13. SOSPECHAS.

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Su período siempre había sido irregular, pero las circunstancias la tenían nerviosa. En ninguna de las dos ocasiones había usado protección y estaba segura que Adrien tampoco la había usado. Tenía algunos sintomas extraños a los que ella atribuía como cansancio. Sueño, mucho sueño. Incluso se quedaba dormida en clases. Hasta Adrien se quedaba dormido en clases, pero en él eso era normal dadas sus miles de actividades extras, lo extraño era que nunca antes se había quedado dormido.

Alya miró a su amiga con perspicacia aquella tarde. Marinette no se veía muy bien y había estado asqueando su comida durante todo el día y con nauseas. Se veía pálida y cansada. Pero lo que más extraño le parecía era que Adrien estaba pasando por la misma situación.

Aquella tarde después de algunos exámenes todos se reunieron después de clases para ir a comer un helado antes de regresar a casa. Marinette se rehusó al principio, pero Alya no se lo permitió con la escusa de que llevaban mucho tiempo sin compartir un rato juntas. Sin embargo, a los pocos minutos Nino y Adrien se unieron a la invitación, pero lo que más preocupó a los todos fue precisamente la reacción del joven rubio cuando comenzó a comer su helado.

Estaba pálido con sólo una probada y se quedó quieto unos instantes.

─ ¿Estás bien amigo? ─ preguntó Nino agarrando el helado de su amigo, pero Adrien no respondió. Por el contrario salió corriendo hacia la cesta de basura más cercana y comenzó a devolver todo lo que tenía dentro.

Nino, Alya y Marinette intercambiaron una mirada extrañados y preocupados.

─ Oye amigo... deberías ir al médico─ dijo Nino de nuevo mientras palmeaba la espalda de Adrien quien seguía dando arcadas en la cesta─. Esto ya es extraño.

─ No, yo creo que esta mañana comí algo que me hizo daño─ explicó Adrien incorporandose nuevamente─. La verdad he estado muy cansado últimamente, creo que mejor me iré a descansar a casa.

Entonces Adrien se incorporó tan blanco como un papel y en cuanto Nino le acercó de nuevo su helado, Adrien lo apartó de inmediato.

─ Aleja esa cosa de mi Nino─ se apresuró a decir Adrien alejando el helado lo más posible de él.

─ Pero amigo, se supone que es tu favorito... en serio deberías ir a un médico.

─ Ya Nathalie me hizo hacer unos exámenes. Llevo tres días bastante indispuesto la verdad, pero yo sé que estoy bien. La mayor parte del tiempo me siento bien. De todas formas los resultados saldrán en unos días.

─ ¿Y qué quieres que haga con tu helado Adrien? Odio la vainilla con fresas.

─ No sé... dáselo a Marinette o a Alya... Sólo aleja esa cosa de mi por favor─ pidió Adrien mientras se sentaba sobre la banca para tomar un poco de aire.

Nino les ofreció a ambas el helado de Adrien, pero Alya se negó de inmediato ya que Adrien lo había probado y si estaba enfermo no quería contagiarse.

─ No estoy enfermo Alya. Yo nunca me enfermo─ dijo Adrien y sé que sólo es por algo que me comí. Además ese helado sabe a rayos.

─ A ver─ dijo Marinette agarrando el helado y probándolo─, pero si está delicioso Adrien. No sabe nada mal.

El rubio hizo una mueca de asco en cuanto vio que ella lo comía con gusto, mientras probaba también el que ella había pedido. Helado de chocolate con maní y mermelada. En menos de diez minutos, Marinette había acabado con ambos helados y se fué a pedir más.

─ Oye, ya para bonita o te vas a engordar─ dijo Nino mientras veía como Mari ahora comía su tercer helado de limón con chispas de chocolate y... ¿queso?

Solos Tu Y Yo...  Bajo Las Hojas De Otoño.    MLBAA18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora