Ji Hyun se encontraba inquieto en su casa. Desde hacía un par de días había algo, una idea, una suposición acerca de un hecho que no lo dejaba dormir. Necesitaba respuestas. Por eso, preparó un par de cosas que podría llegar a tener que usar una vez que estuviera afuera y bajó las escaleras. En la sala, Jimin y Taehyung estaban estudiando para un importante examen. Su hermano se puso de pie en cuanto lo vio y acomodó sus lentes de lectura sobre el puente de su nariz.
—¡Hyung! ¿A dónde vas? Creí que hoy tenías tu día libre.
—Surgió un problema en la oficina y tengo que ir.
—Siempre hacen lo mismo —se quejó el menor— ¿Por qué no hablas con tu jefe? Siempre puede haber alguien más que haga eso por ti. Necesitas descansar.
—Lo intentaré, pero dudo que quiera. Nos vemos, chicos.
El muchacho, después de haber sido saludado por los dos menores, salió y se subió a su auto. Luego de haberlo encendido, empezó a conducir hacia un lugar al que creía que jamás iría: la gran casa de Kang Joo Seung.
Llegar a su destino le llevó unos cuantos minutos. Detuvo su auto en la entrada, donde dos hombres que trabajaban de vigilantes se acercaron a él. En cuanto bajó la ventanilla, ambos sacaron sus armas y le apuntaron.
—¡Quieto! —exclamó uno de ellos.
—Ey, tranquilo. Vine para hablar con Kang.
—Vete de aquí si no quieres que te saquemos por las malas.
—¿Acaso no escuchaste?
El sujeto que se había quedado callado se alejó unos pasos y marcó un número en su teléfono. Intercambió un par de palabras con la otra persona y cortó. Después, se acercó al auto.
—Dijo que lo dejemos pasar.
—Pero--
—Ya sé. Sin embargo, son las órdenes. Y si llega a suceder algo, estamos autorizados a disparar. Entra.
Las rejas se abrieron. Ji Hyun sonrió, victorioso, y entró. Dio un par de vueltas por los caminos que dirigían a la casa y volvió a detener el vehículo justo en la entrada de la misma, en donde el hombre a quien había ido a visitar lo estaba esperando de brazos cruzados. Cuando el joven hubo bajado del auto, fue junto al mayor en silencio hasta su oficina. Todos dentro de aquella casa miraban a Ji Hyun con molestia, pues sabían que había sido múltiples veces una gran amenaza para su negocio y su gente. Y eso hacía que el muchacho se sintiera poderoso, de alguna forma.
Cuando estuvieron dentro de la habitación, ambos tomaron asiento. Joo Seung miraba al otro con el ceño fruncido y sus manos juntas sobre su escritorio.
—Es bastante extraño tenerte por aquí.
—Sí, lo sé.
—¿A qué se debe todo esto? ¿A qué quieres jugar, muchacho?
—Creo que soy yo el que debería hacer esa pregunta.
—¿De qué estás hablando?
—Mire, Kang, llevo en esto ya mucho tiempo como para no darme cuenta de las trampas que los demás nos ponen para eliminarnos. Sé exactamente qué están haciendo ahora.
—Me temo que sigo sin entender.
—Tuve un encuentro con Yoongi. Hablamos un poco. En medio de la charla, me dijo que ha dejado el negocio. Esto ya ha pasado cientos de veces, señor Kang. Una banda enemiga con quien nos enfrentamos miles de veces aparece para decir que ya no hay motivos para hacerlo otra vez, que se retiran, que ninguno debería verse como una amenaza en el futuro. Y es así un buen tiempo, pero luego aparecen a nuestras espaldas en un intento de derrotarnos. Me parece algo muy bajo de su parte, teniendo en cuenta el nivel que suelen tener. Así que dile a tu... niño especial que deje de jugar. No me creeré nada de lo que diga.
ESTÁS LEYENDO
Two-faced guy [Yoonmin] ©
FanfictionJimin era un experto en sospechar que los demás escondían cosas, pero jamás había imaginado que la persona en quien más había aprendido a confiar le ocultaría una vida llena de secretos.