Two-faced guy [Yoonmin] ©

Capítulo 17

Era ya de noche. Yoongi detuvo su motocicleta frente a la casa de Jimin. El menor soltó su cintura y se bajó, siendo seguido por el otro, quien lo miró con una pequeña sonrisa.

—¿Qué?

—Nada, es... un alivio que no te hayas alejado del todo incluso cuando sabías la verdad, y cuando no sabías que ya había dejado todo. Significa mucho.

—Ya te lo había dicho. Lo que hagas no te define como persona.

—Ojalá todos pensaran como tú, Jimin.

—Ojalá no. De esa forma, sólo yo estaría a tu lado —se cruzó de brazos.

—Ah, eso es algo egoísta, ¿No lo crees?

—Tal vez.

—Déjame eso a mí. Soy yo quien debe cuidar que nadie ande dando vueltas a tu alrededor.

—Por favor, hyung, ¿Quién--?

—El violador ese de tu universidad.

—No era un v--

—¿Y qué me dices de ese muchacho de allí?

Después de haber fruncido sus cejas, Jimin miró hacia la puerta de su casa. Taehyung, su mejor amigo, estaba sentado allí. Tenía lágrimas en sus ojos y varias maletas a su alrededor. Sin siquiera pensarlo dos veces, corrió hacia él. Yoongi se acercó a pasos lentos. No quería admitirlo en voz alta, pero quería asegurarse de que ese chico no tuviera otras intenciones. No ahora, cuando él y Jimin podían ser más cercanos.

—¡Taehyungie! ¿Qué pasó?

—¿Recuerdas cuando me dijiste que si me echaban tendrías un lugar para mí? ¿Era verdad?

—Ay, amigo... —lo abrazó— por supuesto ¿Nadie te abrió?

—No hay nadie.

—Ya veo.

Jimin abrió la puerta y dejó entrar a los dos muchachos. Inmediatamente pidió a su amigo que tomara asiento y fue a guardar sus maletas.

Yoongi lo miraba con una ceja levantada. Suspiró. Taehyung tragó saliva, nervioso.

—¿Qué es todo esto?

—Mis padres me echaron de casa. No querían que su hijo fuera un artista inútil. Ellos querían a un médico.

—Pues qué idiotas.

—¿Eh?

—Los padres pueden ser unos imbéciles a veces, niño. Lo sé mejor que nadie. También me echaron de casa.

—Y... ¿Cómo pasó?

—Omitiré varios detalles, pero también los decepcioné. No los veo desde entonces.

—¿Cuándo fue?

—Hace diez años.

Taehyung bajó su mirada a su regazo y sus ojos se llenaron de lágrimas. Yoongi al verlo se sintió mal por el joven. Aún recordaba lo mucho que había sufrido cuando le había pasado a él, y supuso que estaría pasando por algo muy similar. Palmeó dos veces su hombro.

—Tú volverás a verlos pronto, tranquilo.

—¿Cómo lo sabes?

—Son sólo tus gustos. No fue algo tan grave.