Al igual que todas las noches desde su llegada a Le Petit, Obito e Itachi se reunieron con ellos para cenar. Los tres hermanos conversaron animadamente durante la comida y Haku se veía radiante. Sin embargo, Naruto se mantuvo callado. Cada vez que alzaba la vista, se encontraba con los ojos negros de Sasuke sobre él y apartaba rápidamente la mirada, lleno de confusión.
Sasuke no podía dejar de observarlo esa noche. Por más que trataba de distraerse conversando con sus hermanos, sus ojos se volvían hacia él nuevamente como atraídos por un imán. Con una expresión posesiva, recorría su rostro y sus hombros para detenerse en la curva suave de sus senos. Lo deseaba, admitió lentamente. Pero al mismo tiempo, sabía que no podía estar tan loco como para enamorarse de él. Y sin embargo, no había podido apartarlo de su mente en toda la tarde, recordando su cuerpo cálido que se había estremecido debajo del de él. Pero no solo habían sido imágenes sexuales las que se cruzaron por su mente. Una y otra vez lo recordaba con la falda subida a la orilla del río, riendo alegremente mientras cazaba la rana con Yukito. Era absolutamente encantador y Sasuke no quería olvidar las razones que había detrás de toda aquella locura.
Finalmente, Haku y Naruto se dispusieron a abandonar la habitación para que los caballeros pudieran disfrutar de un cigarro y una copa de brandy. Poco tiempo después, todos volvían a reunirse en el salón principal. Sasuke observó a Naruto con el ceño fruncido, reflexionando sobre la paradoja que él le representaba. "Parece tan inocente", admitió con furia. Tenía unos modales impecables al igual que su forma de hablar...excepto, pensó Sasuke con una sonrisa, por las guerras de almohadas que mantenía con su hijo y la frescura con que atrapaba ranas en el río. En ese momento, Obito interrumpió sus pensamientos con una pregunta y Sasuke volvió a la realidad con esfuerzo. Ese no era el momento para resolver aquel problema y solo cuando comenzó a desvestirse para dormir volvió a pensar en Naruto.
No cabía duda de que se trataba de un aventurero, decidió finalmente. No importaba cuales fueran sus razones, mentía al decir que era su esposo. Y lo más condenable era que se hubiera tomado el trabajo de falsificar aquellos documentos ¿y quien era el padre de Yukito? Se preguntó de pronto con un vuelco en el corazón ¿por qué no había buscado ayuda de él?
La idea de otro hombre poseyendo ese cuerpo joven y vibrante era en extremo desagradable, y Sasuke se forzó a pensar en otra cosa. Fue entonces cuando se le ocurrió algo aún más chocante: tal vez había una persona que él aún no había conocido...el cerebro de todo el plan, el hombre en la vida de Naruto...el padre de su hijo.
Sasuke apretó los puños. Por supuesto. Debía ser un hombre que lo había escogido a él como víctima, habría falsificado los documentos y realizado las investigaciones necesarias para que no hubiera ninguna contradicción en la historia. Tal vez su abuelo no estuviese muerto y se tratase de él.
Sasuke estaba casi seguro de haber encontrado la verdad. Naruto nunca había ocultado el hecho de que era dinero lo que buscaba ¡y que bien pensado que estaba todo el plan! El niño, los criados, el bellísimo Haku...todos formaban parte de la trama. Juntos proyectaban una imagen de tanta sinceridad que era casi imposible no creerles. Sasuke esbozo una pequeña sonrisa mientras miraba por la ventana. Probablemente no era la primera vez que lo hacían..."¡pero esta vez iba a fracasar!", se prometió "¡esta vez, no!".
Asqueado por sus propios pensamientos, Sasuke se alejó de la ventana y se dejo caer en la cama ¿sería posible que Naruto y Yukito formaran parte de un plan tan despreciable? A pesar de que debía admitir que esto era muy probable, todos sus instintos le gritaban que era imposible. Sin embargo, no había nada que el pudiese hacer antes de recibir la respuesta de Neji. No le sería de ninguna utilidad continuar interrogando a los criados y era evidente que Naruto no cometería ningún error.
Ya era muy tarde cuando finalmente se durmió y aunque por un momento había considerado la posibilidad de ir a buscarlo para perderse en los placeres de su cuerpo, había abandonado la idea de inmediato. En esos momentos sentía muchos más deseos de estrangularlo que de hacerle el amor.
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Naruto sintió una gran confusión al ver que Sasuke no se hacía presente en sus aposentos. Por un lado se sintió aliviado pero por el otro...su cuerpo deseaba que él viniera y lo tomara.
Después de unos momentos, logró concentrarse en la necesidad que tenía de su dote, y se durmió planeando la conversación que tendría con él a la mañana siguiente.
Naruto pudo haber sido capaz de controlar sus pensamientos conscientes, pero no tenía ningún poder sobre su subconsciente, y sus sueños se llenaron se imágenes de lo ocurrido con Sasuke en el Bosque. Por la mañana despertó con el recuerdo de su boca sobre la de él y de sus fuertes brazos estrechándolo contra su cuerpo...y con una dura erección que lo hizo avergonzar.
Mientras se vestía, Naruto decidió que era fundamental que hablase con respecto a la dote. Cuanto más lo pensaba, más confundido se sentía. ¿estaba realmente enamorado de un hombre sin palabra?¿era Sasuke tan deshonesto como parecía?. Parecí que su esposo tenía muchos rostros y Naruto deseaba descubrir cual de ellos era el verdadero. La dote era lo único que revelaría al verdadero Sasuke...si pagaba según lo prometido. "¡Voilá! Eso probará que es un hombre honesto. Pero si no lo hacía...¡eso significaría la comprobación de que se trataba de un canalla!"
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NO ENGAÑES A MI CORAZÓN
FanfictionEl anciano Jiraiya Namikaze está al tope de deudas a causa de sus vicios (o sea, alcohol,mujeres y juegos). Decide que para salvar la mansión y salvar el futuro de su nieto Naruto, decide casarlo con Sasuke Uchiha, a quien conoce en una de sus reuni...