~ Say Nothing ~ V - BTS

Parte 21

Taehyung no despertó debido a mi grito. Por un segundo llegué a pensar que lo había imaginado o tal vez soñado, pero yo estaba más que despierta. Me levanté de la cama sin la culpabilidad de moverlo, fui al cuarto de baño y en el espejo intenté mirar lo que el pequeño granuja me había hecho en la espalda. Un rasguño rojo debido a sus uñas. No fue tanta la fuerza como para provocar sangre pero duele bastante.

"-Me cortaron las uñas.-"

Sí, a algo debía recordarme esto. Cuando Taehyung se encontraba en aquel hospital, las enfermeras cortaban sus uñas, porque él tenía el impulso de rascarse o rasguñarse con ellas. Esta es otra señal de alerta. Esta es otra señal de mi rotunda estupidez y cobardía.

En cualquier momento, me di cuenta de Taehyung, quien se quedó de pie recargado en el marco de la puerta. En su pecho, él se rascaba tenuemente, pero bastante fuerte como para dejar una marca roja. Solo me miraba, sin ninguna expresión.

-Lo siento.- dijo, con su voz casi inaudible.

-¿Lo hiciste a propósito?-

Negó ante mi pregunta. Fui un poco ruda al atacarlo con esa pregunta y él lo notó.

-Tuve una pesadilla.-

Se hizo pequeño al encogerse de hombros, una de mis debilidades. En el espejo, volví a mirar la marca en mi espalda.

Y volví a mirarlo para pedir cierta piedad. -¿Qué vamos a hacer?- pero lo único que pudo hacer fue encogerse de hombros.

A Tae nunca se le pasará por la cabeza ir al hospital voluntariamente, por más dañina que se vuelva su enfermedad. Por eso yo debía cometer la traición de llevarlo sin que lo supiera. Ya lo tenía planeado desde hace poco, pero cada vez que lo pensaba me ganaba la culpa. ¿Desde cuándo soy tan cobarde? Desde que Taehyung se convirtió en la parte más importante de mi vida, podría ser.

-Ve a la cama.-

Sé que no voy a perderlo. Si debo pensar positivo, sería algo como: él estará ahí de nuevo, sufrirá un poco pero veremos que muy pronto se sentirá mejor. No hay cura alguna para lo que tiene, pero podría ser controlado los próximos dos años, como los anteriores. No importa las medicinas que tome, ¿verdad? En cuanto sea estable.

-Deja de mirarme así, estoy bien.-

-Jae Bi.-

-Ve a dormir, Taehyung.-

-¿Vendrás tú también?-

Sé que no voy a perderlo, pero ambos sufriremos. Haga lo que haga.

No dormí esa noche. Como a las tres de la mañana bebí dos tazas de café. Comencé a sentir dolores de cabeza. Odio la televisión matutina así que maté el tiempo jugando juegos estúpidos en la laptop de mi hombre. Abrí las cortinas de la estancia cuando faltaba muy poco para el amanecer. Perdí la cuenta después de la cuarta taza, la que tenía en mis manos podrías ser la sexta o la séptima.
Taehyung tenía muchos juegos, algunos infantiles y otros tan "clasificación +18", y me refiero a lo sangriento. Mi hombre no tiene redes sociales ni nada con lo cual comunicarse con nadie, yo eliminé Facebook desde hace tiempo. Él y yo somos muy aislados, no tenemos muchos amigos, yo menos por ser tan borde con las personas. Creo que los únicos amigos que tenemos solo podemos contarlos con el signo de "OK". Bueno, ahora no estoy segura de Jimin.

Vi el amanecer, sentada en el suelo con las piernas cruzadas, con una playera azul de Taehyung como vestido, y aparte una taza grande con cereal.
Al ver el bello panorama del amanecer de Hongdae, solo pienso que lo odio.
Ahora pienso en Jooheon, maldita sea. Mi cabeza está en llamas como el infierno. Siento que me volveré loca de verdad.

Y de pronto, siento que mi locura me carcome cuando siento la presencia de mi chico especial detrás de mí. Se sentó detrás de mí abriendo sus piernas y me abrazó para dejar su mentón a merced de mi hombro. Le di una cucharada de cereal y luego un beso en la comisura de los labios.

-No dormiste.- dijo.

-¿Y tú?-

-Un poco, Jae Bi.- sentí que besó mi nuca, una sensación agradable después de tanta turbulencia. –Ya es de día, quiero ir a alimentar a los patos.-

-Yo no.-

Yo no quiero ir porque, en cuanto termines la primera bolsa de semillas, volverás a ese lugar que tanto odias.

-¿No?-

-Quiero decir, no ahora, ¿por qué no esperamos a más tarde?-

-Hm, es cierto, ellos deben estar dormidos aún, ¿verdad?-

...

Taehyung fue a ducharse mientras yo preparé el desayuno para él, y mientras, aproveché su ausencia para llamar a su doctor y darle el aviso que esa tarde... sería el día que lo llevaría. Me dijo que avisara a sus padres pero ni a eso quise hacerle caso. Ya es bastante tiempo en que Taehyung y yo nos las hemos arreglado solos, bueno, con gran ayuda de mamá... el punto es que no los necesitamos más, maldita sea.
El doctor Shin dijo que solo sería una revisión, no es seguro que Taehyung se quede ahí, pero como solo yo tengo juicio de los síntomas actuales, ¿cómo debía hacer esto sin sentirme tan culpable?

"Es por nuestro bien", así empiezo para el primer paso.

Yo tomé una ducha, miré la marca de mi espalda que aún está ahí y luego me convencí de que lo que haré es necesariamente lo correcto. Otra vez.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Cuando salí del cuarto de baño terminando mi cola de caballo, escuché un llamado a la puerta principal. Como Taehyung era el que más cerca se encontraba, él fue a atender, yo miré desde el pasillo.

Kihyun. Demonios.

-Hola, Taehyung. Me alegra verte, amigo.-

¿Por qué a esta hora? Faltaba poco para medio día.

-¿Qué haces aquí?- llegué con él. Oh, mis modales. –Quiero decir, buenos días. Si puedes decirme... ¿qué demonios haces aquí?-

Taehyung notó lo extraño de la situación, eso creo, noté que frunció el entrecejo por un segundo mientras vacilaba entre nuestro amigo y yo.

-Solo... vengo a ver a Taehyung.- Kihyun excusó. –Me llamaste ayer y dijiste que ya estaban aquí, entonces... aquí estoy.- oh, no, la mirada de auxilio y la sonrisa falsa. –Tae, ¿podrías traerme un vaso de agua?-

Por supuesto que mi hombre fue a cumplir la petición sin replicar.

Cuando Tae desapareció de la habitación golpeé a Kihyun en el hombro. -¿Qué rayos te pasa?- y tuvimos que hablar bajo, claro.

-Auh. ¿Qué?-

-Un vaso de agua no tarda nada, debiste pedir café.-

-No tomo café.-

-¡Ah, ese no es el punto! ¿Qué haces aquí?-

-Tenemos problemas.- me susurró a la cara.

-¿Qué?-

Tan rápido Taehyung volvió para darle el maldito vaso de agua a Kihyun, por ello tuvimos que fingir de nuevo.

-¿Y... qué piensan hacer hoy?-

-Alimentaremos a los patos.- Tae respondió felizmente.

-Oh, ¿piensan salir? ¿Con este calor? ¿Ahora? ¿Por qué no nos quedamos aquí y hacemos algo los tres juntos?-

-¿Sería una de tus fantasías, no?- volví a golpearlo en el hombro. –Pervertido.-

-¿Qué?-

Mala actuación mía, lo sé.

Bien, esto es lo que entendí: no podemos salir porque hay algo afuera que de seguro nos espera.

-¿Fantasía?- Tae el inocente atacó. –Uhm, yo quiero salir, Jae Bi.-

Demonios.

...