Una noche mas, levantarse buscar una víctima, alimentarse y volver a su departamento, así durante los últimos 400 años.
-Como han cambiado las cosas antes vivíamos en los mas elegantes castillos, alejados de toda la gente -pensaba mientras tomaba su abrigo su bufanda y salia a caminar.
-No teníamos porque buscar la comida ella llegaba sola, ya fuera que se perdieran o intentaran demostrar su valentía entrando en nuestros dominios - Shun giro sin siquiera notar donde estaba.
Camino sin un rumbo fijo, desde los últimos treinta años, la noche no se diferenciaba mucho del día pues había gente a toda hora y muchos negocios ahora abrían toda la noche.
-Durante todos estos años he perdido tanta gente, mis parejas han sido tanto vampiros como humanos, tanto hombres como mujeres, he conocido de todo - la nostalgia nublo su vista por un momento, sus parejas habían sido cazados hacía mucho o muerto.
Si bien sabia que no era el ultimo vampiro no se había encontrado con ninguno en los últimos cien años.
- Que le voy a servir amigo -
El peliverde alzo la vista viendo al barman frente a el.
- Un Bloody Mary por favor - en que momento había entrado a aquel lugar no lo supo pero algo era seguro, alguien lo había atraído justo ahí .
Aquel era un hombre rubio de ojos azules.
- Es muy atractivo - pensó - pero no quiero tener una pareja que solo dure 60 años eso es muy poco-
- Aquí tiene -
- Gracias, Shaka- dijo el peliverde mirando su nombre en el chaleco del barman.
- Estoy a su servicio - dijo el rubio y siguió preparando bebidas.
Shun bebió sintiendo el calor en su garganta, era una bebida interesante, picante y caliente -Ya ni siquiera puedo asustarlos, hemos pasado a ser un mito nadie cree que existimos -
-Incluso nos imitan, odio a esos falsos vampiros que se modifican la dentadura visten de negro y pretenden beber sangre por gusto- recibió por respuesta.
-Es cierto y mas que admiración parece una burla .... Espera ¿quien eres? -dijo al darse cuenta que no había escuchado voz alguna.
Levanto la vista, pero no parecía haber nadie cerca y los poco que habían estaban ocupados en sus propios asuntos.
- Estoy en la mesa del fondo, trae tu Bloody Mary me gustaría un poco de compañía para variar -
-Telepatía, es un vampiro- aquel pensamiento lo hizo feliz, una ventaja era que ya no eran cazados como antes (a excepción de los descendientes de los cazadores de vampiros aunque ya eran muy pocos y escapar era cada vez mas fácil) si encontraba una pareja ahora, podía pasar siglos de felicidad incluso porque no, la eternidad.
Se acerco emocionado podía sentir el deseo del otro vampiro comenzar a emanar desde que el se giro para ir hacia su mesa.
Los ojos azules del otro vampiro adquirieron un color purpura para mostrar su naturaleza, Shun entonces mostró los suyos en un tono magenta.
-Shun, segunda generación de la dinastía Ardelean -
- Hyoga, cuarta generación de la dinastía Balan -
Comenzaron a charlar, ambos eran rumanos y Shun era sesenta años mayor que Hyoga, pues a diferencia de Shun quien era descendiente de vampiros, el rubio había sido transformado.
- ¿Quieres que busquemos algo para cenar? -
- Pues tengo hambre pero no estoy de humor para cazar -
- Ven conmigo, no tendrás que cazar te lo aseguro -
Salieron de aquel bar y el rubio lo llevo a un hospital.
- ¿Que hacemos aquí? -
-Espera un poco -
El rubio camino y se encontró con un tipo que parecía ser un enfermero cruzaron palabras luego de unos minutos le entrego un envase plástico grande y bastante sospechoso, mientras el rubio le entregaba un fajo de billetes.
- Listo ahora sigueme, no falta mucho para que amanezca tengo un cuarto muy cerca de aquí -
Ambos llegaron al departamento, el rubio lo llevo al sótano y abrió el envase que llevaba para así mostrarle el contenido.
Era sangre fresca, Shun sonrió ahora que ya no gustaba de buscar presas ese era un modo practico.
- Excelente comida para llevar jajaja -
-Todo cambia Shun y esta es la manera de obtener sangre de calidad sin el riesgo de contraer alguna enfermedad-
-Tienes razón no sabes con que te puedes encontrar, aunque yo no cazaba humanos desde hace cincuenta años-
Ambos bebían a sorbos y la compartían, en un momento a Shun se le derramo un poco por la comisura de la boca, esto fue aprovechado rápidamente por Hyoga que lamió su boca para beberla.
Shun se abrazo a el evitando que se separara y entonces el rubio comenzó a besarlo con mayor intensidad, estaban excitados y ambos querían follar.
Hyoga le rasgo la camisa y le dejo caer sangre en el pecho, le paso dos dedos y se los dio a chupar, mientras el lamia la sangre restante.
- Ahhh - El peliverde podía percibir lo que Hyoga quería y lo deseaba tanto o incluso mas que el.
- Follame hasta hacerme sangrar-
Hyoga sonrió, luego de beberse mutuamente la sangre lo follo tan fuerte que de haber sido humano habría muerto.
Llenos de sangre ambos vampiros quedaron exhaustos entre las sabanas y justo a tiempo para el amanecer, pasaron el día durmiendo entre las sabanas manchadas.
Nuevamente llego la noche Shun se levantó mientras el rubio seguía durmiendo.
Pudo observarlo cuidadosamente y noto que aquel hermoso ser estaba cansado de estar solo.
Se levanto cuidando de no hacer ruido, sin embargo al menor movimiento el rubio despertó.
- ¿Anochecio tan pronto? Espera a donde vas - dijo colocándose sus jeans.
- Debo irme - dijo en realidad esperando ser detenido.
-Shun mira somos muy pocos y por el bien de nuestra especie debemos perpetuarla -
- Hyoga ambos somos hombres- dijo Shun con un toque de ironía.
-Podríamos al menos intentarlo- dijo riendo.
-Es el peor pretexto que he oído para llevarme a la cama pero es original, ahora ¿quieres que tengamos sexo hasta lograrme hacer concebir? - dijo también riendo.
- Claro que si - dijo riendo mostrando una vez mas esos sexys colmillos.
Ahora la eternidad resultaría poco para amarse tanto como ellos deseaban.

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Un domingo cualquiera
Tiểu Thuyết ChungUna recopilación de Shots que incluye a muchos personajes de Saint Seiya pero cuyos protagonistas principales son Hyoga y Shun en todos ellos.