Termino de desayunar y, con miedo, me acerco al despacho de Nicolae. En cuanto entro, me hace sentarme en una silla y se apoya en el escritorio mirándome fijamente mientras cruza los brazos.
—¿Qué pasó ayer, Cris?
Me quedo alucinada. Lo último que me esperaba es un interrogatorio. Mejor me curo en salud.
—¿A qué te refieres, Nicolae?
—No te hagas la tonta conmigo. Hablo del numerito de ayer entre Drogo y tu novio.
Lo que me temía. Y encima no puedo mentir sabiendo que es capaz de leerme la mente.
—Por lo que sé, Drogo me trajo el viernes a casa porque iba un poquito borracha.
—¿Un poquito? —pregunta sonriendo irónicamente.
—Vale, mucho. ¿Contento?
—Sí. Y déjame decirte que deberías beber menos. Si en lugar de Drogo te llega a encontrar otro, podrías haberlo pasado mal.
Perfecto. Ahora sermón post borrachera.
—Lo sé. Lo sé. Bueno. El caso es que Samantha...
—¿La del puñetazo?
—Sí. La misma. El caso es que nos vio y malinterpretó la situación, se lo dijo a Justin y éste se puso celoso.
—¿Y no se lo has explicado?
—No he tenido tiempo.
—Entiendo. ¿Tienes claro que tener algo con Drogo es una mala idea?
—Tranquilo. Eso es algo que tengo muy claro.
—Perfecto. Ahora vamos con la clase de hoy. Me he dado cuenta de que te preocupa mucho que seamos capaces de leerte la mente, así que hoy voy a enseñarte a bloquearla. Esto te servirá de defensa.
—¿Lo dices en serio?
Nicolae asiente sonriendo y no puedo evitar lanzarme a sus brazos. Me retiro enseguida porque noto que está incómodo.
—Perdona, Nicolae. Yo...
—No te preocupes, lo entiendo. Ahora vamos a empezar.
Durante toda la mañana, Nicolae me tiene haciendo gran cantidad de ejercicios mentales. A mediodía ya he avanzado bastante pero espero que no sea todo tan difícil como esto. Creo que la cabeza me va a estallar.
—Bueno, Cris. Por hoy creo que ya es suficiente. Tomate la tarde de descanso y no olvides seguir practicando. Cuanto más lo domines, más fuerte te harás.
Asiento con la cabeza y voy a la cocina a prepararme un bocadillo. Debería comer mejor pero ahora mismo no tengo ganas de hacer nada. Estoy tan cansada que sólo quiero comer y echarme la siesta.
Me tumbo en la cama dispuesta a dormir cuando suena el teléfono. Me sorprende ver que es Justin. Aún estoy enfadada con él por lo que espero un poco antes de contestar.
—Dime, Justin —respondo seria.
—Hola, preciosa. ¿Qué tal estás?
—¿Tú que crees?
—Yo... lo siento mucho. Sé que me he portado como un imbécil. ¿Podrás perdonarme?
—No sé. Mira, Justin, eres muy majo pero no soporto los celos y creo que con eso tú tienes un gran problema.
—Lo sé y quiero compensarte. ¿Te apetece que demos un paseo? Tengo un par de horas libres.
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DC I: DESTINOS CRUZADOS √
FanficCristina, una joven estudiante y au-pair, descubre, de repente, que su vida no es tan sencilla como ella creía. Dos hombres totalmente opuestos se pelean por su corazón. Además, multitud de secretos amenazan con salir a la luz y arrastrarla con ello...