Libro De One-shots (Sesshome Y Otras Parejas)

Buscando una novia para... (6)

La quinta vez en la semana que visitaba el restaurante y apenas era  martes. Siempre solo. Ordenaba un pedazo de pizza con jugo natural, preguntaba por la chica llamada Kagome alegando que había algo mal con la comida o la bebida. Higurashi era llamada por la camarera, debía salir y ver su cara de amargado, su sonrisa arrogante. Le pedía que tomara asiento con él. Ella, evitando un espectáculo (aunque de nada servía), se tomaba unos segundos para acompañarle. Sesshomaru preguntaba cosas referentes a su vida y ella se limitaba a contestar, sin disimular su descontento. Podría matarlo con la mirada. Terminaban discutiendo al final. No lo soportaba, sobretodo porque le intrigaba tanto entender su proceder, saber el por qué de su obstinación.

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El miércoles, Kagome observa la puerta, suspira por quinta vez, dirige sus ojos café al reloj, es tarde. Frunce el ceño, su abuelo ha estado observándola y riendo.

-¿Qué?- pregunta.

-Quizás se retrasó querida- sonríe el abuelo.

-No...- se sonroja -No es lo que crees...

-¡¿Ya llegó el novio de mi hermana?!- pregunta Souta saliendo de la cocina para sentarse al lado de la caja registradora, ha sido un día algo lento en las ventas y sólo tenían seis clientes en la pizzeria.

-Todavía no y está de un humor...- comparte el anciano por lo bajo.

-¡No es mi novio!- exclama indignada.

-Claro que lo es- agrega Naomi, madre de la joven, también saliendo de la cocina -Si te viene a visitar a diario, dos veces por día- sonríe ilusionada.

-¡Les digo que no es mi novio!- grita más fuerte.

Los clientes que comían le voltearon a ver. Ella calló sonrojada.

-Aún no llegamos a eso- dicen.

Los cuatro Higurashi voltean. Frente a la registradora está Sesshomaru, más elegante que de costumbre, parecía estar listo para algún evento de etiqueta.

Kagome casi pierde el aliento al verlo, se obligó a concentrarse y ponerse a trabajar mientras su abuelo, hermano menor y mamá cuchichean tras ella y ríen cómplices.

-Bienvenido a Higurashi's pizza- dice con aburrimiento -¿Qué va a ordenar?

-A ti- contesta muy campante.

Los clientes que disimulaban estar chismeando escupieron sus sodas. Algunos iban allí sólo por ver la pelea diaria entre el sujeto y la chica de la pizzeria. Ya hasta habían apuestas.
Los familiares de Kagome terminaron con la quijada en el suelo.
Inuyasha y sus amigos se pegaron más al vidrio del establecimiento, se habían enterado de las visitas y les gustaba ir para... bueno... la vida de Taisho y Spider eran sus telenovelas pero, estaban allí por otra razón...

-¡¿Qué que?!- se impacta.

-Quiero que vengas conmigo a una celebración de la empresa, soy el único sin pareja

-¿Por qué no se lo pides a una mujer más a tu altura?- se cruza de brazos sonriente. Ni en un millón de años se imaginaría semejante situación.

-No tengo tiempo- arremete -Deberé conformarme contigo

-¡Eres un majadero!, ¿Así quieres que te ayude?- el aura de muerte alrededor de la joven daba terror.

Los Higurashi dieron varios pasos atrás aterrados, los clientes arrastraron las sillas y mesas lejos, hasta la bola de tarados se despegaron del vidrio.

-Te daré lo que quieras- propone acercándose a ella clavandole esos seductores ojos dorados -Sólo serán un par de horas, saludas, sonríes y ya