, solo el sonido de sus pisadas y su respiración agitada, pero a lo lejos juraba escuchar unos pasos rápidos con un olor fuerte.

El omega interno de Deuz quería ir hacia él.

Deuz empezó a entrar en pánico, así que entró en un callejón mientras miraba a un tipo pasar corriendo rápidamente, no pudo ver realmente quién era...

Sintió una mano cubrirle la boca y sujetarle fuertemente, el olor de superioridad le hizo gemir del miedo, apenas podía gritar o emitir algún chillido que sabía que ayudaría.

Sabía que estaba siendo llevado hasta el fondo del callejón, donde apenas había luz, sería difícil que alguien mirara y notara que estaban allí, Deuz maldijo en su mente.

El gran alfa suspiraba fuerte mientras que lo jaloneaba al fondo de ese callejón sin salida. Deuz se sentía incapaz de moverse por las feromonas que él soltaba.

Lo tiró sin cuidado a la pared de ladrillo logrando que soltara un gemido por el golpe en la esquina del callejón; había un contenedor de basura que los escondía.

El alfa que cargaba una gabardina café se arrodilló frente al omega en calor. Tomó el rostro del moreno que intentaba hacerse pequeño en su esquina y lo observó detenidamente, sus aguados zafiros brillaban y tenía los bordes de los ojos rojizos aunque aún no soltara una lágrima. La nariz empinada que sonaba en jadeos y sorbidas. Los labios temblorosos que emitían sonidos suaves sumado a la barbita café desordenada de su mentón. Se veía tan hermoso y sumiso para aquel alfa que ya estaba excitado.