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Yui

Cuando Kanato dejo de beber mi sangre quitó sus colmillos bruscamente provocando que sienta un dolor insoportable. Llevé ambas manos a mi cuello apretando cubriendo los orificios tratando de aliviar el dolor.

Kanato me ha mordido como nunca antes lo había hecho... Fue demasiado brusco, indiferente.

Habían cambiado su forma de tratarme los Sakamaki y eso me dolía bastante tanto físicamente como sentimentalmente.

Dolía saber que ya no les importaba, que ahora solo les importaba aquella chica que apareció de la nada esa noche.
Le prestan más atención a ella, la cuidan, la tratan con cuidado, muestran interés. Incluso tal vez más que cuando llegué por primera vez a la mansión.
Y dolía saber eso.

Mis piernas fallaron y caí al piso sin cuidado alguno. Sentí el frío mármol en mis piernas, lágrimas empezaron a caer por mis mejillas.

Me sentía asfixiada, sin escapatoria.

¡Me sentía inservible!

¡Me sentía alguien de más desde que ella llegó!

Odio esto.

¿Y si ella era la nueva "Eva"?

No. No. El señor Sakamaki dijo que era yo. No podrían arrebatarme mi lugar, ¿Verdad? Es decir, tengo la sangre de Eva.

Todavía no soy tan inservible...

¡Basta, Yui! Deja de atormentarte con estos pensamientos.

Sequé mis lágrimas y negué energética tratando de dispersar esos pensamientos.

Me levanté lentamente y suspiré para luego sonreír y hacer como si nada para continuar con el pastel de Kanato.

(...)

Yui: Ka-Kanato-kun... -dije acercándome lentamente a la sala con el pastel en manos- T-Terminé.

Kanato levantó su vista para mirarme indiferente y me señaló con los ojos la mesa indicando que deje el pastel allí.

Hice caso y deje lentamente el pastel para luego cortar un pedazo del pastel y servirlo en un plato para que este lo comiese.

Me quedé parada esperando que lo pruebe y cuando llevó el tenedor a su boca pude ver un gesto que nunca creí ver.

Kanato: Yo también lo creo, Teddy... -dirigió su mirada fría hacia mi persona- Esto es horrible. Igual que ella. Creo que Sakura podría haberlo hecho mejor.

Agarró su plato y lo tiró al suelo rompiendo el plato y que el pastel manche el piso.

Se levantó y agarró su oso dejando la sala y a mí algo impactada por sus palabras y acciones.

Me dolía.

Me dolía demasiado.

Ahora si podría asegurar que era una inservible.

Me largué a llorar mientras recogía los pedazos rotos del plato provocando que uno me cortase.

Miré la herida y como de esta brotaba sangre; seguía mirándola mientras lágrimas seguían cayendo largandome en llanto.

- Me encanta verte sufrir, ese gesto en tu rostro es tan placentero. Ver tu desesperación y dolor. -Sonrió con malicia- Pides a gritos que te maten.

Kanato largó una carcajada que me hizo dar un escalofrío por todo mi cuerpo y se acercó rápidamente clavando sus colmillos de nuevo en mí.

Esto era demasiado...

Pude notar como a poco me sentía mareada y se cerraban mis ojos.

(...)

Abrí los ojos encontrándome en el mismo sitio donde estaba.

Me senté algo aturdida ¿No me... No me habían levantado?

¿Me habían visto siquiera?

Todo estaba en su sitio. Limpié y ordené el desastre que hizo Kanato y cuando salí de la cocina pude ver a Shuu en el sillón y Ayato en otro.

¿Estaban ahí y ni siquiera se habían preocupado por mí?

Es todo. Subí las escaleras y caminé por el pasillo algo apresurada y sumida en mis pensamientos.

No podía soportar más esto, sentirme un estorbo.

Y mucho menos que ellos no me traten como antes con atención y delicadeza.

Me dolía, porque todos ellos de alguna manera me agradaban o sentía algo por ellos de algún modo u otro...

No lo entendía bien, no entiendo bien que siento por ellos. Desde que ella llegó desordeno y sacó sentimientos en mi que nunca había sentido.

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Bai baiii

La "rival" de Yui || Diabólik lovers X OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora