NO ENGAÑES A MI CORAZÓN

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S&N

Para Naruto, el beso fue igualmente de devastador. Lucho con impotencia para contener el deseo que crecía en su interior, pero todo fue inútil. De forma inconsciente, le devolvía el beso y se estrechó con fuerza contra su cuerpo. Sin embargo, la realidad de lo que estaba haciendo irrumpió de pronto en su mente y se apartó de él con un sollozo ahogado.

-¡Usted no me tocará , monsieur!-exclamó con la respiración agitada-¡lo prometió!¡si vuelve a tocarme le aseguro que se arrepentirá!

-¡Pequeño zorro!-dijo mientras lo observaba con dureza mientras desaparecía la pasión de su cuerpo-¿seducirme también es parte de tu plan?¿se supone que debo caer de rodillas para obtener tu pequeño cuerpo dorado?¿ese es tu próximo paso?

-¡Usted está loco!-respondió con furia y confusión-¡no se de que me está hablando, monsieur!

-¿Por que será que me cuesta creer eso?-dijo soltando una risita; sus ojos negros lo recorrieron con desprecio-Tu sabías muy bien lo que hacías al responder a mi beso. Pero ten cuidado con esos trucos, dulzura; la próxima vez podemos no estar en un sitio público y entonces no te permitiré retirar lo que ofrecías con tanta generosidad.

Naruto se sentía estallar de indignación.

-¡Usted me llevará a Le Petit de vuelta ahora mismo, monsieur!¡no quiero permanecer aquí ni deseo los deseos que usted ha comprado!

-No-dijo con dureza-Eres mi esposo ¿recuerdas? Y como tal, debes vestirte de forma apropiada.

-¡Ahhhh!¿Le importa tanto lo que piense la gente?-dijo alzando la cabeza con orgullo.

-No-dijo esbozando una sonrisa-a mi no me importa nada...pero creo que a tí si.

-¿A que se refiere?-preguntó con el ceño fruncido.

-A que esperas sacar provecho de tu aspecto-dijo alzando los hombros. Entonces agregó con voz de acero-Pero no lo harás. querido. Te probarás los vestidos que el señor Hayate tiene listos y escogeremos algunos más-Naruto abrió la boca para protestar, pero la mirada de Sasuke lo detuvo-Y si no cooperas-terminó con brutalidad-te llevaré al probador y te desnudaré yo mismo.

Naruto tragó saliva. "Mon Dieu, sería capaz de hacerlo", pensó con impotencia.

-Muy bien, monsieur, lo haré-dijo reconociendo su derrota-si usted desea calmar su conciencia de este modo...no es problema mio. Pero n o admitiré que se descuente de mi dote.

-Creo que tenemos que esperar a ver que ocurre¿no te parece?

Naruto hubiera querido continuar con la discusión y hallar defectos en todo lo que había hecho el señor Hayate. Desgraciadamente no pudo hacerlo; el trabajo era exquisito y como buen doncel apreciaba esas hermosas prendas. Varias piezas de ropa interior adornadas con encaje fueron exhibidos ante su presencia. Mikoto había encargado solo dos vestidos de baile, uno de ellos de seda color bronce que parecía propio de una reina y otro de un hermoso raso verde que intensificaba el color de sus ojos. También había unos cuantos vestidos de uso diario y el señor Hayate le aseguró que seis de ellos estarían listos al día siguiente. El de seda color bronce solo necesitaba un pequeño ajuste y también sería enviado con aquello. Mirando el de raso verde, el señor Hayate le informó con pesar.

-Me temo que necesitaré unos días más para este.¿Le parece bien que se lo pruebe el miercoles?

Naruto no respondió ya que estaba como embelesado mirando las hermosas prendas que se exhibían frente a sus ojos y Sasuke lo hizo por él.

-Creo que estará bien.

Naruto trató de resistir la atracción que ejercía sobre él esas ropas exquisitas, pero en definitiva era humano.Casi atontado de placer, solo pudo asentir con la cabeza ante los encajes y puntillas que el señor Hayate le recomendaba para dar los últimos toques a los vestidos. Se discutió el tema de los zapatos y el costurero tomó la medida de sus pies para encargar varios pares. El placer se desvaneció cuando se vió forzado a probarse los vestidos y lucirlos frente a Sasuke. La presencia de Yukito lo ayudó un poco ya que el niño se mostró casi tan entusiasmado como él ante el vestido color bronce.

-¡Oh, maman!-exclamó embelesado-Eres muy hermoso ¿verdad papá?

Sin dejar de mirarlo con una expresión muy peculiar, Sasuke respondió:

-Sí, lo es. Increíblemente hermoso.

No estaba haciendo un cumplido; Naruto se veía increíblemente hermoso de pie frente a ellos. El escote profundo dejaba ver sus hombros seductores mientras que el color bronce de la tela hacía que su cabellera pareciera una cascada de miel. Al mirarlo, sintió que se le aceleraba la respiración, pero más allá de eso sintió un fuerte dolor en el corazón. Era tan encantador y él lo deseaba con desesperación...a pesar de todo.

Naruto era la imagen de la felicidad mientras acariciaba el vestido con reverencia y al notar su expresión, Sasuke se sintió por la ternura. Él le compraría cientos de vestidos con tal de que jamas se borrase esa expresión en su rostro, prometió...