~ Say Nothing ~ V - BTS

Parte 15

Tardé como una hora en encontrar ese asqueroso barrio, ni siquiera sabía que existía en esta ciudad. No me sorprendía que Yoongi viviese en un lugar como ese, conociéndolo obviamente no.
Hace unos meses supe que mi ex mejor amigo tenía un lugar por aquí dónde hacía no sé qué cosas, y ya que no lo vi en mi vecindario los últimos días que estuve allá entonces supuse que estaría aquí.
Golpeé la jodida puerta oxidada y esperé. El olor era insoportable.

-No dudo que se esté drogando de nuevo. Por favor que Hoseok no esté ahí, por favor que Hoseok no esté ahí, por favor que Hoseok no esté ahí.-

Después de unos segundos Yoongi atendió el llamado a su puerta. Primero no dije nada y dejé que su cara de amargada pereza me carcomiera primero, de todos modos yo tenía la misma expresión.

-¿Dónde está Jimin?- pregunté.

-Cogiéndose a tu novio.- escupió pero no me inmuté.

-Voy a preguntar otra vez, ¿sí? ¿Dónde está Jimin?-

-Aquí adentro con Hoseok.-

Bienvenido sea el juego de miradas. –No me hagas preguntar otra vez, Yoongi.-

El chico entrecerró los ojos, mirándome, imaginándose lo bien que le caería tener un arma ahora mismo.

-¿Y por qué supones que yo sé dónde está?- dicho esto se cruzó de brazos y recargó el hombro en el marco de la puerta.

-Eres su mejor amigo.- dije y se echó a reír por lo bajo.

-¿Y?-

Ok, bien, morderé mi lengua con los molares para no reaccionar. Está ebrio, es más que evidente así que mi paciencia debe ser más infinita. También he notado una marca al costado de su ojo derecho, un golpe que está sanando. Él tiene el rencor hacia mí por esa paliza, ya lo sé.

-Y sé que Jimin te confiaría esto a pesar de que te tiene miedo. A pesar de lo que le hiciste.-

-Eso fue un accidente.-

-Lo dudo.-

-Lárgate.-

Y una vez más: el juego de miradas. Sabía que venir no resultaría pero al menos quise intentarlo. Al menos me di cuenta, más de cerca, lo acabado que estaba este chico.

-Gracias por tu tiempo.- dije con una bendita falsedad. –Espero te haya dolido esa paliza.-

No me quedé para ver su reacción a eso. Me di la vuelta y cuando salí de su perímetro de vista corrí por mi vida creyendo que tal vez podría perseguirme. Solté el aire de los pulmones al subir al auto, me di prisa para salir de ese lugar. Demonios. Una vez más mi idea fue ir con Kihyun. Estaba a punto de anochecer y mi estómago rogaba por comida.

...

Llegué cuando el sol se había ocultado completamente pero me encontré con que el club estaba cerrado. No lo entiendo. Mi opción fue al susodicho dueño.

-¿Dónde rayos estás?- pregunté cuando respondió.

-No estoy en casa.- dijo.

-Creo que ya me di cuenta. ¿Qué estás haciendo?-

-Estoy ocupado, Jae Bi.-

-No me vengas con que estás ocupado. Ya estoy en blanco y necesito tu ayuda.-

Mejor volví a mi auto.

-Me reuní con los chicos, ¿sí? Estoy investigando.-

-Hm. ¿Y ya tienes algo?-

-Aún no. Sé que Shownu está en la ciudad pero nadie quiere decirme nada de Jooheon.-

-¿Y dónde está Shownu?- me da asco hasta decir su nombre.

-Jae Bi...-

Qué molestia. -¿Dónde está?-

-No vas a enfrentarlo tú sola, ¿estás loca?-

-No me hagas responderte a eso, Kihyun. Solo dime dónde está.-

-No.-

¿Qué acaso nadie sabe que no tengo paciencia?

Colgué el maldito teléfono y lo arrojé al asiento de atrás por cortesía de la frustración. Y de pronto llega el momento en el que no sé lo que hago.
Solo quiero recuperar el teléfono de Jimin, quiero saber si él está bien.

Y quiero saber si Taehyung estará en condiciones para salir del país.

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Me quedé largos minutos en el auto estacionado en una de las aceras de la plaza. Descansando, buscando qué hacer. Se me ocurrió ir con la madre de Tae pero para mí no vendría el caso. Aún la odio, aunque sé que ella podría darme más respuestas sobre el estado de Taehyung... pero aún no tengo el coraje. Aún no.

Hm, llegó el momento en el que decidí irme. Estuve a punto de girar las llaves pero de pronto me sorprendí cuando alguien golpeó la ventana del lado del copiloto. Sí me asusté, más porque reconocí quien era.

Minhyuk. Solo Minhyuk, quien movía sus labios, sin sonido, pidiéndome si podría entrar al auto. No estuve segura al principio así que me mostró una leve sonrisa. Esa sonrisa de "puedes confiar en mí" que no me creí. Pero bien, quité el seguro y él entró. Cerró la puerta y miró primero a nuestro alrededor.

-¿Qué quieres?- pregunté primero.

-Creo que tengo información que te podría ser útil.- el imbécil sonaba tan amable. Aún recuerdo que él fue parte de todo el problema así que no me daba la confianza de cederle nada. –Kihyun no está seguro pero yo sí.-

-¿Por qué quieres ayudarme?-

Pensó un poco antes de hablar. –Aprendí la lección.- dijo. –Si no quieres aceptar mis disculpas lo entenderé, pero eres amiga de Kihyun ahora así que...-

-No confío en ti.-

-Pero confías en Kihyun.-

-Hm, habla.- como sea. Desvié la mirada hacia otro lado.

-El padrastro de Jooheon compró las acciones de un par de edificios aquí e inaugurará un centro comercial al noroeste en pocos días. Jooheon heredará algunos puestos en el futuro por lo que tuvo que mudarse aquí.- en efecto ahora tengo que largarme de Corea. –Vinimos a celebrarlo hace unos días en un bar. Me fui antes de que sucediera lo de tus amigos, pero lo que sé es que, sí, Jooheon se enteró que esos chicos tenían "contacto" con Kim Taehyung y por diversión les dio una paliza.- tomó una ligera pausa antes de continuar, volteé a mirarlo. Él estaba siendo sincero. Lo sabía a pesar de no conocerlo. –Shownu y Jooheon comparten un apartamento ahora, en las residencias de BaeYi. Hyungwon y yo solo vinimos por unos días.-

Cuatro. Me di cuenta que solo dos chicos faltan de mencionar en esa lista.

-Si quieres recuperar ese teléfono, de una vez te digo que será imposible. La única manera es... que Shownu te lo dé.-

...