~ Say Nothing ~ V - BTS

Parte 17

-¿Me causarás dolor?- pregunté después de unos segundos. Algo escéptica para no hacer notar mí balbuceo.

Taehyung volvió a mirar por la ventana pero, como dije, él cerró las cortinas antes así que... solo se mantiene fijo al frente.

-Sí.- asintió no muy convencido.

Por como apretaba sus labios y vacilaba, supuse que se había arrepentido por haber dicho eso pero lo mantenía. Él nunca había dicho que me lastimaría, ni siquiera en broma. Yo sí, pero él nunca.

-¿Cómo?- volví a preguntar.

Se encogió de hombros. Miró al lado contrario mío, dando por hecho que me ignoraría a continuación. Se dio la vuelta y prosiguió a salir de la habitación.
Me he quedado sin qué pensar de nuevo.
He comenzado a dudar de él otra vez y me niego a decir "esquizofrenia" en voz alta... otra vez.
Es una palabra rara, incluso para Taehyung, pero si esto que ha pasado es parte de, y de su anterior vida antes de conocerme, yo... debo llevarlo al hospital.

El problema es cómo. No hay manera.
Lo que me cuesta entender es cómo pasó estos dos últimos años sin mostrar esos signos. ¿Qué influencia hay en el ahora? Yo diría que bastantes. Pero hubo un comienzo...

La primera noche de las voces, mientras dormíamos. No hubo indicios de nada. Ni un antes pero sí un después. Lo único que se me ocurre tiene que ver con su madre, quien le hacía compañía a él mientras yo cumplía con mis jornadas de trabajo matutino.

"La esquizofrenia no tiene cura. Es algo que vive contigo en tu subconsciente", Kihyun dijo eso una vez en el club, "es como un parásito que se alimenta de ti... y te manipula".

-¿Hola?- no tuve más remedio que tomar el teléfono y llamar a la única ayuda médica que conozco. –Quiero hablar con el Doctor Shin.- debí haber hecho esto hace mucho tiempo. –Lee Jae Bi. Kim Tae Hyung fue su paciente, la última cita y revisión fue hace casi un año.- cuando Taehyung definitivamente dejó de tomar pastillas. O eso se supone. -¿Hola? Sí, soy yo.- me alegró mucho que respondiera. –Usted sabe que soy muy directa, ¿verdad?- claro que lo sabe. –Si usted recuerda el caso de mi novio, Kim Taehyung, supongo que también recordará la razón por la cual no se me informó a mí, su compañera de vida, el verdadero trastorno que él sufre. Sé que fue un trauma de la niñez, y el voto selectivo de silencio fue decisión propia, pero, ya que lo pensamos bien, eso se ha ido. Ahora... solo queda una cosa. Y esa cosa ha vuelto. Sé que es algún tipo de esquizofrenia o lo que sea, y sé que es algo que usted y su familia me ocultaron todo el tiempo. Ahora respóndame esto: ¿Kim Taehyung lo sabe? ¿Él sabe lo que es?-

"Sí", cedió después de una larga pausa.

Y como si estuviese bajo el agua... comencé a sentir que me ahogaba.

Pero no me atreví a soltar el teléfono. –Bueno, ahora ya estoy segura de esto por fin. Entonces solo necesita medicamentos, ¿verdad?- el silencio de la habitación me sofoca. –No, no puedo llevarlo.- siento que tiemblo. –Solo deme los medicamentos que él necesita, lo que le estuvieron dando a mis espaldas.-

Es una leve sospecha. Para mí tiene sentido. Tal vez la madre de Taehyung lo medicaba cuando yo no estaba presente. Y tal vez las voces comenzaron cuando dejó de tomarlas, sea cual haya sido la razón.

-Iré a su consultorio ahora mismo. Espero que me reciba y me dé lo que necesito.-

Finalmente colgué. Ah, siento los pies pegados al suelo. Demonios, incluso las manos me sudan. Me sentí tan extraña, ni siquiera pensé en decir todo eso, pero lo hice. Y bueno... no mentí cuando le dije que iría.

Ahora lo que tengo que hacer es mentirle a Taehyung, tengo que decirle que voy a un lugar a dónde él no puede ir. Aunque, viendo esa idea general, eso es exactamente.

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Al fin me digné a bajar a la cocina, mi madre se encuentra en la estancia mirando televisión y dizque leyendo una de sus revistas. No hay señales de Taehyung. Lo busqué en el piso de abajo, luego se me ocurrió buscarlo arriba otra vez. Qué demonios, ¿cómo desaparece tan rápido?

-Jung Bi, tengo que salir.-

-¿Ginecólogo?- ni siquiera me miró.

-Sí, y esta vez sé discreta.- le reclamo para luego salir de la casa.

Iba camino al auto cuando de pronto noté a Mark afuera de la casa de sus abuelos. En cuanto se dio cuenta de mí vino a saludarme.

-Oye, ¿has visto a Max?-

-¿Has visto a Taehyung?- imité su tono. -¿Por qué no amarras a ese can? Se te pierde bastante, ¿no crees? Creo que no te quiere.-

-Entonces no encuentras a tu novio.-

-Bien jugado.- llegué al auto pero aún no subí, Mark me siguió. –Tal vez está en mi jardín trasero.-

-¿A dónde vas?- preguntó.

-A un sitio...-

-Jae Bi.-

Hey, mira quién apareció. Taehyung quien ha salido desde el lateral de la casa. Sí, porque no se me ocurrió revisar el jardín trasero.

-Te estuve buscando.- le dije.

En cuanto llegó conmigo, Mark se despidió y dijo que continuaría buscando a su perro.

-¿A dónde vas?- Taehyung preguntó.

-Tengo que salir.-

-Pero... haríamos algo juntos hoy, ¿recuerdas?-

Maldita sea.

-Cierto. Mira, solo es algo que debo hacer rápido. Volveré cuando menos te des cuenta, ¿sí?-

Tiene la misma expresión en blanco que esta mañana. Lo veo a los ojos y me asusta. No me intimida, solo... pienso en esa enfermedad que tiene en su cabeza. Pienso... y me pregunto qué pensará al verme de esa manera.

-¿Hongdae?-

-Sí. Hm, la clínica. No estoy embarazada, te aclaro.- le sonrío. Me esfuerzo en sonreír.

-Hm.- sé que no quiere que me vaya pero no encuentra las palabras para decírmelo.

Esto no es grave, solo iré y volveré.

-Será rápido, te lo prometo. Y más tarde haremos lo que quieras, excepto escondidas y películas de terror.-

Trato de hacerlo reír pero no funciona. Sí está molesto, pero es tan extraño que solo se quede así de inexpresivo.

Se quedó mirándome, parpadeó un par de veces hasta que decidió darse la vuelta y caminar hasta la entrada de la casa. No se despidió de mí y ni siquiera pude besarlo. Lo último que miré de él fueron sus pies descalzos. Lo perdí de vista cuando cerró la puerta.

Cuando Taehyung se molesta, lo normal es que me lo dice. Cuando se molesta, lo normal es que parezca un niño pequeño no un psicópata.
Me queda pensar que la enfermedad está avanzando.

...