Shun había convencido a Hyoga de conseguir un trabajo para los fines de semana, el rubio acepto lo que no esperaba es que a su encantador novio se le ocurriera un salón de eventos infantiles.
Ahí estaba el rubio mirando aquel gran salón habían diez mesas y un área de juegos con alberca de pelotas, resbaladillas puentes colgantes entre otros.
No estaba nada mal el lugar, solo necesitaba saber como seria su primer día de trabajo y de que seria su empleo.
Pasaron solo seis meses cuando el rubio estaba por reventar para empezar el uniforme era muy incomodo mientras Shun solía ser animador usando un lindo short beige y una camiseta blanca, el tenia que estar debajo de la botarga para amenizar el evento.
- Basta Shun renuncio este trabajo no es para mi, no soporto a esos mocosos malcriados -
- Hyoga por favor sera la última vez que lo uses, sabes que el señor Aldebaran prometió que te movera a otra área el próximo fin de semana -
- Shun no soporto el calor y sabes que los niños me odian, recuerdas al pequeño demonio del mes pasado que me arrojo polvo pica pica, o cuando los niños se arrojaron sobre mi casi aplastándome -
- Ay amor solo esta vez, hazlo por mi - lo miro con esa dulzura que vencía la resistencia del rubio.
- Esta bien - dijo solo esta vez pero deberás compensarlo, por cierto sera como yo quiera y donde yo quiera.
- Como digas ahora vamos, hay muchos niños a los que debemos hacer felices -
El rubio se coloco la cabeza de lo que esta vez parecía ser un perro y salio con el.
De nuevo Shun era la estrella tenia un ángel especial para los pequeños lo seguían y jugaban con el y aquellos que pasaban los diez años solo buscaban sacar de quicio al rubio pero por suerte seria la última vez.
El siguiente fin de semana Hyoga fue colocado en el área de juegos vigilando a los niños eso era mas tranquilo para el.
- Hola disculpa mi hermanito perdió un juguete ahí adentro podrías ayudarme a buscarlo -
- Claro si quieres entrare yo y cuando lo encuentre lo llevo a tu mesa -
- Gracias eso seria muy amable -
Si, ese puesto era mejor ya que recibía las miradas de las hermanas mayores o madres de aquellos chicos y además si alguno le hacia alguna grosería era reprendido de inmediato, eso era tan placentero para el, quien antes se debía callar su molestia.
Shun lo miraba con frecuencia y siempre era igual el rubio con su sonrisa por las atenciones de cuanta chica lo miraba.
Pero su puesto no era fijo si bien vigilaba los juegos, atendía las mesas, daba la bienvenida o ayudaba a Shun con los juegos, la botarga seguía ahí pero era usada por los empleados nuevos.
La pareja estaba feliz ahora pero no dejaba de ser rutinario trabajar ahí por lo menos para Hyoga que siempre estaba inquieto, pensó que debía hacer algo para salir de la rutina.
Ese sábado habría un evento exclusivo por lo que solo los habían solicitado a ellos para el servicio, los niños resultaron ser mas insoportables de lo normal pero como solo serian cuatro horas ellos se encargarían de la limpieza del lugar y del cierre del mismo.
En cuanto se fueron todos los invitados, Shun se fue al área de alimentos mientras Hyoga se fue a los juegos.
Cada uno limpiaba su área, cuando el peliverde termino fue en búsqueda del rubio.
- ¿Hyoga, donde estas? -
En silencio avanzo buscando al rubio que no había aparecido por ningún lado, como ya había recorrido todo el lugar, lo que se le ocurrió como ultimo recurso fue buscar dentro de los juegos, el peliverde se asomo a la orilla en la alberca de pelotas cuando le pareció ver algo brillante entre ellas, se agacho mas para ver mejor cuando sintió un jalón.
- Ahhh - grito cuando ya estaba inmerso en la alberca de pelotas, y entonces el rubio salio de ahí.
-Esto no es gracioso Hyoga el lugar debió cerrar hace mas de veinte minutos -
- Bueno después de soportar a esos niños, estoy de humor para jugar un poco además dijiste que me compensarías, ¿O acaso no lo recuerdas? -
-Pero no pensé que querrías algo en este lugar -
Por debajo de aquel mar de pelotas pudo sentir la mano del rubio que comenzaba a desabrochar su short mientras la otra recorría desde su pierna hasta su pezón .
- Humn Hyoga alto, si Aldebaran se entera nos va a ir muy mal - la voz entrecortada del peliverde no le daba mucha credibilidad así que el rubio no se detuvo.
-Descuida no tendría por que enterarse, solo estamos tu y yo -
la voz del rubio era incitante podía sentir su boca rozando su oreja para después lamerle el cuello, esas cosquillas lo hicieron ceder ante las peticiones de Hyoga.Comenzaron a "sumergirse" solo se escuchaba el sonido de sus movimientos y las pelotas que caían fuera de la alberca, así como los jadeos del rubio, Shun daba besos desde el cuello hasta los hombros de Hyoga mientras se aferraba a su espalda.
- Es la primera vez que me divierto aquí - dijo en una voz grave y sensual el rubio.
Esto hizo sonreír a Shun - No te lo había dicho pero siempre quise intentar algo así -
-Que sorpresa, no pensé que hacerlo en este sitio hubiera pasado por tu mente - le dijo el rubio al oido sin detenerse ni un instante.
Ambos se siguieron acariciando y después de unas embestidas mas ambos se corrieron.
Hyoga fue el primero en salir, se acomodo la ropa y le extendió la mano a Shun que salia con precaución.
- La próxima ves podríamos intentar en algún otro lugar -Le dijo el rubio sonriendo.
- Mi amor hay un problema- le dijo Shun señalando una zona donde se notaba claramente una enorme mancha de semen
- Demonios - pensó Hyoga pero no tuvo tiempo de reaccionar pues....
De pronto la puerta se abrió mostrando a un muy molesto Aldebaran
-¿Con que quedándose tiempo extra? - dijo el robusto hombre señalando la cámara que daba directo a la alberca de pelotas y haciendo que los muchachos se avergonzaran de inmediato.
- Pues lo consiguieron, no se irán de aquí hasta que cada pelota quede limpia, recuerden que este es un sitio infantil ¿entendido Hyoga? -
- Entendido -dijo el rubio desviando la mirada mientras el peliverde lo miraba enfadado.
Ambos salieron hasta muy tarde después de aquella ocasión no les quedaron ganas de volver a jugar en la alberca de pelotas.
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Un domingo cualquiera
Ficción GeneralUna recopilación de Shots que incluye a muchos personajes de Saint Seiya pero cuyos protagonistas principales son Hyoga y Shun en todos ellos.