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Luce dejó finalmente a Mateo y los miró, analizante, para luego alzar los hombros.-Algo debiste haber hecho para provocarla.-sentenció, volviendo a revisar la cabeza de Mateo.

-Gracias, tío.-agradeció a Marty, que, con los ojos casi cerrados, dejaba una toalla en los hombros de cualquier ser vivo, incluyéndome a mí.-Empujé a Nolan al lago, y cuando lo intentabamos sacar Lucas cayó al agua también.-me contuve para no reír.-Cuando Quentin fue a tratar de sacarlo, lo golpeé en el culo y se fue de cara al agua también. Fue divertidísimo, sus gafas volaron y Lucas saltó como delfín para atraparlas y que no se reventaran.

-Es mi hermanito...-murmuró Lucas.

-¿Y Mateo? ¿A él qué le pasó?

-Ah, Mateo fue simplemente de estúpido. Creo que tantas tacleadas en el futbol americano le están afectando el cerebro.-Mateo la miró mal.-fue a darme una patada para que cayera al agua, me hice a un lado y se pegó en la cabeza contra el muelle antes de entrar alagua. Fue bastante dramático.

-Fue increíble.-murmuró Liam.-Lucas lo atrapó cuando caía y en dos segundos había salido del agua, con Mateo en brazos y arrastrando a Nolan para que le revisara la cabeza.

-Los demás de nosotros que no somos ni su predilecto ni estudiantes de medicina nos tuvimos que quedar en el agua.-se quejó Quentin, limpiándose la nariz con un extremo de su toalla.

-No te quejes, cuatro ojos, salvé tus gafas.-bramó Lucas, caminando a la cocina.

-Iré a preparar té.-murmuró el señor Preston, arrastrando los pies a la cocina, mientras Lucas salía con una botella de Jack Daniel's y tres vasos. Todos lo miramos expectantes, mientras servía ceremonialmente en la barra de desayuno, para luego entregarle uno a Nolan y otro a Quentin, mientras él se tomaba el suyo de golpe.

Se oyó un carraspeo. Miré al lado y Luce estaba haciendo viajar su dedo entre ella y yo. Lucas alzó las cejas.-¿Quieres, mamá?

-Mi hijo menor acaba de llegar con un golpe en la cabeza y los mayores están empapados, por supuesto que quiero.

-Emilia.-me dirigió la palabra por primera vez desde que llegaron.-¿Quieres?

-Uhm...

-Tráele.-ordenó su madre. Movido como por un control remoto, Lucas salió disparado ala cocina y volvió con dos vasos más, rellenando su vaso y entregándome uno a mí y a su madre.

-¿Emilia?-todos miramos a Palmer.-Lo siento, no oí tu nombre.

-Emily Darcy, soy su tía.-apunté a Phoebe, mientras estrechaba la mano dela chica.

-¿Emily?-alzó las cejas en dirección a sus primos, que asintieron, mientras Lucas estaba muy concentrado en su trago.-Es un verdadero gusto.-sonrió, tomando mi mano entre ambas suyas.-Palmer Fryer.

Miré a los Preston extrañada, pero corrieron la vista, ¿por qué le llamó tanto la atención mi nombre? En mi clase habían al menos cinco Emily.

Rodé los ojos.-Igualmente.-murmuré, recibiendo un vaso de parte deLucas.-Pero no puedo beber, tengo que manejar.-me excusé, devolviendo el vaso a Lucas.

-¡Yo lo quiero!-alcanzó a gritar Mateo, antes de recibir un sonoro golpeen la nuca de parte de su madre.

-¡Tienes dieciséis años!-regañó, mientras Mateo se acariciaba el area golpeada.

-Valía la pena el intento.-murmuró.

-Bueno...-golpeé mis manos contra mis piernas.-Ya que ya viste que tu amorcito esta bien, nosotras nos vamos.-hablé.

-¡Esperen, esperen!-Palmer me detuvo del hombro.-Mat, no les contaste las buenas noticias.-habló sonriente, pero yo vi tras esa sonrisa: esta escudriñándome. Pero de una buena manera, de la manera en que escudriñas a la hermana de tu cuñada para saber que no es una loca a la cual verás en el noticiario de la mañana porque descuartizo a su vecino.

-¿Que buenas noticias?-preguntó Phoebe, volviendo en sus pasos y mirando aMateo ceñuda.

-Palmer, no creo que sea buena-

-¡Lucas compró una nueva casa para él y Kenya!-Phoebe frunció el ceño y me miró, mientras yo simplemente sentía mi cara petrificada. Juro que intentaba sonreír y mis músculos no respondían.-¡Y no es todo!-no sé si esta chica es simplemente demasiado inocente o deverdad esta haciendo esto con malicia.-¡Ya saben el sexo del bebé!-Phoebe me miró con horror.-¡Es un niño!




El Diario de Emily DarcyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora