Two-faced guy [Yoonmin] ©

Capítulo 11

Hoy le dedico este capítulo a Fede_Jeon. Te amo muchísimo, y que tengas un muy feliz cumple ♡ gracias por todo ♡

No existían palabras para describir el estado de Jimin, pues ningún término podría haber definido con exactitud cómo se sentía en ese momento, cuando aún estaba atrapado entre los brazos del pelinegro en aquel balcón y con su rostro lo suficientemente cerca como para que pudieran besarse otra vez.

No tenía idea de que un simple beso fuera a remover tantas cosas dentro de su ser, ni que sus palabras fueran a dejarlo tan desconcertado. Parpadeó varias veces y se animó a mirarlo a los ojos poco después, dándose cuenta entonces de que ya estaba cayendo por completo por el mayor.

Yoongi suspiró, sintiendo exactamente lo mismo. No supo cuándo ni cómo, pero no podía negar que se sentía atraído a Jimin de una manera en la cual jamás se había sentido atraído por alguien en su vida, y si bien los sentimientos eran agradables, nuevos y cálidos, no quería dejar que siguieran avanzando. No quería que Jimin pudiera salir afectado por su culpa y la del mundo en el cual estaba metido.

—Hyung... ¿Estás bien?

—Sí, yo-- vamos.

—Per--

—Vamos —comenzó a irse.

—No, espera —lo tomó suavemente de la muñeca—. No puedes besarme y luego irte de esta forma, mucho menos después de haber dicho algo así. No te entiendo.

—No tienes por qué entender.

—Creo que esta es la parte más egoísta, Yoongi. Estás haciendo que me vea involucrado en algo contigo para luego no contarme absolutamente nada de ello ¿No crees que merezco saber la verdad? Yo siempre fui honesto contigo.

—A decir verdad, no sé tanto sobre ti.

Pero eso era una mentira. Las veces que se habían encontrado en la universidad, Jimin le había contado bastante de si mismo cuando Yoongi no quería decir una palabra sobre su vida, pero en ese instante el menor estaba tan confundido, que no lo consideró, asumiendo que lo que el otro había dicho era verdad. Se encogió de hombros.

—Es que no tengo secretos. Lo que quieras lo puedes saber si me lo preguntas. En cambio, cuando actúas de este modo... me desesperas. No porque no quieras contar algo, estás en todo tu derecho, pero sí porque llegas a hacer que sepa que hay algo que no quieres decirme, pero jamás me cuentas. Y no son estupideces, sino que parece ser algo muy grande.

—¡Ya te lo dije! ¡No puedo hacerlo! ¡No quiero hacerlo! ¡Y debería! —su voz tembló un poco— ¡Debería ser capaz de decirte todo porque eso te espantaría, y lograría salvarte de una posible vida de mierda que no mereces, Jimin! Pero ¿Sabes qué? No puedo. Tú y tu... estúpida bella sonrisa, tus tontos ojos dulces... todo de ti me atrapó de alguna forma, y no quiero tener que llegar a ese punto. Hazlo por ti, ¿Está bien? Aléjate por tu bien.

—¿Y qué hay de ti?

—Estaré bien solo. Siempre he estado así, es... mi destino. Yo elegí esto.

—Si hay algo que sé es que podemos cambiar el rumbo de las cosas. No sé cómo es tu vida, no sé por qué dices lo que dices, pero sí sé que puedes cambiarlo. Puedes hacerlo. Yo te ayudaré si así lo necesitas.

—Estás tan molesto y frustrado... ¿Por qué eres tan bueno conmigo?

—Porque tú también me atrapaste, Yoongi. Más de lo que crees —admitió, y sus mejillas se sonrojaron.