El Diario de Emily Darcy

9. Amor a primera, segunda y tercera vista.

-¿Que te dije de los protocolos?

-Lo mismo que yo le diré de casarse con la señorita Wayne: Innecesario.

Volvió a rodar los ojos.-Darcy...

-Prefiero mantenerme así, tratándolo como mi jefe, porque si lo tuteo, me comenzaré a tomar atribuciones que no me corresponden, y, con todo el respeto del mundo, quiero conservar mi trabajo, señor.-rodó los ojos y bufó.-si me disculpa, iré a buscar a mi sobrina para retirarme.-alisé mi falda y entré a la casa. Puse una mano en el hombro de Lucas.-felicidades por su compromiso, señor.-lo felicité. Rodó los ojos, comprendiendo mi sarcasmo.-Phoebe...-llamé, buscando por la casa.

-¡Arriba!-respondió. Subí y me encontré con Mateo y Queen, uno a cada lado de la cabeza de mi sobrina, que estaba con los ojos vendados, haciéndole una trenza.-¿como esta quedando el lado de Ethan?

Contuve una risa y Mateo me sonrió.-Creo que deberías quitarte la venda, sobrinita, querrás ver esto.

-¿De qu-Phoebe abrió los ojos como platos cuando se quitó la venda y vio el rostro de Mateo a escasos centímetros del suyo, dándole la clásica sonrisa de Prince Charming.

Ay, maldición, a mi sobrina le gusta uno de mis potenciales jefes. Ojalá no me despidan.

-¿Que haces?-preguntó pasmada, mirando a Mateo, que terminaba de amarrar el extremo de su trenza.

-Te trenzo el cabello.-respondió obvio.

-P-pero, ¿no se suponía que era Eth-el pequeño se encontraba en la mesa, nuevamente tomando té y coloreando.-Ay.

-Phoebs, nos vamos.-indiqué.-Fue un placer conocerlos, mocosos.-sacudí el cabello de Ethan.

Si despeino a Queen probablemente me arranque la mano.

-Igualmente. Ojalá fueses tú quien se casa con Lucas.-se despidió Ethan.

-Oye, no te preocupes. Te aseguro que al menos una de nosotras va a ser parte de esta familia muy pronto.-indiqué a Phoebe, que reía tranquilamente junto a Mateo.

-¡A Mateo le gusta Phoebe!-chilló Queen, emocionada, haciendo que los mencionados dieran un salto.

-¡Cállate Queen, no es cierto!-vi a Phoebe rodar los ojos y reí, mientras Mateo perseguía a la pequeña, que no paraba de gritar.

-Ya nos vamos.-hablé, divertida.-cuídate, Ethan, nos vemos.

Bajamos las escaleras tras Mateo, que seguía persiguiendo a la pequeña.-Señor Preston.-Lucas apretó la mandíbula una vez más y tomó mi mano, en señal de despedida.

-Clumsy.

-¿Por qué yo te digo señor Preston y tu me dices ese estúpido apodo?

-Porque te desagrada. Tu también me dices señor Preston para joderme la existencia.

-No es cierto, te digo señor Preston porque es lo correcto. Ahora, señor, me retiro.-solté su mano.-nos vemos mañana en la oficina. Despídete, Phoebe.

-Adiós, Lucas.-se abrazó a él con fuerza.

-Adiós, Phoebe.-le palmeó la cabeza y le devolvió el abrazo.

-Phoebe.-jadeó Mateo, poniéndose a su lado.-¿ya te vas?

-Sí.-asintió.

-Pues-se acercó y le besó la mejilla.-nos vemos mañana en la escuela, ¿sí?

-Obviamente.-rodó los ojos. Mateo se inclinó y abrió la puerta, encontrándose con la chica de la nariz rota.

-¿ES UNA BROMA?-chilló al ver a Phoebe. Lucas y yo nos pusimos tras ella.-¿EL PRIMER DÍA QUE LA CONOCES Y YA ESTÁ METIDA EN TU CASA?