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Sakura

Shin: Hace una semana era un Omega  y luego de un día  para otro tuve mi transformación  y ¡Bum! Soy el Beta de la manada Khal. Increíble, ¿No lo crees?

Sakura: ¡SÍ! ¡Por dios, Shin Takanumi! ¡Es la mejor noticia! ¿Por que no me lo dijiste antes? Pelirrojo maldi-

Shin: ¡Oye! Hace mucho no te aparecias y además  -me olfateo- hay algo diferente en ti. Tus ojos estan algo más  oscuros y hueles distinto.

Sakura: -suspiré  y me desplome en la mesa tratando de evitar el tema- no puedo creer que no me haya dado cuenta antes, es decir, ¡Soy un maldito zorro! Debi darme cuenta  mucho antes...

Shin: Si te hace sentir mejor... La escencia  de los Omega  no es tan fuerte como la de los Beta. -me sonrió-.

Que guapo estaba.

Sakura: Estas más  bueno. -confesé  sin pudor- ¿La transformación  te hizo algo? Te veo más  musculoso y hueles bien.

Shin sonrió  de costado levantando sus hombros.

Yo por mi parte suspiré.

Shin: Bueno, creo que es hora de irme... ¡Nos vemos mañana! -me saludó  con un beso en la mejilla y se fue-.

Sostuve mi cabeza entre mis manos mirando por donde el pelirrojo se fue.

Reiji: Sabes que eres su mate. ¿Verdad?

Me volteé para ver a este a mis espaldas mirandome serio.

Sakura: ¿Qué? ¡No! Deja de molestar Reiji -me levanté  dispuesta a irme- me i-

Mi cuerpo  impactó  contra la pared.

Reiji: No vas a ningun lado hasta que respondas.

Mis muñecas estabas sujetas por este impidiendome la escapatoria.

Laito: ¿Qué  haces con mi sombrero? -miré  por sobre  el hombro del azabache viendo al dueño de la pregunta-.

Shuu: ¿Y con uno de mis auriculares?

Reiji: Y mis guantes.

Kanato: Y mi chaqueta.

Subaru: Y mi corbata.

Ayato: Y encima de todo andas con ese pijama que te hace ver tan jodidamente irresistible y con el olor de tu sangre no creo controlarme  mucho.

Tragué  duro.

Kanato: Muero de ganas por probar tu sangre... Ser el primero en clavartelos. -su sonrisa me dio un escalofrío-.

Sakura: Oigan... Tranquilos... Puedo cambiarme si gust-

Shuu: Cállate, Eva. Eres nuestra ahora.

Reiji: Mereces un castigo por andar así  delante nuestra, provocarnos.

Kanato: Y estar con ese maldito perro. -escupió con odio-.

Laito: Moo~ ya me estoy imaginando mil maneras de castigarte -gimió-.

Ayato: Cuanta  arrogancia estas teniendo.

Sakura: Dejenme -forcejeé ante Reiji- salir. -fue inútil-.

Subaru: Tch. Cállate.

Ahogué  un grito cuando sentí  unos colmillos clavarse en mi cuello. Reiji.

Kanato: ¡Oye! -Kanato ocupó  el otro lado de mi cuello-.

No, por favor no. Sentí  sus colmillos en mi carne.

Ayato: ¡Ore-sama reclama su presa! -Tomó una de mis muñecas-.

¡Duele!

Sentí otros colmillos en mi pierna, muy cerca de mis muslos. Pude ver una cabellera rubia.

Por favor, basta.

Laito: -rió juguetón- No quiero quedarme detras de este exquisito banquete.

Tomó una de mis piernas y enterró  sus colmillos.

Mi pesadilla... Se esta vol-

¡Auch! Me quejé  al sentir un dolor punzante en mi muñeca.  Subaru.

Me sentía... algo débil, pero era bastante satisfactorio  esto.

Si bien me sentía  y estaba como una presa ej este momento, lo disfrutaba. ¡Mierda! ¡Sí!

Sentía cierto placer al sentie los colmillos de todos los hermanos en mi y que me deseen con tantas ansias.

Me sorprendí  cuando senti unas manos en mi pecho, cintura y nalgas.

¿Quién? ¡¿Quién  me estaba tocando?! ¡No podia ver!
Me avergonzaba decir que disfrutaba  del tacto pero la curiosidad  me estaba matando y al estar inmóvil  no podia ver de quien eran esas manos que estaban tocando mi cuerpo.

Sakura: Chi-Chicos...- jadee y ellos enterraron con más fuerza sus colmillos- Debo descansar... Ma-mañana hay clases.

Pude escuchar como algunos hicieron sonidos en forma de queja y otros me apretaban aun más  contra la pared dándome  a entender que no les importaba y que me callara.
Cerré  los ojos, esperando a que terminaran.

♤♤♤

Hola y adiós 

La "rival" de Yui || Diabólik lovers X OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora