Parte 38

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La señora Kim llegó temprano este domingo. Un día de mierda comienza con mierda, por supuesto. Nos dimos una leve sonrisa de pena cuando le abrí la puerta. Taehyung seguía dormido así que ella fue a despertarlo.
Lo trató y le hizo cariños como el pequeño e indefenso niño que es mi hombre. Eso suena raro. En fin, Taehyung siempre fue consentido de todos modos.

Taehyung despertó y recibió a su madre con un pequeño abrazo. Un simple abrazo, seco lo describiría yo.

-¿Tienes hambre, cariño? ¿Quieres ir a casa conmigo?-

Yo me quedé de brazos cruzados en el marco de la puerta de la habitación mientras veía cómo mi chico especial aceptaba irse con su madre, sin comentarios, quejas o algo parecido. La señora Kim lo ayudó a levantarse de la cama, le puso una bata, ni siquiera lo vistió. Se lo llevó.
Lo más triste es que Taehyung no se dirigió a mí de ninguna manera. Una despedida, o una mirada siquiera. Nada.
Acepté la sugerencia de la señora Kim sobre llevarlo ella misma al hospital el lunes. Acepté como si no fuese la gran cosa, pero la verdad es que ya estaba suficientemente herida como para responderle con una represalia bien directa.

Tengo mis ánimos cavando y llegando al núcleo.
¿Taehyung sigue siendo mi novio, cierto? Quiero decir, ni siquiera sé por qué lo pienso, él no terminó conmigo. Bueno, no con palabras exactas.

-"¿Podemos posponerlo?"-

Dijo que quería posponer nuestra vida juntos. Tal vez para cuando los tres meses terminen, o cuando pasen años, tal vez.

Me siento tan acabada como si lo hubiese perdido. Maldita sea.

Ni siquiera hice algo en todo el día. Me quedé en casa, ignorando llamadas de los chicos, de Kihyun, incluso de mi madre. No hablé con nadie. Usé la laptop de Taehyung e indagué en sus juegos, pero de ahí nada que resultara esperanzador para mi día, para mi vida actual.

Algo todavía peor sucedió el día siguiente, lunes. Sucedió que no quise ir al hospital a la visita habitual. Se supone que Taehyung ya estaría ahí, pero no, no quise ir. Tampoco salí del departamento. Limpié, solo eso. Y en la noche fui dónde Kihyun.

Me sentí mal no haber visitado a Taehyung, en parte, no lo sé, no vi el caso acertado para ir. ¿Para qué iría? ¿Para ser ignorada?

-No es su culpa, Jae Bi.-

-Lo sé, cierra la boca.-

Fui al club a servir mesas, una vez más, con Yeontan siguiéndome los pasos.
Minhyuk presentó de nuevo su voz para la noche. No hay señales de Hyungwon. Kihyun me aseguró que ha estado todo tranquilo, y se refiere a los bravucones más grandes que no han dejado sus huellas ya en ningún lado últimamente. Ya no me preocupo tanto por ellos.

-¿Y qué? ¿Ya no irás a verlo esta semana?-

-No lo sé.-

-Yo creo que deberías ir. De seguro te esperó hoy.-

-Lo dudo, ¿bien? ¿Podemos evitar el tema?-

-Bien, lo siento.- bien, dedícate solo a embriagar a tus clientes. -¿Su madre te dijo algo?-

Demonios. –No realmente. Estuvimos bien esos pocos minutos, no se veía molesta, más bien, vulnerable por Taehyung, tú sabes.- y quién no.

Ya, ¿qué más hay que contar? Nada interesante pasa en un club de bebidas y comidas pasada la media noche.
Lo único que me provocó un leve ataque al corazón fue que Wonho llegó en los últimos minutos. Por suerte Kihyun se dio cuenta y me advirtió a tiempo. Me escondí en la cocina un corto tiempo. No hubo adrenalina. Era Wonho buscando a Minhyuk. Vino por él y se fue. Kihyun no supo qué pensar por tal situación, dijo que es raro que Wonho haga este tipo de cosas por sus amigos, como recogerlos muy tarde para después llevarlos a casa. Dijo que algo no cuadraba, y a mí me dio igual, ya estaba cansada.

...

Martes, tampoco fui al hospital, trabajé en el club toda la noche.
Miércoles tampoco me aparecí cerca, trabajé en el club. Y así sucesivamente hasta llegar al sábado.
¿Me siento terrible? Sí, por supuesto. ¿Pienso remediarlo pronto? No, jódete Taehyung.

-No es su culpa, Jae Bi.-

-¡Lo sé!-

¡No sé lo que me pasa! Es simple y cruel; no quiero ver a Taehyung. No por ahora. Pero, maldita sea, tampoco quiero dejar pasar otra semana. Me creo capaz de dejar pasar un mes pero eso me mataría.

Es que... ya no es Taehyung. Ya no soy yo.

-¿Quieres que vaya contigo, Jae Bi?-

-Kihyun, déjame en paz, ¿quieres?-

-Quiero ayudar, es claro que no estás bien.-

-¿Te obsesionaste conmigo? Déjame en paz.-

Eso sí lo ofendió. -¿Qué? Somos amigos. Sé que esto es difícil para ti, pero...-

-Ve con él si quieres, ya sabes dónde está.-

-Jae Bi...-

Y así es como volví a mi pésimo sentido de hostilidad. De un momento a otro hice que el único amigo cercano que me apoyaba me odiara. Ya alejé a todos.
Incluso ya ignoré las llamadas de mi padre.

¿Y es que qué rayos me pasa? ¿En serio me estoy poniendo así por un chico?
Estúpido Taehyung. No, estúpido doctor hijo de puta. A ver, no, estúpidas voces. Voz Taehyung, te odio.

Yo me odio.

Dejé pasar otra semana. Ya he parado de llorar. Me siento patética. Me siento irritada por todo. Ya no me siento acabada. Me siento... neutral.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Dejé pasar el mes entero. He llorado de nuevo. Abandoné a Taehyung... y eso duele.

Abandoné a Taehyung un mes. El segundo mes.
Si se termina el tercer mes, siento que moriré.

Si voy ahora, tengo miedo que ni siquiera sepa mi nombre.

-Él está bien.-

-No lo está.-

...

~ Say Nothing ~ V - BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora