*Narrado desde el punto de vista de Mangel*
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Ehtas doh semanah sin Rubiuh me fueron bahtante bien la verdá', con Laura hacía muchah cosah y eso hacía que no pensara en él. Supongo que ya no le iba a volvéh a ver máh y me parecía bien que hubiera ehcogido ya su vida, yo la mía con Laura la tenía ya hecha.
Todoh en Bgames me preguntaban por él, yo solo leh dije que se fue por un tiempo y que no sabía en cuanto volvería. También, decían que había cambiado mucho mi carácter pero me daba exactamente igual lo que dijeran.
Era Marteh por la noche y ehtaba solo en casa, se le echaba un poco de menoh, bueno, la casa ehtaba en completa tranquilidad sin él, sin suh gritoh. Llamé a Laura pa' habláh un poco con ella anteh de irme a dormíh, no podía quedarse porque tenía que haceh unoh trabajoh.
Dehpué' de ehtar hablando con ella media hora o así decidí acohtarme, durmiéndome casi enseguida.
Miércoleh por la mañana me dehpertó el móvil, era Laura. Graciah a ella no me dormí. Hice lo mihmo que cada mañana, ducharme, vehtirme, desayunáh e irme. Cuando llegué a la oficina Panda no ehtaba por ningún lao', que raro en él, siempre llega de loh primeroh. Fui a saludáh a Laura dándole un abrazo muy fuerte y besándole la mejilla.
-Hola -me saludó ella dehpué' de separarse de mí, yo le acaricié el pelo.
-¿Y Panda? Siempre llega de lo primeroh y hoy no ehtá -miré hacia loh laos'.
-Eso mismo me preguntaba yo, es raro -y entonceh vi a Rikote salíh de su dehpacho, yendo hacia nosotroh.
-Buenos días.
-Buenoh díah -le dije yo.
Entonceh abrieron la puerta principal, era Panda pero detráh suya... ¿Rubén? ¿Era él? Me sorprendí mucho, demasiao', ¿qué hacía aquí? Dioh, ehtaba delgadísimo y se le veía fatal, me dio muchísima pena al verle y de repente todoh lo recuerdoh con él se me vinieron a la mente. ¿El qué ehtuviera así era mi culpa? Me quedé como un pahmarote mirándole. Rikote se acercó a elloh doh.
-Oye chico, no estás muy... bien ¿Qué te ha pasado?
-Nada... -habló casi sin ganah, mirando al suelo-. Mi, mi madre estaba enferma y tuve que... acompañarla al hospital y, por eso no pude venir.
-¿Ahora está mejor?
-Eeeh, sí, mucho mejor.
Sé que todo lo que dijo fue mentira, sé que todo fue mi culpa y que por eso ehtaba así de mal, mejor dicho, fatal.
-Bueno, pero tienes que cuidarte -le miró de arriba a abajo-. Estás... muy mal eh. Y se nota mucho.
La verdá' eh que tenía razón, encima llevaba una camisa máh o menoh ajustada y se notaba la gran diferencia de que había adelgazao' un montón y esas ojerah que tenía...
-¿Quieres grabar hoy? -él asintió-. Venga pues... como quieras. Te pongo con, mira pues con Mangel.
En el momento que dijo conmigo me dio como un mini infarto, ¿qué coño? Rubiuh se quedó un rato mirando a Rikote hasta que este le dijo "Va, podéis empezar ya" Le costó un poco acercarse a mí, pero al final lo hizo, con la cabeza mirando hacia el suelo.
-Hombre Rubén, cuanto tiempo. Siento lo de tu madre...
-Cállate, tú no sabes nada -le ordenó inmediatamente Rubiuh-. Y mejor será que ni me dirijas la palabra.
-Ay vale, joder, veo que no se te puede decir nada.
Entramoh en la sala de grabación. Él se sentó en una ehquina y yo en la otra, aún no me dirigió ni una mirada. Joder, que trihte era verlo así. Fue una de lah peoreh grabacioneh que hicimoh, no hablamoh na'. Se me rehbaló el mando de la play cayéndose al suelo, al cogerlo observé a Rubiuh que me ehtaba mirando, tenía suh ojoh clavadoh en mi como agujah. Joder, como me dolió que me mirará así, con esa inmensa trihteza que tenía, todo fue mi culpa... Se levantó para irse por la puerta, seguramente a llorar de nuevo... En serio, esa mirada que me hizo... me entraron ganah de llorah a mi también. Mezclaba sufrimiento y trihteza. De pronto entró Laura por la puerta.
-Oye ¿Por qué Rubén está llorando? -tenía razón yo, verme no era el mejor remedio que tendría Rubiuh para ehtar mejor...
