*Narrado desde el punto de vista de Rubius*
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Por la tarde del sábado fui a recoger todas las cosas que faltaban de mi antigua casa, ya lo tenía decidido, empezaría una nueva vida con David. Empezaría también a olvidarme de Mangel, era lo que tenía que hacer.
Ya estaba mucho mejor, gracias a David comencé a comer y a llevar una vida normal. Cuando acabé de hablar con Mangel se le vio fatal, supo que lo hizo mal, pero no sé si podría vivir de nuevo con él, le quería, seguía queriéndole mucho pero después de esto no sé...
No hice gran cosa cuando volví, ordené las cosas que faltaban y poco más.
-Rubén -se acercó entonces David, yo le miré-. ¿Te apetece ir a cenar por ahí?
-Sí, claro -sin más acepté.
Nos duchamos, nos vestimos y nos fuimos hacia Callao, buscaríamos algún restaurante por los alrededores. Al fin encontramos uno que nos gustó a los dos, uno italiano.
-Hace un poco de calor ¿verdad? ¿Nos sentamos en la terraza mejor? -yo asentí, un camarero vino al momento.
-¿Qué os sirvo? -preguntó amablemente.
-Una cerveza, ¿Y tú David?
-Sí, también sírveme otra.
-Está bien, ahora vengo con la carta.
Escogimos una pizza grande de momento, pizza pepperoni, la que me gustaba a mí y por lo que ví, también a David. Estuvimos hablando, riéndonos y de todo, hacía tiempo que no estaba así de bien, si no le hubiera hecho caso estaría ahora mismo en el hospital. Después de cenar nos fuimos a dar una vuelta por Madrid, había mucha gente y mucha luz. Todo era precioso.
Volvimos a casa sobre las doce, Raspberry saltaba por toda la casa como una loca, aún no se había acostumbrado del todo. Intenté cogerla pero ella me esquivaba y a veces me maullaba ¿Qué coño le pasaba ahora a esta gata? David se acercó a mí y apoyó una mano en mi hombro, girándome hacia él. Aún no tuvimos un contacto físico como un beso pero le veía con toda la intención que iba a dármelo, yo lo acabe esquivando.
-Lo-Lo siento -me fui hacia mi habitación, cerrando la puerta. Joder, no podía, algo me retenía a darme un beso con él, no sé pero creo que no voy a poder besar a otra persona como a Mangel, joder. ¿Por qué coño sigue en mi cabeza? Jamás podré olvidarlo por mucho que quiera, jamás.
Ahora recordaba la cara de arrepentimiento que puso cuando vio que me iba y decirle que no volvería más. ¿Qué estaba haciendo? Lo voy a reconocer a Panda solo le veo como un amigo, no me gusta, pero él hace que mi vida almenos sea un poco decente. Me arrepiento de haberle dicho que me gusta... Quiero a Mangel, lo necesito para mi vida, joder... Me daba miedo otra vez cometer el mismo error, volver con Mangel y que él me haga lo mismo. Añoraba sus besos, su sonrisa, sus abrazos, lo necesitaba ya al lado mío.
¿Qué iba a hacer ahora? ¿Debería seguir con David e intentar enamorarme de él o volver con Mangel?
