SEDUCTION [Joshler]

19

•Tyler•

Desperté del lado derecho de la cama, mirando hacia la ventana. Aunque está nublado, la luz entra con intensidad, provocando que entrecierre los ojos.

Me es imposible moverme. El brazo de Nick está rodeando mi torso y cada que intento desprenderme de su agarre, evitando despertarlo, me acerca más a él.

Puedo sentir su respiración en mi nuca. Normalmente, cuando despierto por las mañanas siento frío. Pero hoy, gracias al cálido abrazo de Nick, no es así. Me gusta sentirme de esta manera. Acompañado. Aunque preferiría que Josh fuera el que estuviera aquí a mi lado, y no este chico bonito.

Estoy muy pegado a Nick, y éste sigue sin despertar. Estaba por moverme, sin importarme interrumpir sus sueños. Cuando de repente comencé a sentir algo que se movía entré nosotros, ente su entrepierna, para ser más específico.

Pequeños movimientos punzantes en su pijama me hicieron saber que Nick estaba erecto. La situación lejos de incomodarme, me pareció existente. Me acurruqué más en él y pegué mi trasero a su prominente erección, sintiéndola firme contra mí. Así estuve por un buen rato, moviéndome contra él sutilmente, hasta que sentí que despertó. Aproveché para soltarme de su agarre.

—Buenos días, dormilón.— dije dándole un beso en la mejilla.— Veo que amaneciste bien.— agregué bajando la mirada al bulto que se formó en su pijama.

—Buenos días, Ty.— contestó apenado al darse cuenta de su problema. Rápidamente llevó una almohada a su entrepierna.— Qué pena, lo siento.

—¿Sentirlo? ¿Por qué? No tienes nada de que avergonzarte.— dije sin quitarle la vista de encima.— Iré a bañarme, guapo. Podría ayudarte con tu problemita si me acompañas.

Pude notar como se sonrojó, bajando la mirada.

—Ty... Ya te dije que...— alzó la mirada para verme a los ojos.—Quiero algo serio contigo... No quiero apresurar las cosas.

Mierda, no quisiera hacerle daño en el futuro, pero si soy sincero y le digo lo que él es para mí (Un chico lindo que me será útil y con el cual solo me gustaría pasar un rato agradable), me quedaré solo, sin nadie que esté detrás de mí, y eso tampoco me gusta.

Resoplé dándome por vencido.

—De acuerdo, como quieras Nick.— respondí dándole una falsa sonrisa para dejarlo tranquilo. La cual al parecer funcionó, porque me regreso una más grande y sincera.

Faltaban dos horas y media para que el primer entrenamiento empezara, así que no tardé mucho en bañarme.

Salí solo con una toalla amarrada a mi cintura, apenas y se miraba la raya de mi trasero. Me puse de espaldas a Nick, a propósito, y comencé a buscar lo que me pondría.

De reojo miré a Nick por el espejo de mi clóset. Estaba mirando fijamente a mi trasero, hasta que se dió cuenta que lo veía con una sonrisa pícara. Entonces giró la mirada hacia la ventana.

—¿Seguro que quieres ir con calma?

—Yo... Yo no...— su cara se puso muy roja, no sabía qué decir.— Mejor iré a bañarme.— soltó entrando al baño.

—Si necesitas ayuda para enjabonarte dime, no tengo ningún problema con volverme a mojar.— no contestó nada. «¿Por qué eres tan lindo?» pensé mientras me vestía. «No quisiera hacerte daño, Nick. Esperemos y no salgas muy lastimado de ésta».

No tardó mucho en salir de la ducha, ya estaba vestido. «¡Cielos! Ese chico es tan teto». Me hubiera encantado verlo mínimo sin playera.

Nuevamente abrió la boca como tonto al verme, para ser honesto, ya no se me hacía tan divertido que se sorprendiera cada cinco minutos por cualquier cosa que hacía o vestía. Parecía un niño, y eso que el menor era yo.

—¿Acaso nunca vas a superar mi hermosura?— dije riendo un poco.

—¿A caso nunca te podrás algo que no me corte la respiración?— susurró tratando de no parecer apenado.— ¿No crees que esos shorts están demasiado cortos?

—No, me gusta sentirme sexy.— pude notar como tensó los labios.—¿Te molesta algo?

—No, es solo que...

—Perfecto, entonces vámonos.

Nick salió delante mío rascándose la cabeza. Tal vez lo estoy imaginando, pero creo que no le parece del todo el como me visto. No es como que me importe. Digo, después de todo, si no cambié por mis padres, menos lo haré por él. Pero de cierta manera, me resulta interesante como puede provocarle celos el como otros chicos puedan mirarme. Ciertamente la idea no me desagrada.

⏳

Llegamos un poco tarde al entrenamiento por causa del tráfico. A lo lejos vi a algunos chicos calentando. Unos cuentos miraban a nuestra dirección, y enfrente de ellos, con una jersey blanca y unos pantalones deportivos azules, estaba Josh.

Antes de que la curiosidad lo hiciera voltear, para ver lo que los otros miraban, tomé la mano de Nick, quién por suerte, me correspondió entrelazando nuestros dedos.

Algunos chicos hacían ruidos infantiles, de esos que hacían los niños en el colegio para molestar a una parejita de novios. Nick inmediatamente se sonrojó y yo fingí hacerlo.

—A ver, ya. Sigan calentando.— ordenó el señor Dun. «Está muy serio» Creería que estaba molesto conmigo sinó me hubiera regalado una tenue y corta sonrisa. «Algo le pasa».— Denle veinte vueltas a la cancha, en lo que vuelvo. No tardo.

Todos obedecieron sus instrucciones... Todos menos yo.

—¿A dónde vas?— preguntó Nick.

—Al baño, ahora vuelvo.

Sin que el profesor pudiese verme, me fuí tras de él. Saliendo de la cancha y de la vista de todos, hasta que se detuvo y tomó su celular. Me escondí en un arbusto para que no me viera.

—¿Debby?—«Esa debe ser su esposa».— Lo sé, necesito más tiempo.- «¿Más tiempo para qué?»— Ahora estoy dando clases, no puedo buscar una niñera. Tendrá que esperar, bye.

El señor Dun colgó el teléfono y se dirigió a las canchas. Por suerte no me vió escondido espiando su charla, no hubiera podido explicar eso.

«Esto es sumamente interesante».

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Mientras sigan aquí, yo seguiré escribiendo para ustedes.
Les pido una disculpa, la escuela me absorbe mucho y no he podido actualizar como quisiera. Gracias por leer.❤️

Pd: Si hay errores ortográficos, me dicen. :3