BLACK // Completa ||EN EDICIÓN

Capítulo 24

Mis ojos estaban sobre el trayecto. Leonardo sostenía mi mano a pesar de estar conduciendo en silencio justamente a mi lado.

— El día esta muy hermoso — comentó el para aligerar un poco el ambiente.

Asentí leve con un pequeño movimiento de cabeza.

Eran las 11:30 de la mañana. Leonardo me había invitado ir al Zoológico nuevo que habían inaugurado en la ciudad. Estaba ansioso y habíamos optado por ir temprano.

Era domingo. Día de descanso.

Y además de ser "Domingo" era una de nuestras primeras citas oficiales como pareja. Estaba emocionada por ello.

— Solo esperemos que más tarde no haga mucho calor — le respondí.

El sonrió leve manteniendo su vista hacía frente. La carretera estaba algo solitaria así que no tardaríamos mucho.

Decidí bajar un poco la ventana para que el aire fresco entrara por el auto.

— ¿Qué te parece si ponemos música, nena?

Propuso sonriendo.

— Me parece excelente.

Extendió su mano dejando por unos segundos la mía para encender la música. La primera canción que había sonado en el lugar fue "Trampoline" de Zayn y Shaed.

El había comentado cantar en voz muy baja. Muy apenas audible para el puesto que mis oídos lo recibían como murmullos.

Mientras yo me había enfocado en cantar mentalmente.

Después de unos minutos que fueron bastantes rápidos y veloces por la compañía de la música ya nos encontrábamos estacionando fuera del Zoológico.

Había variedad de árboles que adornaban el camino tanto parejas o padres con sus niños entrando al lugar y saliendo.

— Hemos llegado, linda — anunció.

Ambos nos quitamos el cinturón de seguridad dispuestos a bajar no sin antes haber apagado el vehículo.

Leonardo había bajado rápidamente para rodear la parte delantera del auto y acercarse a mi lado. Tomo la puerta del asiento del copiloto y la abrió sonriéndome ampliamente.

Reí leve al verlo extenderme su mano para tomar la mía.

— Madame — dijo sonriendo ayudándome a bajar de la camioneta.

— No era tan necesario.

Dije en unas pequeñas risas al estar abajo. El cerró la puerta para entrelazar nuestras manos y sonreírme.

— Claro que lo es — se encogió de hombros — ¿Qué tipo de novio seria al no ayudar a mi dama bajar con todo su esplendor?

Reí leve y lo observé. Cerró el auto y después comenzamos a caminar para adentrarnos al zoológico.

Al estar dentro había muchas personas. Al parecer la inauguración había sido algo... famosa por la cantidad de gente que había y nos rodeaba mientras caminábamos.

— Este lugar tendrá buenas ganancias — dijo Leoanrdo aún caminando teniendo nuestras manos entrelazadas.

— Al parecer si — concordé con el.

Había un pequeño estante de mapas y flechas que indicaban los caminos.

— ¿A dónde iremos primero? — ahora había preguntado yo.

— No lo se, nena. ¿A dónde te gustaría ir?

Me quedé pensando algunos segundos. Estiré de su mano para acercarnos al gran mapa del lugar.