La "rival" de Yui || Diabólik lovers X Oc

17

Sakura

Sakura: Bien..., adiós. -me despedí con la mano saliendo de la gran mansión de Shin.-.

Este asintió y levantó su mano hasta la altura de sus hombros para moverlas sutilmente.

Le sonreí y di media vuelta caminando hacia la mansión "Sakamaki".

Suspiré recordando a estos 6. Esos si que me sacan de quicio.

Mientras caminaba por las oscuras y solitarias calles de la noche recordé cuando estaba con Shin, practicando.

Se lo tomaba en serio, actuaba con seriedad y en algún que otro momento reí ante el nerviosismo de este al tener que decir cosas tan vergonzosas o tener que acercarse demasiado hacia mi persona. Me pregunto cómo reaccionará al final; En el final, los personajes se besan entre sí, es un beso de despedida pero con todo el sentimiento de amor y dolor del mundo.

Shin era algo serio en todo lo que hacía pero también era tímido y divertido. Me agradaba, demasiado.

Me gusta estar con él, puedes estar en silencioso con él sin sentirte incómoda ni nada por el estilo. Te da una tranquilidad y seguridad, realmente amaba estar con él.

Sacudí mi cabeza ante esos pensamientos.

Bufé algo agotada.

Estaba  tan cansada de todo esto. Solo quería terminar con Eva y Adán y  largarme de una vez por todas.

Miré mis pies, viendo como avanzaban por el cemento de las calles. Dirigí mi mirada alrededor.

Todo estaba tan vacío, no había ni un alma, pájaro, animal. Nada.

Ni la luna se veía ya que estaba opacada por las nubes.

En las calles habían grandes árboles, salvo  en la carretera, claro está.

Lo único que iluminaban las calles y a mí eran unos pequeños faroles de luz cálida. Daba un aspecto algo sombrío, parecía que estaba dentro de una película de terror ya que todo estaba vacío, la poco a iluminación y la completa oscuridad y silencio, salvo por algunos sapos y bichos haciendo su característico ruido.

Dirigí mi mirada al frente, luego de ver por un instante luz. Y luego escuchar un ruido fuerte.

Relámpagos y truenos.

Tormenta.

Sentí una brisa mover mi ropa y pelo bruscamente.
El viento empezó a soplar fuertemente.

Bufé irritada.

Justo ahora una tormenta, ¿En serio?

Apresuré el paso ignorando los fuertes truenos y el frío que me provocaba el viento.

Parecía que venía un huracán o algo.

Luego de caminar 10' empezó a llover levemente, y luego empezó a elevar su densidad.

Perfecto.

Había empezado una fuerte tormenta, seguro iba a llegar empapada y con el pelo hecho un desastre por el fuerte viento.

Abracé mi cuerpo tratando de brindarme algo lo de calor y seguridad.

Mierda. Mierda. Mierda.

El viento estaba muy busco, podía escuchar el ruido que provocaba, ese característico ruido de telenovela.

Suspiré tratando de calmarme.

Seguramente faltaba poco para que llegase a la mansión.

Podía llegar, sacarme la ropa mojada, bañarme y meterme en las calientes sábanas. Sí. Sí.

Eso me daba ánimos para llegar lo más pronto posible.

Miré con determinación y una mueca en mi rostro y dispuse a acelerar el paso, aun más. Sin importar la gran cantidad de lluvia que caía en mí.

(...)

Al divisar la mansión corrí, tropezandome con el pequeño charco de barro que se había hecho.

Mordí mis labios irritada.

Perfecto, lo que me faltaba.

Me levanté algo torpe y seguí corriendo sin importar las pintas que seguro tenia en estos momentos.

Al acercarme a la puerta pude ver a Reiji con la mirada fija en mí.

Bueno pues... su cara no traía nafa bueno.

Tragué duro y seguí caminando.

Cuando estuve cerca lo miré, aun no llegaba a la puerta, el seguía allí y yo bajo la lluvia. Tenia que subir las escaleras para estar a salvo de la lluvia.

Sakura: ¡Ho-hola, Reiji! -saludé nerviosa, puesto que había llegado 15' tarde -Bonita tormenta, ¿No? -sonreí de lado, o lo que pude.-.

Este me miró con desaprobación.

Escuché un fuerte ruido a mi espalda, haciéndome pegar un grito en mi lugar acompañado de un pequeño salto. Realmente me había asustado.

Reiji: Entra. -ordenó severo.- Antes de un rayo te mate.

Asentí débil y subí las escaleras, para luego no sentir más las gotas cayendo en mi cuerpo.

Reiji: Estas toda un asco. No eres para nada una dama. -me miró con desagrado y luego cerró la puerta de la mansión. Yo opté por quedarme en mi lugar algo apenada- y por sobre todo, llegas tarde y herida.

Miré la rodilla, la cual estaba sangrando.

Subaru: Y con un horrible olor. -chasqueo la lengua-.

Laito: Nos has preocupado, Zorrita-chan~ -soltó de la nada, provocando que girase al verlo-.

¿Cuando habían aparecido estos dos?

Shuu apareció con un botiquín de primeros auxilios.

Lo miré confundida y luego no sentí mis piernas. Alguien me había cargado.

Miré al responsable. Ayato.

Ayato: Mira lo que le haces hacer a Ore-sama -soltó con arrogancia pero pude notar algo de preocupación en su voz-.

Me sentó en el sillón, para luego que Shuu abriera el botiquín para limpiarme la herida.

Miré confundida al repentino cambio de humor y/o acciones de los hermanos.

Kanato: Estas muy mojada, Sakura-chan... -Comentó Kanato viéndome desde una esquina, apretó a Teddy para luego dirigirme una mirada divertida- Y se te trasluce todo.

Soltó al final con una risita.

Miré confundida a este para luego ver mi cuerpo. Efectivamente. Se podía ver mi corpiño color crema.
La camisa estaba pegada a mi cuerpo, dejando ver todo mi torso húmedo.

Corrí mi mirada avergonzada.

Vi a Reiji entrar con una bandeja la cual tenía té.

Reiji: Cuando terminemos contigo ve a darte una ducha con agua caliente.

Subaru: Serás una molestia si te enfermas.

Miré a todos asombrada. Por alguna extraña razón, me gustaba que fueran así conmigo.

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Hoy está un poco más largo el cap porque quería hacerlo algo... ¿Especial? En fin.

Actualizaré ahora solo los sábados y domingos debido a que empiezo las clases. Algún que otro día publicaré pero más que nada esos dos días.

Bye byee