~ Say Nothing ~ V - BTS

Parte 39

Kihyun vino a verme al departamento un fin de semana, salimos a cenar, según su plan de hacerme sentir mejor, pero solo lo hizo para decirme algo importante. Él fue a visitar a Taehyung en el hospital y vino a contarme su dulce experiencia la cual nunca le pregunté.

-¿Qué?-

-Él está bien, Jae Bi.- repitió. Incluso sonreía, ¿eso era tan bueno? –Pero...- oh bien, ahí está, adiós sonrisa.

-¿Pero?- sabía que lo bueno no duraría.

-Pero... creo que está molesto.-

Oh, vaya. -¿Cómo? Ni siquiera sabe lo que es estar molesto.-

-Por Dios, Jae Bi, deja de ser tan...-

-¿Tonta? No.-

-Idiota, más bien. El chico ha estado preguntando por ti, ¿no lo entiendes? Se siente abandonado. Te han llamado del hospital, incluso, pero no respondes.-

-Taehyung no siente nada.- hora de irme.

-¡Lee Jae Bi! ¿A dónde vas?-

-A casa.-

La tonta Jae Bi salió del restaurante y, por supuesto, Kihyun detrás de ella. Ya es de noche y no traje mi auto.

-Jae Bi, por favor. Él te necesita.- me siguió por unos cuantos metros hasta que me detuve. –O al menos...- pensó un poco. –Si vas a terminar con él y de verdad acabar con todo esto, díselo. Deberías decírselo.-

-No quiero acabar con esto.-

-Entonces no actúes como tal.- el chico sentenció, evité mirarlo.

Mierda, no puedo discutir de esto ahora. Detesto cuando Kihyun tiene razón. Quiero decir, no, no tiene razón. No voy a terminar con Taehyung, quiero verlo pero... ah, es solo cuestión de tiempo. Su tiempo.

-Adiós, Kihyun.-

-Jae Bi.-

Continué mi camino dejando a mi amigo atrás. Caminé un par de cuadras sin pensar demasiado. Tal como siempre, me sentía molesta, demasiado borde a mi vida.
No quise pensar tanto lo que Kihyun me dijo, pero mentiría si dijera que no lo hice. Fue lo único en mi cabeza.

Pero llegué al límite cuando me encontré con una ingrata sorpresa a un par de cuadras.
Namjoon, saliendo de un auto. Oh, vaya, el desaparecido Kim Nam Joon.

-Jae Bi, qué sorpresa.-

Hey, todavía me recuerda. –¿No estabas en el extranjero?-

¿Por qué me detuve a charlar con él? Se veía bien, lo admito. El auto nuevo era un excelente detalle.

-¿Me extrañaste? ¿Cuánto ha sido, dos años?-

-Se siente como diez, ¿no crees? ¿Qué te trae por aquí, Namjoon?-

-Mi madre vive en este edificio.- señaló detrás de mí.

-Ouh.- encantador.

-¿Qué hay de ti? Lo último que supe de ti fue que te mudaste aquí con... ese chico extraño.-

Si aún seguía siendo amigo de Yoongi, no sería buena idea seguir hablando con él, ¿cierto? Bueno, mejor evitarlo.

-Ese chico extraño.- repetí por lo bajo. –Sí, bueno, estoy sola por ahora.-

-¿En serio?-

¿Acaso insinué que estoy soltera? Me vi en la necesidad de cambiar el tema.

-¿Has hablado con Yoongi?-