Parte 48

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Estamos a mano, ¿qué clase de idea estúpida es esa?
Si algo sé de mí es que nunca vivo con nadie a mano. Bueno, no debería de decir eso ahora, mucho menos con esta situación, pero creo que podría hacer algo con eso para amortiguar la tensión.

-No, Taehyung. Te juro que me vengaré por esa nota.-

-No lo decía en serio... bueno, en parte.-

-Lo decías en serio. Mira, ya ni siquiera sé qué tipo de respuesta buscaste en mí.- el chico evitó mirarme otra vez, se sintió regañado, y con mayor razón porque de verdad ya venía yo a desahogarme un poco. -Tal vez Jungkook y tú tenían una idea y yo otra, ¿pero sabes qué? ¿Por qué no olvidamos todo eso de la respuesta? Yo soy Lee Jae Bi, ¿bien? ¿Cuánto hace que nos conocemos? ¿Tres años? ¿Cuatro años? Casi no es nada, ¿verdad?- asintió. -Y míranos, esta relación parece de una eternidad.- sonreí, aunque aún él no me mira. -Han pasado muchas cosas, por mi culpa y por tu culpa, ¿estás de acuerdo?- volvió a asentir. -No quiero decirte que empecemos de nuevo porque eso será imposible.- al fin volvió a mirarme, gracias, maldita sea. -Entonces... tú dime qué hacer.-

Pareciera que de pronto el tiempo se congeló. Taehyung, con sus ojos bien abiertos en mí, pensó demasiado. Tardó demasiado en responderme. Vaciló y vaciló, pero está bien, fui paciente. Comencé a rasurarle ese tonto bigote. Se quedó quieto mientras yo hacía mi trabajo. Creo saber cuándo fue que tuvo la idea por el cambio notorio de su expresión, pero aún así no me lo dijo.

Pasé una toalla por su mentón para secar, entonces decidí que llegó el momento de terminar esta escena de drama. Le di un leve empujón en el pecho para que me diera el espacio. No volví a verlo a la cara cuando decidí salir primero, sé que me miró alejarme, eso hace él.

La señora Kim hizo el desayuno para mí. Cuando yo terminé, Taehyung llegó.

Esto se estaba volviendo algo incómodo. Taehyung ignoraba mis conversaciones con su madre. Ella y yo hablamos de cualquier cosa, él ignoraba que estuviéramos en la misma habitación los tres. De pronto me di cuenta que no me estaba ignorando a mí, ya que sus ojos se paseaban sobre mí cuando yo decía lo que sea y hacía muecas cuando hablaba su madre.

La señora Kim me había dicho al llegar que él estaba molesto por todo. Pero descubrí que él estaba solamente enojado con ella.

Tuve una idea.

Le dije a la señora Kim mi idea de sacar a Taehyung del departamento, a ella le preocupó el frío, pero pude convencerla.

Sé que los movimientos de Taehyung son torpes, creo yo que, por sus reflejos, no me informaron si era algo muscular o lo que sea. Pero no creí que el frío le afectaría tanto, así que lo convencí, omitiendo las groserías, para vestirlo y salir a jugar con la nieve. Y de plano, buscar mi auto.

La señora Kim lo rellenó con suéteres, gordito como un muñeco de nieve.

-Camina.- lo tomé de la mano, él usaba guantes. No replicó ni dijo nada en todo el camino hacia afuera.

Al fin afuera, la nieve cubría nuestros zapatos.

-¿Tienes frío?- le pregunto y el niega repetidas veces. También tiene puesta una máscara negra. Su caminar también es torpe, así que tengo que sujetarlo fuerte porque tropieza fácilmente. -Oye, cuidado. Despacio, ¿sí?-

-¿A dónde vamos?- ah, finalmente habla.

Yo lo guío sobre la acera. -Ya te dije, buscamos mi auto.-

-¿Y luego qué?-

-¿Y luego? No sé, es peligros conducir ahora, así que supongo que lo dejaremos ahí mismo hasta que la nieve se derrita en febrero.-

-¿Dejarás tu auto ahí dos meses más?-

-Sí, digo, si voy a vivir por aquí cerca, ¿por qué no dejarlo ahí?-

Taehyung volvió a tropezar. -Jae Bi.-

Me reí de él porque cayó de rodillas. Gracias al cielo cayó sobre nieve. Le ayudé a levantarse pero no volvió a caminar.

-¿Qué haces?-

-Jae Bi.- dijo. -Entonces si te mudas por aquí, ¿significa que seremos vecinos?-

Fruncí el entrecejo. -¿De qué hablas? Vivirás conmigo, cabeza de chorlito. Viviremos juntos. Yo cuidaré de ti.- sonreí. -Siempre he cuidado de ti.-

-Pero... aún no te he dicho qué es lo que deberíamos hacer.-

-Pues entonces hazlo ahora porque ya vi un departamento en renta, tonto.-

Volteó a ver lo que yo miraba, no mentí, un letrero grande justo estaba detrás de él. -Esto es muy rápido.-

Eso me hizo reír. -¿Tú crees? Taehyung, sé que no quieres estar con tu madre, y no es que quiera alejarte de ella pero, siendo franca, tal vez si te alejas de ella un poco ya no estarás tan estresado.-

Calló por un momento. -Ella me hace enojar.- dijo.

-Lo entiendo.-

-Por eso papá ya no está.-

-¿Lo asesinó?-

-Se separaron, Jae Bi.-

-Oh, eso. Bueno, no es tu culpa, Taehyung.-

-Papá venía a visitarme, pero últimamente peleaban mucho, así que dejó de venir.-

-Taehyung. Tampoco es culpa de ella, ¿entiendes? Todo aquí es crítico. Es común que todos se sientan vulnerable por ciertas cosas y por eso actúan así.- asintió. -Te dije que no es tú culpa, pero ya sabes, esta situación no es muy común. Ella es una madre que se preocupa por su hijo, ¿entiendes? Sus intenciones nunca fueron malas.- y siempre creí lo contrario.

-Lo sé.-

-Recuérdalo, ¿sí? No hay intenciones malas.-

-Yo creo que sí las hay.-

-Bueno, sí, eso depende mucho de la persona, pero...-

-Personas como...-

-¿Como yo?- bromeé. Volvimos a caminar.

-Tú antes tenías intenciones malas de lastimar a personas.-

-Siempre me lo vas a echar a la cara, ¿no?- eso lo hizo reír. Dios, esa risa.

-No, me refiero... ah, déjame recapitular lo que iba a decir. Sí fuiste mala, pero...-

Tarde me di cuenta que estábamos conversando con tanta normalidad, como lo hacíamos antes. Ayer y apenas emitía un sonido. Ey, hice un buen trabajo, hice que volviera a hablar. Otra vez y otra vez.
Solo es cuestión de aclarar, soltar, continuar.

-Continuar.- dijo Taehyung al final de ese día.

No volver a empezar.

Continuar.

Me encantó la idea.

...

~ Say Nothing ~ V - BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora