16 |Guerra de comida

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Narra Maggie

Duff se alejo definitivamente y entonces miré a las taquillas de enfrente.

Lisa fruncía el ceño y tenía una mirada llena de odio.

¿Qué demonios?

Aunque después de escuchar la conversación de Duff y Slash en la biblioteca me puedo esperar de todo.

-Me preguntaba...¿tienes planes para después de clases? -Me pregunta él con una espléndida sonrisa.

Hice cara de pensativa, obviamente no tenía ni una mierda qué hacer en está cárcel, aparte de querer morirme.

-Tengo toda la tarde libre -Digo con una sonrisa.

Toca mi mejilla y esboza una sonrisa -¿Nos vemos a las cinco en la azotea?
Asiento y deposita un rápido beso en mis labios.

Me quedó estática, oh dios mío.

¡Gracias señor Diablo por bendecirme con este adonis griego!

Al final reacciono y comienzo a caminar en dirección de la cafetería para almorzar pero alguien agarra mi codo.

-¿Puedo hablar contigo? -Dice una voz femenina.

Lisa.

-¿Tiene qué ver con qué Axl me mira fusilar o...? -Continuo pero me interrumpe con una mueca de enfado.

-Te dije que Duff no es lo que parece.

-Y tú tampoco pareces quién dices ser, mosquita muerta -Respondo y sólo puedo ver cómo se pone roja de furia.

-Eres una perra que ha puesto el internado patas para arriba -Dice y me suelto de su agarre.

-Mira chica -Sonrío apretando mis dientes bien fuertes- No me llames perra cuándo ni si quiera me conoces. Así que rebozate en tu odio. Igual así te sabe mejor -Concluyó y volteo pisando bien fuerte.

***

Mila da varios sorbos a su zumo de uva procesando la información.

-Espera qué me centre, vas a tener una cita con el caliente McKagan y descubriste que tu padre está de vuelta en el estado.

Asiento y hace una mueca extraña.

-¿Qué pretendes hacer? -Pregunto.

-Mirar mi expediente -Le digo.

-¿Para qué?

Rodeo los ojos -Pone la información de mi padre, sabes que mamá siempre me contó sobre todo de él pero no sé los típicos detalles. Ni su edad ni nada de su información actual, y en este instituto de pijos tienen máximo control con eso.

-Vale, que comience la actuación -Dice la castaña lanzándome un trozo de postre.

-¿Guerra de comida? -Alzó una ceja divertida.

-Así varios profesores vendrán y podremos ir a por tu puto expediente.
Río y lo siguiente que hice fue lanzar un trozo de sándwich a la primera persona que paso por allí.

Y esa persona se la lanzó a otra, y luego a otra.

Hasta que llegó el momento de lanzar una bandeja llena de macarrones y salsa.

Que aterrizó en Axl y su pandilla.

Mila y yo nos miramos entre sí, riéndonos cómo locas, aunque nuestra sonrisa se borro cuándo el director se presentó el horror de comedor.

-¿¡Quién fue el causante de todo esto!? -Grita a todo volumen.

Nadie dijo nada, todos los estudiantes se quedaron mudos.

Tattooed Heart «Duff McKagan» ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora