Un domingo cualquiera

Sex Shop

Me encontraba buscando un trabajo de medio tiempo para costear mis gastos en la universidad.

Mientras lo hacia encontré una Sex shop sentí curiosidad y entre, lo que ahí había no era en realidad gran cosa, a donde veía solo encontraba penes de todas presentaciones y texturas.

Lo que llamo mi atención fue el encargado, un chico de blanca piel y cabello verde que miro en mi dirección .

-Hola, tenemos lencería comestible, vibradores, disfraces, dulces, juegos  eróticos, cabinas, si buscas algo mas especifico dime y lo puedo buscar -

- Eh  en realidad solo estoy viendo, gracias -

El chico sonrió, se veía tan adorable que parecía no encajar ahí estaba vestido con una camisa sin mangas negra y un pantalón de mezclilla ceñido.

No supe cuanto pero pase un rato mirándolo de reojo mientras simulaba ver lencería femenina.

El chico tenía algo en la boca y luego me di cuenta que era una paleta, por la forma me di cuenta que era gay  y para mi mala suerte parecía que sabia que lo observaba pues al sacarlo de su boca un hilo de saliva estaba unido aquel dulce, el cual siguió chupando "distraídamente" en tanto yo comenzaba a excitarme, su lengua lo recorría en todas las formas posibles y yo empecé a sentir que me faltaba el aire.

-Shun dame tres paquetes de condones texturizados y dos de sabor tropical - un hombre peliazul en el mostrador interrumpió esa escena.

- Claro, tenemos también unos térmicos es una sensación inigualable te los recomiendo -le dijo y le guiño el ojo.

-Entonces damelos, tu eres el experto-ambos reían y esa familiaridad me hizo sentir incómodo.

Me di la vuelta deteniéndome frente a las muñecas inflables sin darme cuenta.

El chico me miro y con una sonrisa traviesa y un poco burlona comentó

- Vamos si feo no eres, tan mala suerte tienes con las chicas-

- De hecho soy popular - dije avanzando a otra area de la tienda -aunque no me gustan las mujeres -

- Entiendo - sugestivamente hizo como que acomodaba unos estantes rozando ese firme trasero contra mi -
si no sabes como funciona algún juguete avisame y te lo puedo mostrar -

Sin pensar lo detuve del brazo y le dije al oído - Quiero mostrarte como sirve mi juguete -

El sonrió y mientras se alejaba me dijo - salgo a las Seis - me guiño el ojo y volvió detrás del mostrador.

Aun faltaban unas horas así que seguí en mi busqueda, por suerte solicitaban empleados muy cerca de ahí y pude volver a tiempo, encendí un cigarro y espere verlo salir.

Lo vi cerrar llevaba una chamarra de piel, con confianza llego y me beso lo hacia como un experto sentí una textura metálica y me di cuenta que tenia un piercing en la lengua.

Entramos a su edificio, tan pronto como abrió comenzó a besarme y a quitarme la ropa.

Tenia los pezones perforados y un bóxer de piel, se dejó puestas unas doctor Martín negras y fue directo a un cajón.

Saco varios objetos y los coloco frente a mi.

-Vamos a divertirnos mucho -

Yo estaba ruborizado no entendía para que servía la mayoría de ellos.

-Acuestate - sin mas le obedecí y lo vi tomar un látigo .

Lo paso lentamente por mi cuello y mi pecho y de pronto dio un golpe.