⛓Great Escape⛓ [Félix×Deuz]

O N C E

Pasaron unos tres meses desde que ocurrió ese incidente con el celo de Deuz.

Aunque la banda esperaba que a la primera semana, su líder pidiera volver por el alfa, eso no pasó.

Pero pese a ello. Todo ese tiempo el alfa no ha descuidado de enviar como mínimo veinte mensajes al omega y avisar a sus compañeros por algún medicamento o tratamiento que se le deba hacer al moreno si se sentía mal.

Pese a que Deuz les gritaba que el era molesto por escribirle tanto, eso no lo demostraba al responder, cuando leía y respondía los mensajes del pelirosado, sonreía o soltaba feromonas de calma y comodidad que también hacían a su banda sentirse a gusto.

—Tierra llamando a Deuz, Deuz ¿Estás aquí? —jugueteó la alfa sentada a su lado, haciendo al omega sonrojarse y alterarse un poco, dejando de expresar ese fresco y hogareño aroma.

—¿Eh? ¡Yo... Tengo los pies en la tierra! —exclamó

—Pues no lo parece. —informó Onnie sonriendo, apoyando sus codos en la mesa y la cabeza en sus palmas, sentado frente a ellos.

—Ya no empiecen. —ordenó, haciendo reír a ambos chicos.

Estaban en una mesa privada y reservada por sus productores, para hablar con ellos.

Realmente, esos gemelos eran muy competentes y capaces, no por nada habían lanzado a las mejores estrellas a su cumbre tantas veces.

—¡Oh, chicos! Qué bien que están aquí ya. —llamó un azabache acercándose a ellos.

—Lamentamos la demora, chicos, Fred no decidía qué ponerse, como siempre. —objetó el menor de los gemelos, Freddy, con una risa apenada.

Sus productores eran los gemelos Fazbear, que venían de una empresa mayor llamada "GoldenStars", la cual era liderada por la pareja del mayor de los gemelos.

—No esperamos mucho, siéntense por favor. —pidió amable el alfa pelinaranja.

Entre comidas, se pusieron a hablar de su futuro.

—Bueno chicos. Espero que ya estén creando más canciones para su álbum, aunque Fred ya tiene unas ideas para hacer singles. —dijo el castaño.

—De hecho sí. Maggie tiene una lista, y estamos escribiendo otras cuatro en conjunto... —respondió el líder de banda, mirándolos.

Fred parecía satisfecho, jugando con su anillo de bodas y rozando suavemente una rara cicatriz vieja que asimilaba al lazo oculta en su traje, él no podía tener esa mordida por ser beta, por lo que su pareja la hizo tantas veces que se quedó plasmada cual tatuaje en su piel.

—¿Y cómo va tu embarazo, Deuz? —preguntó el beta castaño para hacer una conversación animada, el grupo le había contado a ellos de esa condición de su líder y tranquilamente lo aceptaron, aunque no sabían quién era el padre.

—Bien en lo que cabe. Solo he tenido náuseas...

—Nauseas y una telefonitis aguda. —se burló el alfa.

—Eso se ha notado ¿Tienes a un enamorado por ahí~? —picó el beta azabache.

—N-no...

—Sí, lo tiene, y es doctor y cantante. —respondió Maggie con malicia, llevándose la mala cara de su compañero y silbidos de los gemelos.

Esa noche, entre otras cosas. No hicieron énfasis en el bebé, ni en Félix, del cual por cierto, su mención ponía melancólico al omega.

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