Crush (parte 2)

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Shun se fue, los primeros días fueron muy difíciles pues llego a casa de sus padres con esa noticia ellos aun no lo asimilaban, pero finalmente era su hijo y tenía su apoyo en la decisión que tomara, (si el aborto fue una opción) Shun quería tener ese bebe y estaba ilusionado con su nacimiento.

Por otro lado en la universidad ya no se sabia de Hyoga parecía que había desaparecido por completo, eso solo ayudo a expandir el rumor de que Ikki lo había desaparecido.

Pero la verdad era otra pues aunque Hyoga amaba a Shun sabia que irse con el significaba vivir a costa de su familia pues era del conocimiento de todos que los Hino eran de clase alta.

El quería ser capaz de ofrecerles un futuro, la razón de que ya no se le viera en el campus fue por que cambio su carrera de modalidad (de sistema escolarizado a sistema abierto) para dedicarse de lleno al trabajo quería juntar dinero, cuando tuviera el suficiente iría con la cara en alto para llevárselo con el.

Tenia varios trabajos que solo le dejaban tiempo suficiente para dormir, pero no perdió contacto con Shun le pidió perdón por no estar a su lado y aunque el peliverde se negó en un principio término cediendo, además el rubio le dijo que estaría con el y su bebe una vez que tuviera algo que ofrecerles.

Luego de algunos meses a Shun ya se le notaba su pancita sentía constantes movimientos en su interior, se había hecho imágenes mentales de como seria su bebe así como su nombre, para entonces ya sabia que seria un niño.

Hyoga fue a ver a Shun cuando el ya tenia 8 meses, extrañaba mucho a su novio además quería sentir a su bebe

Hyoga llego para ver a Shun le  acaricio la pancita sintiendo como su bebe se movía, el rubio comenzó a llorar de emoción.

- Papa te ama va a luchar  por ti y por darte todo lo que mereces -decía pegando la cabeza a la pancita sintiendo las pataditas de su hijo.

Levanto la mirada y vio a Shun, su mirada era radiante y su felicidad casi palpable.

- Te he extrañado mucho, no sabes la falta que me haces- le dijo Hyoga-aqui esta el dinero para cubrir tu  hospitalización -Shun lo tomo y lo guardo.

Hyoga se acerco lo tomo por detrás y comenzó a abrazarlo abarcando su abdomen, pero tenia tanto que no lo tocaba que comenzó besar su cuello mientras lo acercaba mas a su cuerpo.

- Hyo- Hyoga, espera esto no es bueno para el bebé -

- Tienes razón debo calmarme - el rubio no esperaba aquella reacción  habían pasado cinco meses desde la ultima vez y el solo respirar su aroma lo excitaba.

-Tambien te he extrañado - le dijo Shun sonriéndole.

Ambos charlaron el resto del día haciendo planes además de hablar de la fecha tentativa del nacimiento.

Shun hablo con Ikki respecto a su  relación con el rubio y aunque el peliazul se oponía rotundamente, los cambios hormonales de Shun lo hacían alguien de cuidado a quien el mismo Ikki a veces temía.

Los padres de Shun también se enteraron sobre hyoga y la relación que tenían aunque ellos no se involucraban después de todo ya eran adultos, su madre incluso lo aprobaba, pues le parecía un yerno muy atractivo y le agradaba que no fuera interesado como fue el caso de cierta novia de Ikki.

Llego la fecha del parto por lo que Hyoga había sido avisado, el rubio llego al hospital tan rápido como pudo y se sentó junto a Ikki, en ese momento sus suegros estaban de vacaciones y conocerían a su nieto al día siguiente.

Hyoga estaba muy impaciente daba vueltas de un lado a otro, deteniendo a cualquier enfermera o doctor que veía.

- O te calmas o te calmó - dijo Ikki  harto de verlo ir y venir - en cuanto ellos tengan noticias nos lo dirán-

Hyoga se sentó entonces y un doctor salio.

-Felicidades es un niño muy sano-

Hyoga entro y vio a su novio cansado y entre sus brazos..

Hyoga le dio un beso en la frente a Shun y acaricio la mejilla del niño, había válido la pena el trabajar sin descanso durante los últimos seis meses, al verlo todo valía la pena

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Hyoga le dio un beso en la frente a Shun y acaricio la mejilla del niño, había válido la pena el trabajar sin descanso durante los últimos seis meses, al verlo todo valía la pena.

Aunque le quedaba dinero suficiente  para pagar un par de meses en una modesta casa Hyoga decidió que aun no era tiempo.

Así que siguió trabajando duro los siguientes meses, sin descuidar su relación con su novio y con su hijo pues sabia lo indispensable que era que el bebe sintiera ese vinculo con el.

Luego de que el bebe cumpliera seis meses, Hyoga ya estaba listo para dar el siguiente paso, fue rumbo a la casa de Shun topándose con Ikki quien lo miraba molesto.

-Deberías reconsiderarlo o es que no ves a lo que mi hermano esta acostumbrado? - dijo Ikki mostrándole el lujo de aquella casa.

- Lo se, pero se también que los cuartos de los dormitorios tienen solo lo básico y aun así el tiempo que estuvimos juntos el no necesito nada mas -

- Solo recuerda que ahora tienes un hijo y la vida sera muy distinta para ellos, este niño tiene su propio cuarto juguetes finos, aquí no le falta nada que tendría allá que no tenga aquí? -

- A mi y el inmenso amor que le tengo por el que haré todo por verlo feliz -

Ikki se dio la vuelta, dejándolo pasar debía aceptar aquel hombre tenia carácter.

Shun tenia sus cosas listas y llevaba en brazos a su bebe, Hyoga lo hizo entrar a un taxi llevando solo lo importante, dieron un par de vueltas hasta llegar a una casa que lucia muy simple pero que para Shun era como un palacio.

Hyoga cargo a Shun y juntos atravesaron la entrada para empezar bien su nueva vida al lado de su pequeño Alexei Kido.

Un domingo cualquieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora