*Narrado desde el punto de vista de Mangel*
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Me dehperté bahtante pronto, no tenía mucho sueño y no quería pensar en na', ya eran lah once y Rubiuh todavía no había dehpertado, entonces fui a su habitación me senté al lado suyo y comenzé a hablarle.
-Dehpierta Rubiuh -ehtaba sudando mucho y no tenía idea de por que- Venga dehpierta.
Entonces fue abriendo loh ojoh poco a poco y me miró con algo de sorpresa.
-¿Qué ta' pasao' Rubiuh? ¿Por qué sudah tanto?
Parecía ehtar nervioso o algo ya que ehtaba respirando de otra manera, se pasó lah manoh por la frente pa' quitarse el sudor, saltó de la cama y se fue de la habitación. Que raro ehtaba, alomejor tubo algún sueño raro o algo.
Fui a la cocina a prepararme el desayuno, aún ehtaba dolido, todo me recordaba a ella... Esas mañanas en lah que noh preparábamoh el desayuno, besándonoh, riéndonoh..., joder, por que coño tengo que recordá' to'. No pude evitar haceh salir una lágrima de mis ojoh, y vi a Rubiuh en la puerta de la cocina.
-Buenoh díah -le dije con una sonrisa haciendo ver que ehtaba mejor.
-Ho-hola -me miró un tanto nervioso, hizo media sonrisa, cogió lah galletah y se fue, ¿qué coño le pasaba ahora?
Ya era domingo y mañana a trabajah, al menoh en Bgames me entretendría un poco y dejaría de recordah a Sandra por unoh momentoh. Aún la seguía queriendo, joder Sandra me hicihte tan feliz...
Cuando de pronto siento que alguien me ehtaba acariciando lah piernah, era Raspberry que seguramente tendría hambre. Fui al salón y Rubiuh como de costumbre viendo la tele.
-¿Qué te pasa? Ehtas muy raro hoy -le dije mientrah me sentaba a su lao'.
-Eh... nada, que tube un sueño sobre noso..., un sueño de fantasmas.
-Ah... ¿de qué trataba? -pregunté con curiosidah y él cada vez se ponía mah nervioso.
-Tonterías, ya sabes, niños azules japoneses, slender... sí esas cosas -respondió, pero sin mirarme.
No se si diría la verdá' o no pero ehtaba claro que al hablah conmigo se ponía demasiado nervioso e intentaría adivinah por que.
