Un domingo cualquiera

Historia cliche

Estaba agitado y temeroso oculto de aquella cosa que fuera lo que fuera había dejado muerte a su paso.

Escucho unos pasos arrastrarse y cubrió su boca tratando que aquello no descubriera su escondite, trataba por todos los medios que nada lo delatara, dejando de respirar a ratos si con eso evitaba que aquello lo encontrara.

No recordaba con claridad como había llegado ahí pero no podía moverse con facilidad pues su pierna tenia una herida que aun sangraba hecha quizás con un cuchillo, una vez que aquellos pasos se alejaron se levanto para tratar de recordar lo que había sucedido.

Lo único que sabia era que corría peligro pues había despertado en el piso de la cabaña.

Sobre ella yacía una pareja que había sido brutalmente masacrada, por la posición en que se hallaban parecía que alguien sin duda había interrumpido su diversión.

El rostro lleno de sangre de la chica reflejaba un terror infinito.

Ahora que recordaba se trataba de Pandora y su novio Ikki los chicos que habían encontrado a mitad del camino varados  sin gasolina por suerte el e Isaac se habían detenido para auxiliarlos y llevaban gasolina suficiente para que llegaran a la siguiente gasolinera y pudieran reponerla.

Entonces que recordó que había un tercer pasajero y era Shun el hermano de Ikki, era de noche, ¿donde estarían Shun e Isaac?

Recordó también que los cinco habían entrado a una cafetería donde almorzaron y ya que casualmente irían al mismo sitio seria mejor dividir gastos y rentar una cabaña grande para los cinco.

La mirada de Shun estaba sobre el con claras intenciones de terminar en  su cama y el no se negaría ese muchacho le había gustado mucho.

Hyoga decidio enfocarse de nada le servía recordar si no lo ayudaba a saber que había pasado, camino por los alrededores encontrando a un peliaqua que había sido asfixiado.

- Camus - dijo, él y su novio Milo se habían unido a los cinco pues al llegar a las cabaña el costo por rentar una solo para ellos parecía exceder su presupuesto y Milo regateaba con la recepcionista sin éxito.

Había sido idea de Isaac hablar con ellos y lograron rentar una cabaña para diez personas la cual estaba sumamente espaciosa y les permitiría tener su propia habitación en una zona mas privada.

-Pero que hace Camus lejos de la cabaña y si el esta aquí ¿donde esta Milo? - pensó y avanzo la respuesta aparecería a unos metros pues Milo yacia de cabeza colgando de un arbol la boca cubierta y su garganta cortada de lado a lado.

Hyoga se cubrió la boca esa escena solo le provocaba que el estómago se le revolviera además la sangre que goteaba estaba manchando sus zapatos.

El temor lo invadió - ¿y si Shun esta .... muerto? ¡No! - se reprendió a si mismo - Seguro esta tratando de escapar justo como yo lo hago -

-¿Donde esta? - de nuevo trato de recordar.

Todos habían tomado su habitación y aprovechando la distracción de su hermano Shun había entrado en su habitación.

Con confianza se acostó en la cama mirándolo, Hyoga le sonrió y se acostó con el, se comenzaron a besar, el rubio quedo sobre el haciendo que sus sexos chocaran y Shun comenzara a gemir levemente.

A solo unas horas de haberse conocido ya tenían sexo ignorando por completo que la cabaña estuviera llena, por lo menos así fue hasta que Isaac abrió la puerta.

- Hyoga olvidaste tus... -

- Perdón, no pensé que ustedes ...
... olvidenlo - decía mientras cerraba la puerta.