Detective -George Shelley-

Capitulo 21 "Una parte de mi pasado"

-¿Por que dices eso?

-Lo digo porque ayer Mia se puso mal y le han diagnosticado anemia.

Mire sorprendido a Perrie, pero aparte la mirada ahora viendo con cierta preocupación a Mia, quien esquiva mi mirada

-Perrie dejanos solos.- dije aun sin dejar de mirar a Mia, esta evitaba mi mirada a cualquier costa.

-No creo que sea buena idea...

-Dejanos solos, Perrie.- la interrumpi un poco mas enojado.

Perrie se fue enojada y cerro la puerta tras ella.

-¿Porque lo haces?

-Ahmm...

-Dime la verdad.

-Simplemente no tengo hambre.- susurra aun mirando el suelo.

-Se que hay mas...

Mia suspira y por fin levanta la mirada para que nuestras miradas, azul con avellana se encontraran.

-E-es una larga historia... pero te lo diré cuando estes mejor. No es momento para eso.

-¿Me lo dirás?

-Sip, te contaré de mi pasado, pero despues.

-Esta bien.

-Pero... con la condición de que me cuentes quien es Emma.

Me sorprendí al escuchar ese nombre de la boca de Mia, ¿como demonios sabe de la existencia de Emma? Odiaba hablar de ella, por que cada vez que recuerdo toda la mierda que me hizo Emma me entra una rabia, por su maldita culpa mi vida se volvió mas miserable de lo que ya era. Odiaba el hecho de solo escuchar su nombre hasta a todos tienen prohibido hablar o decir su nombre. Mi enojo era notable pero decidí calmarme ya que era Mia con quien estaba en estos momentos.

-¿Como sabes de Emma?- trate de controlar mi voz lo mejor posible cosa que resulto ya que mi tono de voz no fue frío.

-Una vez escuche a las chicas nombrarla, les pregunte y solo me dijeron que fue solo alguien en tu vida... Se que fue algo mas para ti.

Me quede callado, no sabia si hablar sobre Emma o no. Fue hace tiempo y llevo todos estos años sin hablar de lo ocurrido con ella.

-Te comprenderé si no quieres hablar.- me alentó con una pequeña sonrisa dandome una confianza única.

Debo de admitir que con Mia siento cosas que en toda mi vida no he logrado sentir jamas, ella saca al antiguo George de mi, el cual no me agrada mucho que salga pero es inevitable con Mia, ella simplemente es mi perfecto y hermoso ángel.

Suspire y una sonrisa curvo en mis labios.

"No puedo creer que le vallas a decir."

"Ni yo."

Me removi en la cama, ignorando el dolor para dejarle un espacio a Mia en la cama, le indique para que se acostara a mi lado. Ella obedeció y tratando de no lastimarme se acostó a mi izquierda abrazando con sus pequeños y delicados brazos mi cintura siendo lo mas delicada para no dañarme, pero aunque suene raro su tacto era mas bien una cura para mi. Mia subió la mirada para que nuestros ojos se encontraran.

-Mia... mi vida ha sido muy dura.- comenze a hablar sin dejar de mirarla. -Toda una completa mierda, por todas esas cosas es el porque soy así, tu sabes perfectamente de que un santo no soy y lo has logrado ver. Se que tienes la sospecha de que los chicos y yo estamos metidos en cosas ilegales, no te lo negaré pues dado a que tenemos muchos 'negocios' por asi decirlo que no son del todo legales. He matado a mucha gente durante la mayoría de mi vida.- espere una reacción de Mia pero no logre ver nada, corrí la mirada al techo blanco rompiendo el contacto visual y continúe -He estado en muchas peleas ilegales, carreras, apuestas desde los trece años.- abraze mas a Mia, dolio un poco pero me encanta tenerla cerca, su piel, su aroma toda ella me hace otra persona y se que la necesitaré por lo que voy a contar. -Cuando yo tenia diez años, recuerdo decir que tenia la mejor familia y eramos muy felices. Mis padres, mis hermanos y yo. Hasta me acuerdo que yo les presumía a todo mundo que tenia la mejor familia del mundo...- una pequeña sonrisa salio de mis labios al recordar aquello. -Pero todo eso acabo cuando mis padres murieron en un accidente automovilístico, fue horrible para mis hermanos y para mi. Despues de su muerte, Rayn nuestro tío se hizo cargo de nosotros solo por la gran herencia de nuestros padres. Se podría decir que mis padres tenían mucho dinero... Bueno siguiendo, Rayn al ver que le salio mal su jugada, pues dado que el testamento de nuestros padres decía que los únicos que teníamos derecho a todo eramos nosotros tres, Harriet, mi hermano mayor Dylan. y yo, pero hasta que todos tuviéramos la mayoría de edad. El nos comenzó a maltratar, nos golpeaba con todo lo que se podía y los insultos nunca faltaron... también nos cambio de escuela en la siempre fui víctima de Bullying, mis hermanos por suerte no sufrieron en sus escuelas. Pero de todos modos cuando llegabamos a 'casa' no teníamos escapatoria alguna. Asi pasaron tres años mas, todo era una mierda, Dylan ya tenia dieciséis, Harriet de diez y yo trece. Pero algo cambio, Dylan se había vuelto como la mano derecha de Rayn, nunca le puso una mano encima a Harriet, pero yo no tuve la misma suerte dado a que me golpeaba e insultaba por las ordenes que Rayn le daba, ¡mi propio hermano me golpeaba, me trataba como una basura! Ya no nos defendía como antes, el nos dio la espalda para no sufrir no ser maltratado, el muy cobarde.- mis palabras salen frías, sin sentimiento alguno. -El único apoyo que teníamos Harriet y yo era Perrie. Mis papas y los papas de Perrie fueron mejores amigos por lo tanto nos conocíamos de toda la vida, repitiendo el patrón dado que Perrie es mi mejor amiga. Siguiendo Perrie sabia todo pero le había prohibido hablar de algo sobre lo que nos pasaba a sus papas, pues yo decía que era solo nuestro problema y de nadie mas. Pero entonces paso... Rayn llego borracho como todos los días pero esa vez fue la primera vez que intento abusar de mi hermana por supuesto yo trate de defenderla...

FlashBack

-¡Ayuda!

Corrí al cuarto de Harriet y pare es seco al ver al maldito que se hacia pasar por nuestro tío, arriba de Harriet sobre la cama. Este trataba de besarla y la tocaba suciamente, mientras Harriet lloraba. No espere un minuto mas y le di un fuerte golpe a Rayn, logrando que cayera al piso dejando a mi hermana libre.

-Oh valla. Ahora el hermanito salva el día.- dijo sarcástico mientras de levantaba.

-No te acerques a mi hermana de nuevo.- amenazo y me sorprendo al notar mi voz fría y escalofriante.

-¿Quien lo va impedir? ¿tu?... No me hagas reír niño. Tu no puedes, ni siquiera puedes contigo mismo.

No dije palabra alguna y solo me lanze a el para comenzar a golpearlo. Ya no era un niño débil por asi decirlo, ya que hace poco decidí cambiar por lo tanto ahora ya me enfrentaba a los niños que me acosaban y me he metido en bastantes peleas en las cuales he logrado mejorar y dejar como una mierda a los niños que quería.

No se en que momento paso pero yo me distraje dado a que Dylan había entrado por fin a la habitación. Mi distracción provocó que Rayn lograra ponerme de bajo suyo para comenzar a apretar muy fuerte mi cuello dejando cada vez mas sin aire en mis pulmones, busque con mi mirada ayuda en Dylan pero este estaba quieto sin hacer nada. Cuando por fin reaccionó, no me ayudo si no fue que tomo a Harriet en brazos y se la llevo, dejandome ahí solo.

Tome fuerza suficiente y logre separarme de Rayn, le di una patada en donde mas le duele a los hombres, mire a mi alrededor para encontrarme con la pistola de Rayn, siempre la traía con sigo. Aproveche y rápido la tome, para despues apuntar donde estaba el maldito que hacia de mi vida una mierda desde hace tres años.

-No eres capaz de dispararme.

-¿Eso creés?

-Vamos eres solo un niño. No vas a matarme. Además ni siquiera sabe utilizar un arma.

-¿Por que no? No eres nada, nadie te va a extrañar. Entonces no hace falta tu existencia. Has hecho de mi vida y la de mis hermanos un infierno, es hora de que pagues aunque sea un poco.¿Y como sabes si se ultilizar un arma o no? - le quite el seguro a la pistola y aprete el gatillo disparandole a su pierna derecha y este grito de dolor. -No juzgues antes de hablar. Te dire que antes de el accidente de mis padres, estaba en tiro con armas. No es por presumir pero era muy bueno.- apunte hacia su pierna izquierda y dispare. Rayn volvió a gritar a lo que yo sonreí. -Y al parecer lo sigo siendo. Nos vemos en el infierno.- no dijo palabra y paso.

Fin del FlashBack

-Habia matado por primera vez a alguien. Y a la edad de los trece años.

-No fue tu culpa George, solo fue en defensa propia y...- la interrumpi.

-Eso no importa, no lo entiendes. Ese no era yo, simplemente no me importo matarlo, al contrario me gusto ver como salia su sangre del su cuerpo sin vida. Me gusto esa sensación, simplemente otro George había aparecido.

-¿Que paso con Harriet y Dylan?

-El muy maldito se llevo a Harriet. Despues de lo ocurrido los padres de Perrie se hicieron cargo de mi, ellos saben lo que hice y no me juzgaron, solo me aceptaron. La verdad estoy muy agradecido con ellos. Cuando cumplí los 18, cobre mi herencia. Lo raro es que Dylan no la había cobrado cuando cumplió los dieciocho, cuando le pregunte al abogado de nuestra familia dijo que mis hermanos estaban por asi decirlo desaparecidos, con mi dinero contrate a alguien para buscar a Harriet, tres meses despues encontré a mi hermana en Bradford. Dylan al parecer la dejo ahí para luego irse, Harriet conoció a Walika la hermana de Zayn. Su familia cuido de mi hermana todo ese tiempo. Hasta que la encontré... Esa es una parte de mi pasado, Mia.